La resurrecci¨®n de Nahuel Molina y de Rodrigo De Paul
Campeones del mundo con Argentina, los dos jugadores del Atl¨¦tico empiezan a mostrar su nivel tras ser muy cuestionados
Encontrar el punto de rendimiento esperado en Rodrigo de Paul y en Nahuel Molina ha sido una tarea constante en el d¨ªa a d¨ªa de Diego Pablo Simeone. Campeones del mundo con Argentina, ambos han sido objeto de charlas individuales y de elucubraciones del t¨¦cnico para tratar de explicar c¨®mo dos futbolistas contrastados no mostraban el nivel de juego que provocaron sus llegadas desde el Udinese italiano. La de De Paul, en 2021, a cambio de 35 millones de euros, y la de Molina, el pasado verano, por 20. La reciente conquista del Mundial parece haberles insuflado una confianza que no mostraban en sus comparecencias con el Atl¨¦tico.
El caso m¨¢s complejo de manejar para Simeone ha sido De Paul, que ha tenido el cartel de transferible durante este mercado invernal. Futbolista del que se esperaba un rendimiento inmediato por jerarqu¨ªa y calidad, empez¨® a caerse de los onces del t¨¦cnico por la raz¨®n m¨¢s inesperada. Fichado por su buen pie para el juego en largo, el bal¨®n parado y su disparo, enganch¨® secuencias largas de partidos en las que fallaba pases cortos y f¨¢ciles. Tampoco hab¨ªa rastro de sus precisos desplazamientos de 40 metros. De Paul, que tampoco acababa de encajar bien en el grupo, salv¨® el final de la temporada pasada m¨¢s por lo que corri¨® que por lo que jug¨®.
Este curso tampoco terminaba de arrancar y la grada no le perdon¨® su presencia en una fiesta en Miami tras un partido con Argentina cuando el permiso que le pidi¨® al club era para visitar a su padre enfermo. Con el caldo de cultivo de su bajo rendimiento y la mala temporada del equipo, la ojeriza hacia su figura a¨²n no ha cesado. De Paul tuvo que escuchar abucheos cuando fue homenajeado en el Metropolitano junto a Molina y Correa a su regreso de Qatar. ¡°Espero que tenga una comuni¨®n mejor con nuestra gente, porque ser¨ªa bueno para todos¡±, dese¨® ayer Simeone. El t¨¦cnico ha visto un repunte en su aportaci¨®n y conf¨ªa en mantenerlo. No es la primera vez que el Cholo le ha brindado su protecci¨®n. Ya lo hizo con el episodio de Miami, aunque en privado se lo reprochara. Ayer, un d¨ªa antes de afrontar ante el Getafe (18.30, Movistar LaLiga) su primera titularidad en el Metropolitano tras el par¨®n mundialista, Simeone pidi¨® ¨¢rnica a la afici¨®n para De Paul.
Su definitivo pase de gol en El Sadar la semana pasada provoc¨® una conclusi¨®n en el cuerpo t¨¦cnico rojiblanco. Por fin exhibi¨® la cualidad que propici¨® su contrataci¨®n. La pelota vol¨® precisa y templada del centro del campo a la frontal del ¨¢rea para que Sa¨²l la controlara con el pecho y descerrajara un disparo preciso que supuso los tres puntos. ¡°Es un jugador extraordinario. Ya lo ha demostrado en la selecci¨®n argentina, y en la temporada pasada, cuando aparecieron las dificultades en los ¨²ltimos 14 partidos, tambi¨¦n tuvo mucha presencia en la mejor¨ªa del equipo. Ahora, est¨¢ volviendo a jugar en esta l¨ªnea y, cuando juega as¨ª, ve m¨¢s que los dem¨¢s y lee el juego de la mejor manera¡±, incidi¨® Simeone. Durante el curso, Simeone le ha ido centrando m¨¢s la posici¨®n para que estuviera m¨¢s contacto con la pelota y eso le ayudara a recuperar confianza en su toque.
El caso de Molina tambi¨¦n ha sido espinoso para Simeone porque su fichaje fue un empe?o personal. Muy pronto le lleg¨® el ruido interno que cuestionaba su contrataci¨®n por el bajo nivel que mostr¨® en sus primeros partidos. El preparador argentino est¨¢ convencido de que el Atl¨¦tico ha contratado a un lateral para varios a?os e incluso lo cataloga como una inversi¨®n que puede revalorizarse si termina de explotar. El Cholo nunca ocult¨® que Molina deb¨ªa mejorar defensivamente. Han sido varias las sesiones individuales que le ha dedicado en los campos de entrenamiento del Cerro del Espino para tratar de agregarle conceptos defensivos.
Como De Paul, tambi¨¦n ha gozado de protecci¨®n por parte del entrenador. Alarmado por la facilidad con la que los rivales le superaban y le ganaban la espalda en sus primeros partidos, Simeone no quiso exponerle frente a Vinicius en el derbi liguero disputado a mediados de septiembre (1-2). Ante los murmullos que empezaban a salir de las gradas por sus actuaciones, le dej¨® en el banquillo para evitar un hundimiento an¨ªmico si el extremo brasile?o le bailaba. ¡°Me pone muy contento el presente de Molina. Ha sido muy criticado en el inicio. Suele pasar. Estamos en un club donde la exigencia es alta y donde no hay espacio para tener tiempo y hay que rendir. Y es el mejor camino que le pudo haber pasado en la primera etapa, donde no estuvo de la mejor manera¡±, admite Simeone.
El Cholo a¨²n considera que debe mejorar en defensa, pero, como con De Paul, tambi¨¦n ha apreciado en Molina al jugador que crey¨® fichar: un lateral largo con influencia en el juego de ataque para romper en velocidad y centrar. Una versi¨®n que emergi¨® en varios momentos del Mundial y que se vio en la eliminatoria de Copa en el Santiago Bernab¨¦u. Molina no solo dio un pase preciso a Morata en el gol del Atl¨¦tico, sino que tuvo mucho peso por su banda en la buena primera parte que firm¨® el equipo. El objetivo del t¨¦cnico es que termine por formar una sociedad con Llorente como la que este mont¨® con Trippier. ¡°Hizo un Mundial extraordinario, sin ninguna duda uno de los mejores laterales del campeonato, y volvi¨® con seguridad, con tranquilidad. Se lo ha ganado todo desde el silencio, el trabajo y el querer¡±, le valora Simeone.
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