El Liverpool comprime la batalla por la Premier
Los de Klopp empatan con el Arsenal y el City, con un partido menos, queda a seis puntos del cuadro de Londres
![Liverpool Arsenal Premier League](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/H6KQXY6GA5AS3IPW4DKG4OLRSI.jpg?auth=d987661c1f29f14103b3813351a57b3380cc0df8417f6d84d8ac89a4494eb4a1&width=414)
En la antesala de su definici¨®n, la pelea por el t¨ªtulo de la Premier League se comprime tras un ag¨®nico partido en Anfield en el que el Arsenal se adelant¨® con dos goles y se pudo considerar bien parado tras el empate final (2-2). La ventaja se reduce de nuevo para el equipo que adiestra Mikel Arteta, que ahora manda con seis puntos de ventaja sobre el Manchester City, que el s¨¢bado venci¨® en Southampton (1-4) y tiene un partido menos. Al City le restan nueve partidos por disputar y uno de esos duelos es el que enfrentar¨¢ a ambos candidatos el pr¨®ximo d¨ªa 26 con el equipo de Pep Guardiola como anfitri¨®n.
El Arsenal tiene casta y futbol, pero en Liverpool se encontr¨® con un rival tan herido como orgulloso. A 29 puntos de la cabeza de la tabla y a 12 de los puestos de Champions League, el Liverpool trata de minimizar da?os mientras asume su reconstrucci¨®n. Diferentes vicisitudes explican su desplome, pero todas se resumen en una consecuencia: el equipo es incapaz de exponer su ADN desbocado y trepidante durante 90 minutos. Contra el Arsenal comenz¨® perezoso, cedi¨® dos goles de ventaja y se activ¨® en la recta final de la primera parte. Luego fue un rodillo. Sin la pegada de sus mejores d¨ªas, pero con la capacidad para someter al mejor equipo del campeonato.
Liverpool es una prueba de nivel para el Arsenal, que all¨ª firm¨® una de las p¨¢ginas m¨¢s ¨¦picas de su historia, un t¨ªtulo de Liga en 1989 con un gol sobre la hora de Michael Thomas que se convirti¨® en objeto de culto a trav¨¦s de la narraci¨®n de Fever Pitch, la Fiebre en las Gradas de Nick Hornby. Pero m¨¢s all¨¢ de esa gloria, Anfield es un calvario para el Arsenal, que no vence all¨ª desde septiembre de 2012. Entonces Arteta se alineaba en el centro del campo y los goles fueron cosa de Podolski y de Santi Cazorla. Los de Martinelli y Gabriel Jesus, antes de la media hora de partido, pareci¨® que iban a situarse al mismo nivel. Pero entonces lleg¨® el Liverpool al partido.
Salah descont¨® con un gol poco antes del descanso, al que se lleg¨® con el estadio enardecido. Nada m¨¢s volver del receso una torpeza de Holding, sustituto del lesionado Saliba, provoc¨® un penalti que marr¨® el zurdo egipcio. Pero ya todo se hab¨ªa desatado. El asedio local llev¨® al Arsenal a defender m¨¢s abajo de lo que lo hab¨ªa hecho en todo el campeonato.
Sin capacidad para encontrar salidas, Arteta acab¨® por retirar del campo a Gabriel Jesus y Odegaard para armar una zaga de cinco con la agregaci¨®n del inexperto central polaco Kiwior, un fichaje de enero procedente del modesto Spezia italiano. Firmino empat¨® en el minuto 87 y abri¨® un final fren¨¦tico en el que el Arsenal ech¨® de menos a un buen pasador que explotase los latifundios que dej¨® la ambici¨®n del Liverpool. Se fue con codicia a por la victoria el equipo local y se top¨® con una muralla, con Ramsdale, un prodigio bajo palos que dej¨® intervenciones memorables, en especial dos sobre Salah y una estirada final sobre la l¨ªnea de gol para negarle la victoria a Konat¨¦.
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