El mensaje de Guardiola al Bar?a

Algunos barcelonistas se preguntan ahora que su equipo se ha extraviado futbol¨ªsticamente y ha salido malparado de las diferentes competiciones, pendiente por otra parte de las elecciones del 7 de marzo, si no se podr¨ªa recuperar a Pep Guardiola. No deber¨ªan perder el tiempo porque est¨¢ muy a gusto en el City. Quienes m¨¢s le conocen aseguran que dif¨ªcilmente se sentar¨¢ otra vez en el banquillo del Bar?a y pronostican que si acaso preferir¨ªa ocupar en el futuro un cargo de director futbol¨ªstico siempre que el organigrama fuera avalado por un presidente de su agrado.

Guardiola se fue del Camp Nou en 2012 porque se sent¨ªa muy cansado, harto de muchas tonter¨ªas, y necesitaba que le diera el aire, as¨ª que se tom¨® un a?o sab¨¢tico que discurri¨® sobre todo por Nueva York antes de regresar al trabajo con el Bayern M¨²nich y despu¨¦s en el Manchester City. Ya son cinco temporadas en el equipo ingl¨¦s, m¨¢s tiempo del que estuvo en el primer equipo del Barcelona (2008-2012), y el City lidera la Premier con 10 puntos de ventaja despu¨¦s de una racha de 17 victorias seguidas una vez disputado el partido contra el Everton. No pierde desde que en noviembre cay¨® contra el Tottenham de Mourinho.

Tiene mucho m¨¦rito, y m¨¢s todav¨ªa si se tiene en cuenta que la reacci¨®n ha llegado despu¨¦s de que el entrenador catal¨¢n fuera invitado a afrontar una peque?a revoluci¨®n en la plantilla en cuanto se abriera el mercado por las dudas generadas al inicio de la temporada y por la derrota contra Mou. La sensaci¨®n era que los jugadores se hab¨ªan cansado de ganar, despu¨¦s de conquistar dos campeonatos seguidos (2017-2018 y 2018-2019) y que este a?o se repetir¨ªa la historia del curso pasado, de manera que el reto era volver a sumar victorias con un equipo vencedor que hab¨ªa dejado de ganar, objetivo que quedaba reservado a celebridades como Fergusson (United) o Wenger (Arsenal).

Guardiola est¨¢ en camino de alcanzarlo tambi¨¦n despu¨¦s de mantener al mismo equipo y de haber renovado su contrato como respuesta a las dudas que pudiera generar su continuidad, convencido de que no conven¨ªan grandes cambios, sino recordar c¨®mo quer¨ªa que se jugara a f¨²tbol; igual que se vio este mi¨¦rcoles contra el Everton. El City jug¨® con un falso 9 como Gabriel Jes¨²s, menos fino y al mismo tiempo m¨¢s agresivo en la presi¨®n que Ag¨¹ero; Mahrez y Sterling ocuparon los extremos; Foden y Bernardo Silva fueron los interiores y de mediocentro actu¨® Rodri. Un bloque de ataque que no admiti¨® respuesta de los cinco defensas y dos pivotes dispuestos por Ancelotti.

La f¨®rmula del City todav¨ªa funciona frente a los equipos ingleses m¨¢s cl¨¢sicos que se despliegan a partir del 4-4-2 y tienen como referencia a un goleador vestido de 9. No se trata de contar con un equipo de atletas imparables sino de que los jugadores hagan correr la pelota a una velocidad dif¨ªcil de defender, la recuperen como si fueran un enjambre de abejas y no paren de picar durante todo el partido, protegidos por un portero sin miedo como Ederson. El sello de Guardiola es inconfundible para los que conocen su obra en M¨²nich y Barcelona. El f¨²tbol, ciertamente, evoluciona y el t¨¦cnico catal¨¢n se adapta sin perder la esencia que capt¨® de Cruyff.

La misma receta vale para el Bar?a en un momento en que se vuelve a discutir su identidad con Koeman. La clave es no tener dudas, perseverar y saber estar cuando no se gana o no se acierta con alg¨²n fichaje, un planteamiento que exige la confianza de los que mandan en el club como le pasa a Guardiola con el director deportivo Txiki Begiristain. Guardiola se ha equivocado m¨¢s de una vez con alguna incorporaci¨®n ¨Csiempre se le reprocha la contrataci¨®n de Chigrinskiy¨C, no gan¨® la Champions con el Bayern y tampoco lo ha hecho todav¨ªa con el City. Txiki nunca se lo ha reprochado sino que hace todo lo posible para ayudarle, como ya lo hizo en el Bar?a y en cambio no pudo en M¨²nich.

No hay entrenadores ni modelos infalibles, o que garanticen la victoria, ni tan solo con aquellos que disponen de m¨¢s dinero, ya sea el City o el PSG. Hay en cambio diferentes maneras de jugar a f¨²tbol y existe una especialmente reconfortante que ayuda a saber por qu¨¦ se pierde despu¨¦s de haber entendido por qu¨¦ se ganaba, la que ha seguido Guardiola despu¨¦s de descifrar al maestro Cruyff. Justamente lo contrario de lo que ha pasado ¨²ltimamente en el Barcelona. Los que mandaban se quedaron con la pelota, pensando que jugar al f¨²tbol era muy f¨¢cil, y ahora que han dejado de ganar la han devuelto reventada y piden una nueva; el f¨²tbol es otra cosa como demuestra Guardiola.

No tiene ninguna prisa para volver al Camp Nou.