Salvar los Juegos Ol¨ªmpicos en una burbuja gigante

La redundancia de la pregunta ¡ª?se disputar¨¢n los Juegos Ol¨ªmpicos el pr¨®ximo verano, del 23 de julio al 8 de agosto?¡ª abunda en el escepticismo con que se asimila una respuesta siempre positiva. La pandemia persiste en todo el mundo; Jap¨®n ha declarado el estado de alarma en varias zonas incluida la de Tokio; seg¨²n una reciente encuesta de Kyodo News un 80% de los japoneses desean que los Juegos se cancelen o se pospongan de nuevo, y The Times public¨® el jueves que un miembro del Gobierno japon¨¦s asegura que los Juegos se cancelar¨¢n y solo se est¨¢ buscando la mejor f¨®rmula para anunciarlo y asegurarse de la concesi¨®n de la edici¨®n de 2032. Thomas Bach, el presidente del Comit¨¦ Ol¨ªmpico Internacional (COI), reitera: ¡°En este momento, no tenemos ninguna raz¨®n para creer que los Juegos no se inaugurar¨¢n el 23 de julio en el Estadio Ol¨ªmpico de Tokio¡±.

Quedan seis meses para que se cumpla la pr¨®rroga que se concedieron el Gobierno japon¨¦s y el COI cuando, el 24 de marzo de 2020, proclamaron que ¡°la luz al final del t¨²nel que iba a se?alar el triunfo de la humanidad¡± brillar¨ªa, pero no el 24 de julio de 2020, sino en 2021. ¡°No hay un plan B¡±, insiste Bach. ¡°Estamos totalmente comprometidos en hacer que estos Juegos sean seguros y exitosos¡±. El COI se remite a algunos acontecimientos deportivos como la burbuja que la NBA fabric¨® en Disney World, Orlando, para concluir la pasada temporada desde el 30 de julio hasta el 11 de octubre o el Mundial de balonmano que se celebra en Egipto.

El COI, sin embargo, observa con inquietud los problemas que se han sucedido a ra¨ªz del desplazamiento y la estancia de los tenistas de medio mundo para competir en el Open de Australia de tenis. Los casos positivos registrados durante los vuelos y en los d¨ªas siguientes ya en suelo australiano, las cuarentenas y la imposibilidad de algunos para entrenarse de forma m¨ªnimamente adecuada han sembrado algunos momentos de caos. Varios tenistas han asegurado que, de haberlo sabido, no hubieran competido en Australia.

P¨¦rdidas millonarias

Pere Mir¨®, el director general adjunto del COI, incide en el precepto que gu¨ªa a la matriz ol¨ªmpica: ¡°Vamos a por los Juegos¡±, sentencia el dirigente catal¨¢n, ¡°pero no vivimos fuera de este mundo, y por tanto tenemos que estar dispuestos a ver c¨®mo evoluciona la pandemia¡±. Una de las certezas con las que se trabaja en el COI es que los Juegos de 2021 ser¨¢n muy diferentes a los de las 31 anteriores ediciones. ¡°No ser¨¢n los que estamos habituados a ver. No ser¨¢n igual¡±, subraya Mir¨®. Un criterio que comparte Alejandro Blanco, presidente del Comit¨¦ Ol¨ªmpico Espa?ol (COE): ¡°Aunque los Juegos no sean como los de antes, y de eso estoy convencido, los deportistas van a estar bien¡±.

Los organizadores de Tokio trabajan para definir c¨®mo ser¨¢ la burbuja gigante con la que se pretende garantizar a todos los acreditados en los Juegos una protecci¨®n m¨¢xima frente al coronavirus. El COI suele referirse a ese grupo como la familia ol¨ªmpica e incluye a deportistas, entrenadores, directivos, periodistas, jueces e invitados. El sistema de burbuja tambi¨¦n impedir¨¢ que unos grupos se mezclen con los otros y que la convivencia que caracteriza la vida en la Villa Ol¨ªmpica no sea posible en esta ocasi¨®n.

