Nadal y una traves¨ªa de todos los colores

Despu¨¦s de tres horas y media de refriega el¨¦ctrica, Rafael Nadal quiere soltar las piernas. ¡°Venga, a ver si hoy podemos hacerlo r¨¢pido, as¨ª puedo irme un rato a hacer bicicleta¡±, dice tras sortear un dur¨ªsimo cruce con Denis Shapovalov, un joven de 22 a?os (13 menos que ¨¦l) que poco antes le ha conducido hacia una situaci¨®n l¨ªmite en la arena del Foro It¨¢lico, tanto en el plano f¨ªsico como el mental: 3-6, 6-4 y 7-6(3).

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El espa?ol, que se las sabe todas, ha logrado escapar de un laberinto que para la mayor¨ªa no tendr¨ªa salida. Para ¨¦l, s¨ª. Dos bolas de partido ha tenido el canadiense, a falta de un ¨²ltimo golpe en el ment¨®n, pero la llamada a la heroicidad le ha rescatado y este viernes (no antes de las 12.00, #Vamos) saltar¨¢ de nuevo a la pista en busca de una plaza en las semifinales del torneo de Roma. Enfrente estar¨¢ Alexander Zverev, el bombardero que le elimin¨® la semana pasada en Madrid.

¡°Este tipo de victorias son satisfactorias. He peleado y he luchado muchas horas, todo el rato con el marcador adverso, as¨ª que la satisfacci¨®n es grande, y m¨¢s cuando tampoco he jugado a un nivel perfecto hoy, porque he hecho cosas mal¡±, explica el campe¨®n de 20 grandes, que de vez en cuando toquitea el m¨®vil y ya sabe que por la otra parte del cuadro, Novak Djokovic se ha deshecho del malague?o Alejandro Davidovich sin paliativos (6-2 y 6-1); ¡°en estos d¨ªas hay que agarrarse [al partido] como sea y estar con una actitud positiva, sin quejarse. Lo normal es que cuando las cosas van de esta forma, la cosa termine de mala manera, perdiendo, as¨ª que son luchas y batallas que pueden servir para dentro de unas semanas¡±.

Sin apenas margen para coger aliento, tras la severa zurra de la jornada anterior con Yannik Sinner, el mallorqu¨ªn encuentra al otro lado de la red un joven que tirotea sin avisar, se?al de que la nueva hornada va perdiendo el miedo y de que esos j¨®venes conf¨ªan cada vez m¨¢s en dar un golpe de estado al tir¨¢nico ejercer de los tres gigantes. Shapovalov juega con el cuchillo entre los dientes y cada pelotazo se traduce en un desaf¨ªo para Nadal, que intenta no recular ni ceder metros. Sin embargo, esa bola acaricia l¨ªneas y castiga su cordaje. Constantemente a remolque, salva el segundo parcial y luego aborta dos bolas de partido, antes de poner la puntilla final. ¡°?Pero c¨®mo demonios has salido de esta, una vez m¨¢s? ?Qu¨¦ piensas en instantes as¨ª?¡±, se le plantea.

¡°Sigues, no queda otra¡±, minimiza. ¡°Si te dejas ir, sabes que est¨¢s en la ducha en cinco minutos, est¨¢ esa opci¨®n¡±, prosigue. ¡°Y la otra es intentarlo, luchar y darte la oportunidad. Puedo fallar con la raqueta, pero no con la cabeza. Esto es el deporte, luchar aunque las cosas parezcan imposibles¡±, ampl¨ªa mientras avanzan las fechas y la gira de tierra consume la fase preparatoria de cara a Roland Garros. El grande franc¨¦s (del 30 de mayo al 13 de junio) se insin¨²a en el horizonte y, lo cl¨¢sico a estas alturas, se analiza y se especula sobre si el de Manacor tiene m¨¢s o menos filo que otros a?os, y si aterrizar¨¢ en el Bois de Boulogne con las garant¨ªas suficientes para intentar lograr su 14? t¨ªtulo, el que significar¨ªa su 21? trofeo de un Grand Slam.

Voces y hechos: de Montecarlo al Foro It¨¢lico

A su alrededor revolotean voces optimistas y otras m¨¢s esc¨¦pticas, aquellos que prefieren ver el vaso medio lleno o medio vac¨ªo. Y de fondo, los hechos: el tropiezo con Rublev en Montecarlo, un par de aprietos inesperados en el God¨® (Ivashka y Nishikori) y la remontada ante Tsitsipas; m¨¢s recientemente, el desborde de Zverev en la Caja M¨¢gica y el exigente despegue en Roma.

¡°No me gusta eso de analizar cada d¨ªa si progreso o no. Cada d¨ªa es una historia diferente y, al final, yo hago mi camino¡±, dice ¨¦l, mientras completa una traves¨ªa en la que ha encarado situaciones de todos los colores; ¡°creo que tendr¨¦ opciones de llegar bien preparado a Roland Garros y tengo la confianza de que podr¨¦ trabajar bien estas ¨²ltimas semanas. Llevo una buena carga de partidos, partidos largos en los que he tenido que luchar; he jugado algunos buenos, otros malos, he tenido todo tipo de situaciones. Al final, se trata de eso. ?Lo que pueda ocurrir en Par¨ªs? Ya lo veremos¡±.

De momento, este viernes tendr¨¢ enfrente al alem¨¢n Zverev, que redujo al japon¨¦s Kei Nishikori (4-6, 6-3 y 6-4) y hace siete d¨ªas le rindi¨® a ¨¦l en la altura de Madrid, superior en los tres ¨²ltimos enfrentamientos entre ambos. ¡°Esta no es la pista m¨¢s grande del mundo, as¨ª que contra un jugador como ¨¦l, que saca tan fuerte, ser¨¢ dif¨ªcil¡±, previene; ¡°pero, por otra parte, aqu¨ª todo es m¨¢s controlable, as¨ª que prefiero jugar aqu¨ª contra ¨¦l¡±.

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