Hannah Schmitz, la estratega de Red Bull que gu¨ªa a Verstappen

Como ocurre en la mayor¨ªa de disciplinas deportivas, los ¨¦xitos en la F¨®rmula 1 se dimensionan a partir de las penurias de los dem¨¢s, una m¨¢xima m¨¢s impepinable que nunca esta temporada, en la que Red Bull arrasa en la misma medida que sus triunfos desquician a Ferrari y a Mercedes. Al margen de su estratosf¨¦rico talento para conducir, Max Verstappen no habr¨ªa llegado a ser reconocido como el fen¨®meno que es sin las m¨²ltiples piezas clave que configuran el equipo t¨¦cnico que le rodea. Esas que han hecho de la estructura energ¨¦tica el engranaje m¨¢s fiable del Mundial. En los ¨²ltimos tiempos ha habido una figura que ha ganado relevancia y exposici¨®n gracias al impacto que ha tenido en las conquistas de la escuder¨ªa del b¨²falo rojo. Su nombre es Hannah Schmitz, ocupa el cargo de primera estratega de Red Bull y su cometido es el de hacer de br¨²jula de ¡®Mad Max¡¯ y Checo P¨¦rez. Aunque tambi¨¦n hay quien ve a esta brit¨¢nica de 37 a?os como la verduga de ¡®Il Cavallino Rampante¡¯ y las Flechas de Plata. Tanto es as¨ª que, tras la victoria de Verstappen en Zaandvort, su casa, la t¨¦cnica fue objeto de m¨²ltiples muestras de abuso a trav¨¦s de las redes sociales, un episodio lamentable condenado de forma un¨¢nime por todo el ¡®paddock¡¯, incluido Lewis Hamilton, uno de los que m¨¢s ha sufrido la clarividencia de Schmitz.

Esta ingeniera mec¨¢nica entr¨® como becaria en Red Bull en 2009, el mismo a?o en que se gradu¨® por la Universidad de Cambridge. Empez¨® en el ¨¢rea de simulador antes de pasar a la de estrategia (2011), donde fue cogiendo vuelo, especialmente en los ¨²ltimos cuatro a?os, en los que empez¨® a acumular piropos de las principales voces de la compa?¨ªa. Incluso de un peso pesado como Helmut Marko, mano derecha de Dietrich Mateschitz ¨Cel due?o del imperio de bebidas que dan alas¨C, que no pasa por ser alguien que regala los o¨ªdos a nadie de forma gratuita. ¡°Todos estuvimos muy bien, pero si ganamos fue principalmente por Hannah¡±, reconoci¨® el expiloto austr¨ªaco, despu¨¦s de que una decisi¨®n de Schmit hiciera posible el triunfo de Checo P¨¦rez en el ¨²ltimo Gran Premio de M¨®naco, una prueba que Charles Leclerc ten¨ªa aparentemente controlada y que finalmente termin¨® con el monegasco fuera del podio. M¨¢s tarde llegaron otros grandes domingos para la estratega. Como la remontada de Verstappen en Budapest, en la ¨²ltima cita antes del verano y donde el actual campe¨®n gan¨® la octava carrera de las 12 que acumula este curso, a pesar de arrancar el d¨¦cimo. En Holanda, ante unas gradas incluso demasiado entregadas a ¨¦l ¨Cuna bengala oblig¨® a detener la segunda criba de la cronometrada del s¨¢bado¨C, el muchacho de Hasselt volvi¨® a subir al escal¨®n m¨¢s alto del caj¨®n gracias a la cintura de Schmitz y tambi¨¦n a la suerte ¨Cuna aver¨ªa en el Alpha Tauri de Yuki Tsunoda desactiv¨® la agresiva maniobra a una sola parada que plante¨® Mercedes¨C.

Schmitz ha tenido un papel decisivo en la sexta corona que Red Bull festej¨® este domingo, con suspense, en Jap¨®n. Independientemente de si trabajaba desde el muro o desde Milton Keynes, conectada a tiempo real con todo lo que ocurre en los circuitos, en una sala al estilo de las que emplea la NASA para controlar sus proyectos espaciales. ¡°Desde all¨ª podemos escuchar las radios de todos los pilotos, ver todas las c¨¢maras de a bordo [de los rivales], analizar todos los n¨²meros al detalle y trasladar las conclusiones a la pista¡±, cuenta la propia Schmitz en una entrevista concedida a Red Bull, en la que desgrana cu¨¢les han sido, hasta la fecha, los momentos clave de su trayectoria en la F1, en la que, de momento, no ha cambiado nunca de aires.

La primera intervenci¨®n que le viene a la mente la transporta al Gran Premio de Brasil de 2019, en el que reclam¨® a Verstappen para que realizara una parada en los talleres que le hizo perder el liderato moment¨¢neamente, para despu¨¦s recuperarlo y ganar. ¡°Fue un momento tremendamente especial, porque, adem¨¢s, acababa de volver a trabajar despu¨¦s de tener a mi primer hijo. Fue algo muy importante para m¨ª, porque me permiti¨® demostrar que todav¨ªa estaba aqu¨ª y pod¨ªa hacer bien el trabajo¡±, recuerda Schmitz, que en este punto subraya el plus de dificultad que deben sortear las mujeres, en un ecosistema tradicionalmente dominado por hombres. ¡°Como estratega, tengo que decirle a mucha gente lo que tiene que hacer, y eso, como mujer no siempre es f¨¢cil. Ahora ya me he ganado ese respeto, de modo que espero que eso sirva a las mujeres que quieran formar parte de este deporte¡±, remacha la campeona.

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