Joan Barreda, mucho gas y poca estrategia
El de Honda, uno de los tres pilotos con m¨¢s triunfos en la historia del rally, busca su primer Dakar sin renunciar a su estilo
Hay pilotos que no saben aflojar. Joan Barreda (Torreblanca, Castell¨®n; 37 a?os) es uno de esos pilotos. Formado en el motocross, su gran pasi¨®n, disputa este a?o su und¨¦cimo Dakar. Y ni queriendo pudo ayer renunciar a la victoria de etapa. Como leen.
El de Honda, que hab¨ªa salido en la 17? posici¨®n este viernes tras las dificultades en la navegaci¨®n el d¨ªa anterior al abrir pista como ganador de la etapa del mi¨¦rcoles, sali¨® al ataque desde las posiciones m¨¢s retrasadas. Su intenci¨®n inicial era no solo ganar, sino, sobre todo, recortar minutos a sus rivales en una etapa que se preve¨ªa dura, larga y con dificultades, tanto t¨¦cnicas, con muchas dunas, como de navegaci¨®n. Pero no fue as¨ª. La jornada del jueves, en la que fue especialmente dif¨ªcil encontrar la ruta correcta, dej¨® a tantos veh¨ªculos rezagados entre las dunas ¡ªmuchos pasaron la noche en el desierto¡ª, que la organizaci¨®n decidi¨® retrasar la salida de los pilotos del vivac en Al Qaisumah en una hora y media. Y tambi¨¦n acortar en 100 kil¨®metros la etapa de ayer.
Suavizada la especial, Barreda, siempre rapid¨ªsimo, decidi¨® al acercarse a la meta que ser¨ªa preferible ceder el triunfo a alguno de sus rivales para evitar tener que volver a abrir pista en la siguiente cronometrada. As¨ª que se fren¨® y dej¨® correr el tiempo. Esper¨® algo m¨¢s de un minuto pues pens¨® que as¨ª no quedar¨ªa primero. Pero err¨® con sus c¨¢lculos. Ross Branch (Yamaha) y Daniel Sanders (KTM) fueron 13 y 53 segundos m¨¢s lentos que ¨¦l. Y su principal rival por el t¨ªtulo, Toby Price, l¨ªder de la general, se dej¨® casi cuatro minutos. Y volver¨¢ a salir este domingo ¡ªhoy es la etapa de descanso¡ª en una magn¨ªfica posici¨®n, s¨¦ptimo, para ampliar su ventaja. O eso parece.
Porque, como bien demostr¨® Barreda ayer, no todos los planes salen bien en el Dakar. Y en una carrera tan tuya-m¨ªa como estamos viendo este a?o, en la que la estrategia desempe?a un papel fundamental y los resultados son como un yoy¨® ¡ªun d¨ªa ganas, al otro no entras ni en el top 10¡ª ganar etapas no lo es todo.
Bien lo sabe el espa?ol, que en sus diez participaciones cuenta cuatro abandonos. Representa como nadie la esencia del Dakar, una carrera dur¨ªsima en que terminar es todo un ¨¦xito. Y sufrir varapalos est¨¢ a la orden del d¨ªa. Ya el a?o de su debut, Barreda tuvo una ca¨ªda que le dej¨® fuera de la competici¨®n en la segunda etapa; al a?o siguiente logr¨® su primera victoria. Y desde entonces no ha parado de sumar. Aunque sus 27 victorias ocultan una espina que lleva bien clavada: no le sirvieron para ganar el Dakar. Por ahora.
? The best bits from stage 6, in under a minute#Dakar2021 pic.twitter.com/gnUB9YgaQI
— DAKAR RALLY (@dakar) January 8, 2021
De momento, el 2021 le sonr¨ªe. Ganar 27 especiales del Dakar en la categor¨ªa de motos est¨¢ solo al alcance de unos privilegiados. Y ¨¦l lo es. Con el triunfo de ayer, el tercero este 2021, el espa?ol se sit¨²a entre los tres pilotos con m¨¢s victorias de etapa de la historia de la carrera. Por delante tiene a dos m¨ªticos: St¨¦phane Peterhansel y Cyril Despres, ambos con 33 triunfos, seis t¨ªtulos para el primero, cinco para el segundo.
Claro que a Barreda le gusta casi m¨¢s correr que jugar a ganar el Dakar. La estrategia, en su caso, pasa a un segundo plano. Eso ¡ªy una buena dosis de mala suerte¡ª lo ha dejado, a menudo, fuera de la pelea por el t¨ªtulo. Pues las ca¨ªdas a toda velocidad han acabado por sentenciar su carrera. No hay m¨¢s que mirar su historial en los ¨²ltimos tres a?os: en 2018, por ejemplo, abandon¨® por problemas en la rodilla y la mu?eca cuando era segundo de la general; en 2019, una ca¨ªda acab¨® con ¨¦l en una hondonada llena de rocas de la que le cost¨® salir m¨¢s de una hora: perdi¨® el liderato; el a?o pasado lleg¨® tocado por un accidente los d¨ªas previos, corri¨® con una fisura en las costillas, se cay¨® en dos etapas y acab¨® hecho una piltrafa. Despu¨¦s de aquello hasta gan¨® una etapa. Y termin¨®. Lleg¨® a la meta final en Qiddiya. Pero sin opci¨®n alguna de pelear por un Touareg que se le resiste como a pocos.
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