Willy y Juancho se ganan un nombre de oro

Uno lleva el 14 en la camiseta y el apellido de la madre. Otro, el 41 y el apellido del padre. Uno es cabezota. El otro, perfeccionista. Uno lleva el brazo izquierdo tatuado de arriba abajo. Otro, el derecho. Uno idolatraba a LeBron James. El otro, a Kobe Bryant. Willy Hernang¨®mez fue elegido el jugador m¨¢s valioso del inolvidable Eurobasket conquistado por Espa?a el pasado domingo. Su hermano Juancho se llev¨® el premio al mejor de la final contra Francia (27 puntos y siete triples). Diferentes pero iguales en el gen ganador, los hermanos Hernang¨®mez han alcanzado con el oro europeo otra cima en una carrera construida a base de derribar barreras y resistir comparaciones. Ser la pareja internacional de p¨ªvots en la selecci¨®n despu¨¦s de Pau y Marc Gasol es un legado envenenado. ¡°Eso no nos pesa. Somos distintos a ellos, y ahora es nuestro momento¡±, zanja Willy. Y vuelve al inicio de todo para explicar este ¨¦xito: ¡°Somos de una familia humilde de Las Rozas. Ni siquiera so?¨¢bamos con jugar en la ACB y ahora estamos en la NBA y somos campeones del mundo y de Europa¡±.

El baloncesto ven¨ªa de cuna en la familia. La madre, Margarita Ivonne Geuer, Wonny, de origen alem¨¢n y nacida en Sevilla, fue 158 veces internacional con la selecci¨®n espa?ola, ol¨ªmpica en Barcelona 92 y campeona del Eurobasket de 1993. Willy la recuerda en su camiseta: W. Geuer. El padre, Guillermo Hernang¨®mez, se form¨® en las categor¨ªas inferiores del Real Madrid, particip¨® como juvenil en la conquista de la liga de 1982 con Delibasic, Fernando Mart¨ªn e Iturriaga, y subi¨® al primer equipo blanco el curso siguiente. Fue internacional j¨²nior, pero una lesi¨®n de triada trunc¨® su carrera. El homenaje de Juancho en su camiseta es para ¨¦l: J. Hernang¨®mez. ¡°Nunca les llevamos por el camino del baloncesto¡±, comenta Wonny a este peri¨®dico; ¡°no les insistimos ni presionamos. De hecho, empezaron con el f¨²tbol y se pasaron al baloncesto por unos amigos de Las Rozas. Siempre les dec¨ªamos que disfrutaran, nada m¨¢s. Cuando acababa un partido no les pregunt¨¢bamos si hab¨ªan ganado o perdido, sino si se lo hab¨ªan pasado bien¡±, a?ade la madre.

Con 15 a?os, Willy Hernang¨®mez entr¨® en la cantera del Madrid. Le acompa?¨® su hermano Juancho, aunque este solo estuvo un a?o. Alguien en la casa blanca decidi¨® que no era lo suficientemente bueno. En esos primeros pasos en las categor¨ªas inferiores les recibi¨® Jos¨¦ Luis Pichel, hoy t¨¦cnico ayudante en el Fuenlabrada. ¡°Willy era un ni?o muy grande, pero muy ni?o a¨²n. Era un ni?o gordito al que le faltaba dar el estir¨®n. Eso s¨ª, estaba muy coordinado, con muy buenas manos y pies. Era grandote y con un talento enorme. Juancho era todo desparpajo, listo, muy espabilado, se enteraba de todo, iba por delante. Tambi¨¦n muy cari?oso, se le notaba muy vivo¡±, revive hoy Pichel sobre el inicio de ese viaje de los dos hermanos hasta la cima del baloncesto.

Willy, de 28 a?os, juega hoy en los Pelicans, su tercer equipo en la NBA tras Knicks y Charlotte (en la ACB, Madrid y Sevilla). Juancho, de 26, acaba de fichar por los Toronto Raptors despu¨¦s de dar el salto de Estudiantes a Denver, y luego Minnesota, Boston, San Antonio y Utah. Ambos son campeones del mundo (2019) y de Europa con la selecci¨®n.

