El v¨ªa crucis del Real Madrid hacia el t¨ªtulo de la ACB

La temporada del Real Madrid solo puede asemejarse al resurgir de un f¨¦nix, que ha tenido que pasar por las llamas para alzar de nuevo el vuelo. El equipo blanco se proclam¨® este domingo campe¨®n de la Liga ACB ante el Barcelona en el cuarto partido, sumando su 36? t¨ªtulo liguero, el primero tras dos a?os de sequ¨ªa.

El camino del Real Madrid hacia el t¨ªtulo ha sido un v¨ªa crucis plagado de crisis de todos los tipos: deportivas, emocionales, e incluso sanitarias. Si alguien hubiera escrito el guion de este a?o en el equipo blanco no podr¨ªan faltar las palabras hundimiento y resurrecci¨®n, el reflejo de una temporada en la que el equipo atraves¨® el peor tramo de resultados de la era Laso y ha acabado levantando el t¨ªtulo de liga y se qued¨® a una sola canasta de proclamarse tambi¨¦n campe¨®n de Europa. La celebraci¨®n de los jugadores este domingo al conseguir el t¨ªtulo, con muchos de ellos desplomados, llorando sobre el parqu¨¦ del Wizink Center, simboliza lo que ha sufrido el equipo a lo largo de estos nueve meses.

Y eso que el a?o empez¨® rodado, tras la conquista de la Supercopa de Espa?a al Barcelona con una remontada ¨¦pica de 19 puntos en el ¨²ltimo cuarto. El equipo se hab¨ªa reforzado en verano con varios fichajes (Williams-Goss, Heurtel, Hanga y Yabusele) y poco a poco se iban amoldando. Empez¨® el conjunto blanco la liga regular y la Euroliga como un tiro, liderando ambas competiciones. Pero entonces lleg¨® el invierno y omicr¨®n. La covid golpe¨® a todos los equipos de la liga ACB, pero se ceb¨® especialmente con el Real Madrid. Pablo Laso, Heurtel, Causeur, Yabusele, Poirier, Juan N¨²?ez, Randolph, Hanga, Llull, Aloc¨¦n y Taylor cayeron en el macrobrote. El equipo, pese a todo, se mantuvo firme en los partidos que tuvo que jugar, lo demuestran la victoria en la Euroliga ante el CSKA con 11 bajas y tres j¨²niors debutantes.

Crisis sin precedentes

La ACB le dio un respiro al equipo blanco y pospuso varios de sus encuentros, incluido el Cl¨¢sico ante el Barcelona, que tambi¨¦n contaba en esos momentos con varios contagiados. El encuentro se disput¨® el 23 de enero: el Madrid ten¨ªa un balance de 34 victorias y solo 4 derrotas. Pero lleg¨® el Barcelona y se apoder¨® de Wizink y comenz¨® una crisis sin precedentes en el Madrid de la era Laso: 14 derrotas en 25 partidos. Por el camino, los azulgrana se llevaron la Copa del Rey y les arrebataron el liderazgo de la ACB y la Euroliga.

Laso no era capaz de encontrar una soluci¨®n para revitalizar al equipo que se iba desangrando. A comienzos de abril, la racha era de 10 derrotas en 14 partidos. El t¨¦cnico decidi¨® sacar el mazo y apart¨® a Thompkins y Heurtel. ¡°El equipo est¨¢ siempre por encima de las personas y tenemos que volver a serlo¡±, argument¨® el t¨¦cnico justo antes de medirse al Barcelona en el segundo cl¨¢sico liguero, que tambi¨¦n cay¨® del lado de los azulgrana tras la pr¨®rroga. El Madrid necesitaba una catarsis urgentemente.

Y lleg¨® en el momento perfecto, con la serie de cuartos de final ante el Maccabi Tel Aviv. Apareci¨® el car¨¢cter irreductible: 3-0 barri¨® a su rival con un inapelable 3-0 en la serie para poner rumbo a la Final Four de Belgrado. La confianza y el juego volvieron, y la progresi¨®n sigui¨® en ascenso.

En semifinales, ante el Barcelona, que sumaba 11 triunfos en los 14 cl¨¢sicos previos, el Madrid certific¨® su resurgimiento. ¡°Nunca hemos dejado de creer¡±, declar¨® Pablo Laso despu¨¦s la victoria (86-83) que le daba el pase a la final. Una convicci¨®n irreductible contra toda l¨®gica. En aquel partido, Williams-Goss se lesion¨® a los 52 segundos, era el ¨²nico base puro que le quedaba a Laso. Haciendo de la necesidad virtud, el t¨¦cnico se sac¨® de la chistera la reconversi¨®n de Hanga y Deck al puesto de 1, un movimiento que ha resultado decisivo. El equipo cay¨® en la final ante el Anadolu Efes, pero se qued¨® a solo una canasta de la 11? Euroliga.

Conjura

Tras la Euroliga lleg¨® el turno de los play-offs de la liga Endesa y el equipo sigui¨® en su trance, f¨ªsicamente bien y con la mejor defensa del momento. Baxi Manresa fue el primero en sucumbir al hurac¨¢n que hab¨ªa desatado el Madrid, rumbo fijo a la final. En dos partidos dejaron a los catalanes fuera de la serie y encararon las semifinales ante Baskonia, al que tampoco dieron ninguna opci¨®n (3-0). Pero tras el segundo partido de la serie lleg¨® el susto de Pablo Laso (que sufri¨® un infarto y acab¨® ingresado). Chus Mateo ocup¨® su lugar.

En la final, como no, el Barcelona volv¨ªa a aparecer en el camino del Madrid, pero las tornas se hab¨ªan invertido. El Madrid estaba con m¨¢s energ¨ªa, confianza y fe. La lesi¨®n de Randolph en el primer partido (rotura de ligamentos, ocho meses de baja) no enturbi¨® los ¨¢nimos de un equipo conjurado para la ¨²nica cosa que sabe hacer: ganar. As¨ª lo hizo en el Palau para robar el factor cancha, y decidi¨® la serie en su casa sin necesidad de llegar al quinto partido.

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