El Real Madrid impone su oficio ante el Bayern
Yabusele lidera al equipo blanco en el que, adem¨¢s de sus p¨ªvots, volvieron a ser claves Rudy y Llull, los depositarios del compromiso competitivo de la era Laso (76-80)
El Real Madrid complet¨® en M¨²nich un s¨®lido ejercicio de sacrificio colectivo para derrotar al Bayern (76-80) y lograr su sexta victoria en ocho jornadas de la Euroliga. Los blancos, que llegaron a ganar por 12 puntos, se vieron cuatro abajo a falta de dos minutos y sin sus dos torres, Tavares y Porier, eliminados por cinco faltas. Pero los de Laso tiraron de oficio y abnegaci¨®n para imponer su experiencia. Yabusele (21 puntos y tres rebotes en 28 minutos en pista) lider¨® a un equipo en el que, adem¨¢s de sus p¨ªvots, volvieron a ser claves Rudy y Llull, los depositarios del compromiso competitivo de la era Laso.
El Madrid acumulaba achaques en su visita a M¨²nich y busc¨® compensar las ausencias a fuerza de pragmatismo competitivo. A las bajas ya conocidas de Thompkins y Randolph se sumaron de nuevo las de Williams-Goss y Aloc¨¦n en el puesto de base y, de salida, Laso entreg¨® la direcci¨®n del equipo a Abalde. El coru?¨¦s se esmer¨® en dar suministro constante a Tavares y Yabusele y, con ese plan, los blancos cogieron carrerilla pronto (4-11, m. 5). Las dos torres madridistas se adue?aron de la pintura y ganaron a todas sus parejas de baile, pero el dominio en la pintura se vio lastrado por el desenfoque desde el per¨ªmetro. El Bayern reaccion¨® aprovechando un pu?ado de p¨¦rdidas de su rival y el 0 de 7 en triples en el casillero visitante. Los puntos de Rubit y los rebotes de Hunter enderezaron a los de Trinchieri y el parcial de vuelta equilibr¨® r¨¢pidamente el pulso (13-13, m. 10).
Afin¨® el Madrid para recuperar la buena senda y anot¨® cuatro triples en un santiam¨¦n, dos de Llull, uno de Vukcevic y otro m¨¢s de Heurtel. Y el tropel de puntos (30 en el segundo cuarto) lleg¨® acompa?ado de unas vueltas de tuerca en defensa que volvieron a colocar al Bayern a contrapi¨¦. El buen trabajo de Vukcevic formando pareja con un s¨®lido Poirier consolid¨® el dominio madridista en el rebote y, a partir de ah¨ª, llegaron las primeras carreras a campo abierto. Otro arre¨®n de Yabusele (10 puntos en sus primeros 11 minutos en pista) dej¨® la hucha madridista en un +12 al borde del descanso (29-41, m. 20). La tercera falta de Poirier fue el ¨²nico contratiempo que rebaj¨® el optimismo blanco tras una aplicada primera mitad. ¡°Han sido mejores. Necesitamos m¨¢s sacrificio¡±, resumi¨® Trinchieri en el entreacto.
Hilliard se hizo cargo del prop¨®sito de enmienda del conjunto alem¨¢n, pero Abalde apuntal¨® al Madrid para contener la carga. El Bayern se cerr¨® en torno a Tavares y Abalde se encarg¨® esta vez de la intendencia de puntos (siete en ese tramo). Pero nadie le acompa?¨® en su producci¨®n y la espesura rebaj¨® progresivamente el impulso y la renta madridista (49-52, m. 27). Punto a punto, el Bayern sell¨® su reenganche. Y dos tiros libres de Rubit, el principal martillo de los alemanes, colocaron el empate (53-53, m. 28). Cuando los de Trinchieri respiraban por la conquista, Llull respondi¨® liderando un parcial de 0-7 pero, acto seguido, Hilliard volvi¨® a ajustar cuentas antes de entrar en la recta de meta (58-60, m. 30).
El Madrid hab¨ªa quedado rebajado casi a la mitad. De los 30 puntos del segundo cuarto a los 17 del tercero, con la pareja Rubit-Hilliard causando estragos en la retaguardia madridista. Y, con el partido en la cornisa y la fatiga ganando terreno, el Madrid se arm¨® de experiencia. Llull, Causeur, Rudy, Poirier y Tavares formaron el quinteto de seguridad de Laso en ese tramo y, entre los cinco, transformaron el 62-60 en un 62-66 con dos aciertos desde el 6,75 (uno de Rudy y otro de Causeur). Pero aguant¨® en pie el Bayern, Thomas complet¨® otro volantazo al marcador, y el Madrid perdi¨® en un momento a Tavares y Porier. El caboverdiano recibi¨® una discutible cuarta falta en ataque y una t¨¦cnica posterior por aplaudir ir¨®nicamente la decisi¨®n arbitral. Y, en la jugada siguiente, Poirier cometi¨® la quinta y sigui¨® sus pasos. El balance de da?os se sald¨® con un 73-69 en el marcador y Vukcevic y Yabusele intentado mantener el fuerte. Lo lograron a lo grande, con otro ejercicio de abnegaci¨®n colectiva en defensa, de supervivencia. Lucic perdi¨® la posesi¨®n clave del Bayern y el Madrid volvi¨® a imponer su oficio.
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