Willy no olvida su pasado y todav¨ªa hoy trabaja cada verano con Pichel para pulir su juego ante la exigencia de la NBA. ¡°Es un t¨ªo con un compromiso muy grande con el baloncesto, le gusta mucho el deporte y mete las horas que haga falta. En sus dos primeros a?os en Estados Unidos cambi¨® su cuerpo [cuando dej¨® el Real Madrid pesaba 105 kilos y ahora est¨¢ en 120] y se ha convertido en el jugador que es, capaz de sostener el nivel f¨ªsico de la NBA y hacer muchas m¨¢s cosas con el talento que tiene¡±, analiza Pichel. ¡°Desde peque?o Willy ha sido un jugador m¨¢s interior, y Juancho m¨¢s exterior, aunque vers¨¢tiles. En el Eurobasket hemos visto c¨®mo Willy ha jugado de cara y con muy buen manejo de bal¨®n, y Juancho se ha manejado de espaldas a la canasta¡±, a?ade el entrenador.

Diferentes y complementarios, los dos hermanos han hecho de su relaci¨®n personal un b¨²nker. Nada afecta a uno sin que responda el otro. La familia dentro de La Familia, como se conoce a la selecci¨®n. En su caso, una doble coraza, siempre hombro con hombro. ¡°Tienen una relaci¨®n no solo de hermanos, sino de mejores amigos. Para ellos, la familia es el n¨²cleo absoluto. Desde peque?os se han motivado uno al otro, pero no a nivel de pique, sino de ayuda real. Donde est¨¢ uno, est¨¢ el otro. Y son muy buenos cuidadores de toda la gente que les rodea, tienen una personalidad muy acogedora¡±, cuenta Pichel.

¡°Yo soy muy cabez¨®n, como mi madre. Cuando quiero algo, voy hasta el final. Mi hermano es como mi padre, muy exigente consigo mismo, muy perfeccionista¡±, comentaba Willy en una entrevista a EL PA?S durante el Eurobasket. En el torneo fue el hermano mayor el que arrop¨® a Juancho cuando este tuvo algunos altibajos. Fue de menos a m¨¢s, convertido en decisivo en la final ante Francia con seis triples seguidos sin fallo en el segundo cuarto que dinamitaron el encuentro y comenzaron a vestir a Espa?a de oro. Willy asumi¨® junto a Rudy el papel de l¨ªder del equipo y tir¨® de Juancho, que hab¨ªa arrancado con m¨¢s dudas, titular en los primeros partidos pero luego suplente ante Jaime Pradilla. Deb¨ªa resetear despu¨¦s de ser m¨¢s protagonista por su actuaci¨®n en la pel¨ªcula Garra, junto a Adam Sandler, en la que interpreta a Bo Cruz, un jugador callejero que salta a la NBA. De cero a cien, Juancho termin¨® el torneo desatado en la pista y animando la celebraci¨®n en el hotel y en el avi¨®n de vuelta. ¡°He pasado por malos momentos. No todo es un camino de rosas. He salido a base de trabajo¡±, dijo entre l¨¢grimas tras la final.

¡°Los dos son cabezotas como pap¨¢ y mam¨¢¡±, sonr¨ªe Wonny. ¡°Willy es m¨¢s reservado, un motor di¨¦sel. Juancho es de subidas y bajadas, pero los dos son s¨²per trabajadores, muy sacrificados. Siempre que hemos ido a verles a la NBA nos lo han dicho en los equipos. Saben que el trabajo te lleva al ¨¦xito. A ver si conf¨ªan en ellos y les dan m¨¢s minutos¡±, dice la madre.

La hermana peque?a, Andrea, de 22 a?os, estudia y juega al baloncesto en la Universidad de Fairfield, en Connecticut, mientras sue?a con seguir los pasos de Willy y Juancho. Ambos regresan este fin de semana a Estados Unidos. Vuelven como campeones de Europa, otro hito de los hermanos de Las Rozas que se han ganado un nombre.

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