Kasp¨¢rov vuelve a la arena, contra Carlsen, un 11-S

El torneo 9XL, que organiza este fin de semana el Club de Ajedrez de San Luis (Misuri, EEUU) en la plataforma Lichess.com, simboliza el poder intercultural del ajedrez. Gari Kasp¨¢rov, de 57 a?os, reaparece tres d¨ªas para enfrentarse a Magnus Carlsen, de 29, con quien solo jug¨® en 2004. Lo hace un 11-S, exactamente 25 a?os despu¨¦s de la primera partida de su duelo con Viswanathan Anand en el piso 107 de las Torres Gemelas. Y durante una pandemia que ha disparado las audiencias del ajedrez en internet. Las partidas empiezan a las 20.00 (hora peninsular espa?ola; 15.00 en Buenos Aires; 13.00 en Ciudad de M¨¦xico y Bogot¨¢; 14.00 en Nueva York).

¡°Al menos no tengo que recordar c¨®mo se sit¨²an las piezas para empezar¡±, tuite¨® Kasp¨¢rov el martes, en referencia a que la modalidad 960 consiste en sortear la ubicaci¨®n de los trebejos de la primera fila unos minutos antes de cada ronda, para que las toneladas de an¨¢lisis de las aperturas en la modalidad cl¨¢sica no sirvan para nada (hay 960 posiciones iniciales distintas). Y sigui¨® bromeando: ¡°Si no lo hago bien, al menos podr¨¦ demandar judicialmente a mis j¨®venes rivales por abuso de un anciano¡±.

Quien conoce al maximalista Kasp¨¢rov sabe que su list¨®n de ¡°no hacerlo bien¡± est¨¢ mucho m¨¢s arriba de lo que indica el sentido com¨²n: su edad implica un fuerte deterioro de la rapidez de reflejos (las partidas son de 20 minutos por bando m¨¢s diez segundos adicionales tras cada movimiento), menor resistencia f¨ªsica (son tres rondas diarias, tres d¨ªas seguidos) y una ambici¨®n muy inferior a la de otro 11 de septiembre, el de 1984, cuando comenz¨® el primero de sus cinco duelos con Anatoli K¨¢rpov, que conformaron la mayor rivalidad en la historia de todos los deportes.

Pero a¨²n hay m¨¢s. Desde que huy¨® (en 2013) con su esposa e hija a Nueva York porque su vida corr¨ªa peligro en Mosc¨² (donde se qued¨® su madre, muy influyente en ¨¦l) por ser uno de los opositores m¨¢s activos y famosos de Vlad¨ªmir Putin, Kasp¨¢rov es cada vez m¨¢s activo en la cr¨ªtica a Putin y a Donald Trump, en las conferencias sobre toma de decisiones para altos directivos, en la fundaci¨®n de derechos humanos que preside (Human Rights Foundation), en los debates sobre el peso de la inteligencia artificial y otros asuntos conectados con esos. Nunca se ha desconectado del ajedrez, pero su tiempo para jugar partidas por internet es muy limitado.

Por si todo ello fuera poco, los rivales son dur¨ªsimos. Carlsen es el principal favorito junto al estadounidense Hikaru Nakamura, quien no solo rivaliza con el noruego en las modalidades r¨¢pidas (el 20 de agosto perdi¨® ante ¨¦l la muerte s¨²bita de un duelo ¨¦pico en la superfinal del circuito de torneos r¨¢pidos Magnus Carlsen) sino tambi¨¦n en las redes sociales, con emisiones en Twitch que atraen a m¨¢s de medio mill¨®n de aficionados. El grupo de los capaces de ganar el torneo se ampl¨ªa con Fabiano Caruana y Wesley So (tambi¨¦n estadounidenses), Maxime Vachier-Lagrave (franc¨¦s) y Lev¨®n Aroni¨¢n (armenio).

Los otros tres no parecen capacitados para llevarse el primer premio, 37.500 d¨®lares (31.648 euros) de los 150.000 (126.594) de la bolsa total, pero s¨ª para tumbar a cualquiera. Son el cubano-estadounidense Leinier Dom¨ªnguez (excampe¨®n del mundo en la modalidad rel¨¢mpago), P¨¦ter Sv¨ªdler (octacampe¨®n absoluto de Rusia) y el prodigioso iran¨ª (exiliado en Francia) Alireza Firouzja, de 17 a?os, a quien EL PA?S apunta desde 2017 como gran rival de Carlsen en un pr¨®ximo futuro. Ser¨¢ una liga a una vuelta entre diez, cuyo orden de emparejamientos no se conocer¨¢ hasta poco antes de la primera ronda.

Es decir, el puesto l¨®gico de Kasp¨¢rov es el ¨²ltimo, que ya ocup¨® hace un a?o en un torneo similar, pero presencial, en San Luis (EEUU), siempre bajo el mecenazgo del multimillonario Rex Sinquefield. ?l, por muy maximalista que sea, lo sabe. Tambi¨¦n valora que enfrentarse a Carlsen a los 57 a?os es una gran noticia, y un motivo m¨¢s para consolidarse como el campe¨®n que m¨¢s ha contribuido a la popularidad del ajedrez en sus 1.500 a?os de historia documentada. Sin embargo, el motor principal de Kasp¨¢rov para aceptar este desaf¨ªo herc¨²leo es otro: su madre, Clara Shagenovna, lo educ¨® para que su vida fuera una sucesi¨®n incesante de retos tremendos, dentro y fuera del tablero.