Lily Parr, la pionera prodigiosa
Con 14 a?os, en 1919, ya jugaba en el equipo femenino de f¨²tbol del Saint Helens y luchaba por la libertad sexual
¡°La se?orita Lily Parr mostr¨® una gran agresividad, lanzando siete disparos de los que dos se convirtieron en goles¡±. Ese p¨¢rrafo pudo leerse en el Washington Post el d¨ªa siguiente al partido entre el Dick, Kerr¡¯s Laidies y el mejor equipo masculino de Washington. El resultado fue 4-4. Est¨¢bamos en 1922. La fama de Lily Parr, ya c¨¦lebre en Inglaterra y Francia, hab¨ªa saltado el oc¨¦ano.
Aquella jugadora fue un prodigio. Cuarta en una familia de los siete hijos de un modesto vidriero y un ama de casa radicados en Saint Helens, Merseyside, naci¨® en 1905 y tuvo una infancia feliz. Sus hermanos mayores la aficionaron al rugby y al f¨²tbol, en los que participaba con naturalidad entre los chicos de su edad porque su privilegiado f¨ªsico se lo permit¨ªa.
Con 14 a?os ya jugaba en el equipo femenino del Saint Helens. La Primera Guerra Mundial hab¨ªa estimulado el f¨²tbol femenino. En las f¨¢bricas, las mujeres ocuparon los puestos de los hombres, trasladados a las trincheras, y de ah¨ª deriv¨® una inclinaci¨®n a jugar al f¨²tbol para fortalecerse y evadirse de las largas horas de movimientos repetitivos en las f¨¢bricas.
10 chelines por partido
Uno de los instigadores de aquello fue Alfred Farkland, un mandam¨¢s en la f¨¢brica de munici¨®n de Preston llamada Dick, Kerr & Company que cre¨® un equipo con el nombre Dick, Kerr Ladies llamado a alcanzar gran fama. Su gran golpe fue incorporar a Lily Parker, de la que oy¨® hablar y la contrat¨® para la f¨¢brica. Gran adicta a los cigarrillos Woodbine, cobraba 10 chelines por partido para permit¨ªrselos.
Parr, que med¨ªa 1,77, hab¨ªa jugado de defensa en Saint Helens, pero Farkland la coloc¨® pronto en la delantera para aprovechar su tremenda fuerza de disparo. Sus partidos atra¨ªan masas. El Dick, Kerr¡¯s Laidies son¨® tanto que fue invitado a una gira por Francia, de la que regres¨® victoriosa en todos sus partidos. La selecci¨®n francesa cruz¨® el Canal para vengar la afrenta y perdi¨® 5-1 ante 23.000 espectadores; los cinco goles los marc¨® Lily Parr.
El Boxing Day de 1920 reuni¨® 53.000 asistentes en Goodison Park para un Dick, Kerr¡¯s-Saint Helens y dej¨® 3.115 libras. Como la asistencia era creciente y las taquillas iban destinadas a los soldados mutilados o a otros fines ben¨¦ficos, el f¨²tbol masculino profesional empez¨® a ser mal mirado por comparaci¨®n con el altruismo de las jugadoras y la FA lanz¨® una indisimulada campa?a con periodistas y m¨¦dicos complotados con su causa: el f¨²tbol no era adecuado para la mujer, compromet¨ªa su maternidad, los equipos estaban infiltrados de hombres disfrazados, era falso que fueran todas aficionadas¡ Cuando donaron una taquilla a la caja de resistencia de unos mineros en huelga, la FA dio otra vuelta de tuerca y en diciembre de 1921 prohibi¨® a sus clubes facilitar sus campos para el f¨²tbol femenino y a los ¨¢rbitros intervenir en sus partidos.
Farkland, un hombre de ideas que tuvo la iniciativa de crear para ellas una coqueta cap rayada cuya venta mejoraba los ingresos, sali¨® del apuro organizando una gira por Estados Unidos. Fueron 9 partidos, varios contra equipos masculinos, de los que ganaron 3, empataron 3 y perdieron 3. Al regreso circul¨® que un portero tuvo que ser llevado al hospital con el brazo roto por un penalti lanzado por Lily. Quiz¨¢ solo sea leyenda. En todo caso, su potencia de disparo y su atrevimiento para chutar desde ¨¢ngulos inveros¨ªmiles fue legendaria.
En 1923, la English Electric compr¨® la empresa y cerr¨® el equipo, que se rebautiz¨® como Preston¡¯s Ladies. Lily Parr continu¨® siendo el gran referente. Perdido su trabajo en la f¨¢brica, entr¨® de enfermera en el psiqui¨¢trico de Whitingham, que hab¨ªa recibido aportaciones de dinero del equipo y acogi¨® a muchas de las jugadoras despedidas. All¨ª conoci¨® a su novia Mary, con la que compartir¨ªa p¨²blicamente su vida en Goosnargh, a despecho de los prejuicios propios de la ¨¦poca. Tambi¨¦n fue pionera en la lucha por la libertad sexual.
Dej¨® el f¨²tbol en 1951, con 45 a?os y 986 goles en 437 partidos. En su mejor temporada lleg¨® a marcar 108. En 1967 enferm¨® de c¨¢ncer, en 1978 falleci¨®. Para entonces el equipo hab¨ªa dejado de existir; tuvo poca actividad desde su retirada, casi ninguna desde la muerte de Farkland en 1957 y se extingui¨® por completo en 1965. En la retirada de Parr, Farkland hizo p¨²blico este balance: 437 partidos, 424 victorias, 6 empates, 7 derrotas, 2.863 goles marcados, 207 encajados y m¨¢s de 100.000 libras donadas a beneficencia.
En 1971, la FA revoc¨® la decisi¨®n de negar los campos a las mujeres. En 1978 las acogi¨® en su seno, en 2002 incluy¨® a Lily Parr en el Sal¨®n de la Fama, en 2008 present¨® una disculpa p¨²blica por la actitud de sus predecesores y en 2019 incluy¨® un espacio de honor a Lily Parr, con estatua incluida, en el National Football Museum de M¨¢nchester.
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