¡°Estamos trabajando para concienciar a todos aquellos que acudan a los Juegos que se tendr¨ªan que vacunar. Pero hay que resolver un problema previo y es la posibilidad de que no todos lo puedan hacer porque la manera en que se est¨¢ desarrollando la vacunaci¨®n var¨ªa de un pa¨ªs a otro, depende de las homologaciones de cada vacuna en cada pa¨ªs y de un mont¨®n de factores¡±, explica Mir¨®. Otra premisa imprescindible para que el COI establezca sus propios protocolos sanitarios es saber qu¨¦ medidas puede adoptar el Gobierno japon¨¦s hasta el momento en que se disputen los Juegos y si, por ejemplo, exigir¨¢ la vacuna obligatoria, no ya a los deportistas, sino a cualquier persona que viaje al pa¨ªs. ¡°En el caso de que no sea as¨ª¡±, a?ade Mir¨®, ¡°nos preguntamos hasta qu¨¦ punto podemos obligar a que los deportistas y los miembros de la familia ol¨ªmpica se vacunen, hasta qu¨¦ punto jur¨ªdicamente, e incluso ¨¦ticamente, es posible. Y si no, cu¨¢les son las precauciones que se deber¨¢n tomar¡±. El COI, sin una respuesta concreta, trabaja en esos escenarios. Junto al Comit¨¦ Organizador trabaja en la implementaci¨®n de un protocolo muy estricto que incluir¨¢ multitud de pruebas de la covid-19 y un seguimiento constante a cuantos est¨¦n en la ¨®rbita de los Juegos.

El COI proyecta que los deportistas lleguen a la Villa Ol¨ªmpica de Tokio no antes de cinco d¨ªas de la fecha de su competici¨®n y que la abandonen como m¨¢ximo dos d¨ªas despu¨¦s. Las ceremonias de apertura y de clausura quedar¨¢n restringidas a 6.000 de los 11.000 deportistas que participar¨¢n en los Juegos y solo acudir¨¢ una peque?a representaci¨®n de los jueces y ¨¢rbitros.

Ni el COI ni el Comit¨¦ Organizador quieren dar a¨²n alguna pista sobre c¨®mo se resolver¨¢ el problema de la asistencia de p¨²blico a los estadios. Solo han dejado caer que, evidentemente, no habr¨¢ posibilidad de llenar todas las gradas de los estadios e instalaciones donde se compita, y que las restricciones ser¨¢n obligatorias. ?A cu¨¢nto alcanzar¨¢n? ?Se permitir¨¢ la entrada de aficionados extranjeros que seguramente ya compraron entradas para las fechas de 2020? ?C¨®mo se proceder¨¢ con la devoluci¨®n de entradas? ?C¨®mo reaccionar¨¢ la industria hotelera de la capital de Jap¨®n que se hab¨ªa lanzado a construir decenas de hoteles nuevos?

Seg¨²n un estudio elaborado por Katsuhiro Miyamoto, profesor de econom¨ªa te¨®rica en la Universidad de Kansai, Jap¨®n, organizar los Juegos Ol¨ªmpicos y Paral¨ªmpicos sin espectadores comportar¨ªa unas p¨¦rdidas directas de 3.700 millones de d¨®lares, 3.000 millones de euros, y si se incluye la reducci¨®n de gastos y consumo en los hogares y el pinchazo en la industria tur¨ªstica y en la promoci¨®n de los eventos deportivos y culturales, las p¨¦rdidas ascender¨ªan a 23.100 millones de d¨®lares, unos 19.000 millones de euros.

Otro asunto en el que tampoco se ha avanzado es el de la presencia de periodistas en los lugares de competici¨®n y en la Villa Ol¨ªmpica. El proceso de acreditaci¨®n ya iniciado en noviembre de 2019 se detuvo en marzo pasado y a¨²n no se ha reanudado. ¡°Oficialmente se puede decir que no habr¨¢ recorte en el n¨²mero de acreditaciones¡±, avanza Alejandro Blanco, presidente del COE. ¡°Sin embargo muchos medios se preguntar¨¢n seguramente si tendr¨¢ sentido enviar periodistas a Tokio, con todos los gastos que conlleva, si su trabajo all¨ª puede estar muy limitado por las restricciones¡±.