Pecco Bagnaia: ¡°No deber¨ªamos haber corrido, por respeto a Jason y a su familia¡±

Los pilotos se fueron a dormir el s¨¢bado con mal cuerpo. Uno de ellos estaba en el hospital peleando por su vida. Sus cuentas en redes sociales se llenaron de mensajes de esperanza mientras sus cabezas trataban de desconectar de la retina, donde qued¨® grabada la imagen de Dupasquier rodeado de m¨¦dicos, s¨¢banas y ambulancias. Hab¨ªa llegado otro domingo de carreras y tocaba dar el callo. As¨ª lo asumieron los pilotos de Moto3, los primeros en salir a pista al abrirse el tel¨®n. Hasta que se derrumbaron ante las c¨¢maras nada m¨¢s terminar la carrera y conocerse la noticia. Hab¨ªa muerto. En pleno barullo, la parrilla de Moto2, sin embargo, se form¨® sin que nadie avisara a esos corredores de lo sucedido. Todos ¡ªcon la salvedad del suizo Thomas Luthi, que era amigo de Dupasquier, sab¨ªa lo que hab¨ªa ocurrido y no corri¨®: quiso acompa?ar a la familia, que se hab¨ªa desplazado a Florencia¡ª salieron a competir como si nada.

No ocurri¨® lo mismo con los de MotoGP. Conocida la noticia, se convoc¨® para las 13.30 un minuto de silencio. Faltaba solo media hora para que se pusieran a 340 kil¨®metros por hora. Pero nadie les pidi¨® su opini¨®n. ¡°No deber¨ªamos haber corrido, por respeto a Jason y a su familia. Se toman decisiones a la ligera y no me parece bien¡±, dijo Pecco Bagnaia, piloto de Ducati ya por la tarde. El italiano fue muy cr¨ªtico con la organizaci¨®n del Mundial, que no consult¨® a los pilotos ni debati¨® sobre la idoneidad de celebrar una carrera inmediatamente despu¨¦s de una noticia de semejante calibre.

¡°Le dije al equipo que prefer¨ªa no correr, que era irrespetuoso y equivocado, pero me dijeron que este es nuestro trabajo. Intent¨¦ pensar en la carrera, pero era imposible; no pod¨ªa concentrarme. Es uno de los d¨ªas m¨¢s duros de mi vida¡±, explic¨® Bagnaia, que se cay¨® en la segunda vuelta cuando iba primero. La suya fue una de las pocas voces cr¨ªticas, aunque no la ¨²nica. ¡°?Qu¨¦ hubiera pasado si hubiera muerto un piloto de MotoGP?¡±, se preguntaba Petrucci. ¡°Estar¨ªamos hablando de ¨¦l, no de la carrera, porque no habr¨ªamos corrido¡±, sentenci¨® Bagnaia.

La mayor¨ªa de pilotos de la parrilla, sin embargo, no juzgaron la decisi¨®n de la organizaci¨®n del Mundial y asumieron que su deber era correr y que no hab¨ªa mejor manera que rendirle homenaje a Dupasquier. Compitieron, sin embargo, con la cabeza en otro sitio. Lo asumi¨® tambi¨¦n Fabio Quartararo, l¨ªder del Mundial y ganador en Mugello: ¡°Cuando empiezas a tener cierto margen sobre tus rivales empiezas a pensar en cosas y hoy pensaba en Jason. Era un cr¨ªo, era uno de los nuestros¡±. ¡°No te preparan para nada as¨ª¡±, reconoc¨ªa Oliveira, segundo en carrera. ¡°Este es un deporte peligroso. Fue un d¨ªa dif¨ªcil en la oficina¡±, a?ad¨ªa Joan Mir, tercero y vigente campe¨®n del mundo. Tambi¨¦n fue un d¨ªa duro para Marc M¨¢rquez, otro de los que termin¨® por los suelos a las primeras de cambio, como Bagnaia: ¡°Fue un fin de semana desastroso. Cuando se va un compa?ero siempre es dif¨ªcil. Hemos perdido a una joven promesa¡±.

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