Tragedia en el ciclismo: Davide Rebellin muere atropellado por un cami¨®n

Davide Rebellini vivi¨® sobre una bicicleta la mayor parte de su vida y sobre una bicicleta muri¨®, atropellado muy cerca de Vicenza (noreste de Italia), muy cerca de su casa, por un cami¨®n que se dio a la fuga, el mediod¨ªa del mi¨¦rcoles. Ten¨ªa 51 a?os. Se hab¨ªa retirado de la competici¨®n el 16 de octubre pasado, tras disputar la V¨¦neto Classic, despu¨¦s de haber batido r¨¦cords de longevidad y persistencia en el ciclismo profesional, como si no supiera hacer m¨¢s cosas en la vida, o como sin ciclismo la vida no fuera vida. O, como ¨¦l resum¨ªa: ¡°Mi ciclismo es pura pasi¨®n¡±.

El suceso, que recuerda al que mat¨® a Michele Scarponi, otro campe¨®n ciclista italiano, hace cinco a?os, ocurri¨® en la carretera regional n¨²mero 11, una ruta habitual de los ciclistas de la regi¨®n, a la altura del bar-restaurante La Padana, en Montebello, cuando el cami¨®n, que sal¨ªa de la rotonda del restaurante, arroll¨® al ciclista. El cami¨®n sigui¨® su marcha y, seg¨²n la polic¨ªa de carreteras, que investiga el accidente, no est¨¢ claro si el conductor del monstruo de acero se hab¨ªa dado cuenta siquiera de que se hab¨ªa llevado por delante a un ciclista.

Rebellin, corredor de clase y talento, y cierta frialdad en la forma de competir, buen escalador, particip¨® en los Juegos Ol¨ªmpicos de Barcelona 92, en los que part¨ªa como favorito junto al fen¨®meno estadounidense Lance Armstrong, nacido en 1971 como ¨¦l. La prueba, en la que se impuso otro italiano, Fabio Casartelli, tr¨¢gicamente muerto tras sufrir una ca¨ªda en el Tour de 1995, fue la ¨²ltima prueba amateur de ambos, de Rebellin y Armstrong, dos que marcaron su ¨¦poca.

Rebellin, que viv¨ªa en Lonigo, una ciudad distinguida tambi¨¦n por los palacios de Andrea Palladio y por las nubes de mosquitos, lleg¨® al profesionalismo antes de cumplir los 21 a?os en la ¨¦poca de esplendor de Bugno, Chiappucci y Cipollini, aureolado, y cargado, con la etiqueta de gran esperanza de renovaci¨®n. Obligado por las expectativas, intent¨® disputar la clasificaci¨®n general de las grandes vueltas, Giro y Tour, y necesit¨® que pasaran algunos a?os, y triunfos en la Tirreno, la Cl¨¢sica de San Sebasti¨¢n, el GP de Z¨²rich y otras semicl¨¢sicas y pruebas de pocos d¨ªas, para liberarse de la obligaci¨®n y convertirse en un especialista de pruebas de corta duraci¨®n. Solo a?os m¨¢s tarde, en 2004, se convirti¨® en el primer ciclista que ganaba el mismo a?o la Amstel Gold Race, la Flecha Valona y la Lieja-Basto?a-Lieja, las tres grandes cl¨¢sicas de las Ardenas que se disputan en un plazo de ocho d¨ªas, domingo, mi¨¦rcoles, domingo. Ese mismo a?o, enfadado porque pese a sus victorias, el seleccionador italiano no contaba con ¨¦l para el Mundial, decidi¨® rebuscar entre sus ancestros para descubrir sangre argentina en su familia. Se hizo argentino para correr el Mundial, pero finalmente hubo problemas con los papeles y no pudo participar en la carrera de Verona, en la que ?scar Freire consigui¨® su tercer arco¨ªris. En 2008 gan¨® la Par¨ªs-Niza y, pocos meses despu¨¦s, alcanz¨® en los Juegos de Pek¨ªn uno de los mejores ¨¦xitos de su carrera, la medalla de plata ol¨ªmpica de una carrera disputada junto a la Gran Muralla china en la que la medalla de oro fue para el asturiano Samuel S¨¢nchez.

Pocos d¨ªas despu¨¦s estall¨® el esc¨¢ndalo de su equipo, el Gerolsteiner alem¨¢n. Varios de sus ciclistas dieron positivo, tambi¨¦n Rebellin, cuya orina recogida tras la carrera de los Juegos conten¨ªa restos de CERA, la llamada entonces EPO de segunda generaci¨®n. El Gerolsteiner desapareci¨® y Rebellin perdi¨® la medalla ol¨ªmpica y sufri¨® una sanci¨®n de dos a?os. Ten¨ªa 37 a?os entonces, pero la suspensi¨®n no signific¨® la retirada. Regres¨® en 2011. Corri¨® 11 m¨¢s en equipos de segunda y tercera divisi¨®n, en carreras ex¨®ticas de cuarto nivel, en las que siempre se entregaba. Se retir¨®, pero no colg¨® la bicicleta. Segu¨ªa saliendo todos los d¨ªas, haciendo honor a su proclama de que ¨¦l deb¨ªa entrenarse solo porque cuando se juntaba con otros estos no hac¨ªan m¨¢s que pararse en los caf¨¦s y no se entregaban al m¨¢ximo.

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