Alianza Lima rompe la maldici¨®n de 30 partidos sin ganar, la peor racha en la historia de la Copa Libertadores
El club peruano no lograba una victoria en el torneo continental desde marzo de 2012. Este jueves ganaron 2-1 a Libertad de Paraguay en Asunci¨®n
Un club anclado en un distrito llamado La Victoria llevaba 30 partidos sin ganar en el torneo de clubes m¨¢s competitivo de Sudam¨¦rica. Un club acostumbrado a la espera: estuvo 18 a?os sin ganar un campeonato. Pero sobre todo un club sacudido por la tragedia: en 1987 perdi¨® a su equipo en un accidente a¨¦reo. El mar de Ventanilla se lo trag¨®. En sus 122 a?os de historia, Alianza Lima ha conocido breves alegr¨ªas y amarguras prolongadas. Sus seguidores tienen plena conciencia de ello. Pero adem¨¢s ha padecido una condici¨®n que no le hac¨ªa justicia en la ¨²ltima d¨¦cada: ser inmenso en el Per¨² y verse empeque?ecido cada verano en la Copa Libertadores.
Desde el 27 de marzo de 2012, cuando super¨® por 1-0 al Nacional de Uruguay, Alianza Lima obtuvo seis empates y 24 derrotas en este campeonato. Cada partido hac¨ªa la herida m¨¢s profunda. Disputar la Libertadores m¨¢s que una nueva oportunidad de enmienda acababa siendo un calvario. Hasta este jueves, en el Defensores del Chaco, en Asunci¨®n, cuando despu¨¦s de 4.055 d¨ªas la maldici¨®n se cort¨® y ganaron 2-1. Y ante qu¨¦ rival: Libertad, el puntero del f¨²tbol paraguayo, un equipo que solo hab¨ªa perdido una vez en este a?o y que ven¨ªa precedido de la haza?a de haberle ganado al Atl¨¦tico Mineiro en Belo Horizonte.
Este Alianza Lima versi¨®n 2023 no quiso conformarse con ser el actual bicampe¨®n del f¨²tbol peruano. Se prepar¨® para zafarse de este embrujo. Contrat¨® a dos defensas con pasado en la Bundesliga: el argentino Santiago Garc¨ªa y Carlos Zambrano, un defensa corajudo que cuando levanta menos los codos es impecable. Fich¨® al 10 de la selecci¨®n peruana, Christian Cueva, que hasta que no se ponga en forma tendr¨¢ un lugar reservado en la banca; as¨ª como a Gabriel Costa, un uruguayo nacionalizado peruano que hac¨ªa unos meses era el extremo del Colo Colo chileno. Tambi¨¦n fich¨® a dos colombianos: Andr¨¦s Rifle Andrade, un volante de jerarqu¨ªa que alguna vez brill¨® en el Am¨¦rica de M¨¦xico y Pablo Sabbag, un delantero barranquillero de ascendencia siria que hab¨ªa alternado en las ligas de Portugal y Argentina.
Tres de los mencionados no saltaron a la grama del Defensores del Chaco. Garc¨ªa se lesion¨® en el calentamiento, Cueva todav¨ªa no est¨¢ en un ritmo futbol¨ªstico ¨®ptimo, y Costa acarreaba una molestia muscular. Y aun as¨ª lo logr¨®. La raz¨®n es que todos se sienten parte de un equipo, incluso los actores de reparto m¨¢s cuestionados como Aldair Rodr¨ªguez, un atacante con poqu¨ªsimo gol que el a?o pasado fue noticia por fracturar de la tibia y el peron¨¦ a un defensor de River Plate. Fue Rodr¨ªguez, quien en el amanecer del segundo tiempo, le gan¨® la espalda a su marcador, gracias a un pase teledirigido del Rifle Andrade, se intern¨® en el ¨¢rea paraguaya y defini¨® como un billarista en una esquina.
Seis minutos despu¨¦s, el mismo Aldair aprovech¨® una pelotera para poner el segundo con un remate mordido. En el estadio, los casi mil aliancistas que volaron desde Per¨² y viajaron por tierra desde Argentina, estallaron. Su voz reson¨® como un eco entre la poca hinchada local. Pero el ¨¢rbitro argentino Facundo Tello fue al VAR y lo anul¨® por una supuesta falta del defensa Pablo M¨ªguez. Inmediatamente, Guillermo Salas, el entrenador de Alianza Lima, se puso los dedos a la sien, emulando a Ricardo Gareca, el argentino que lider¨® el retorno de Per¨² a los mundiales luego de 36 a?os. Hab¨ªa que mantener la cabeza fr¨ªa.
Al fin y al cabo, una pel¨ªcula de terror de once a?os merec¨ªa su cuota de suspenso. Minutos despu¨¦s, el t¨¦cnico de Libertad, Daniel Garnero, envi¨® a la cancha dos postes con 80 a?os de experiencia: los delanteros Roque Santa Cruz (41) y ?scar Tacuara Cardozo (39), dos viejos zorros que en sus ¨¦pocas de juventud brillaron en el f¨²tbol europeo. La consigna era clara: si no se hab¨ªa podido por abajo, con la pelota dominada, tal vez por arriba, con alg¨²n cabezazo. La zaga aliancista no se amilan¨® y menos el arquero ?ngelo Campos, que para ese entonces hab¨ªa ahogado varios gritos de gol.
En medio de esa incertidumbre, los visitantes armaron una jugada no tan vistosa y la pelota le lleg¨® mansa a la zurda de Pablo Sabbag, que le peg¨® en primera, d¨¢ndole una par¨¢bola muy similar a esos goles que se ven ¡ªy envidian¡ª en la Premier League. La banca de Alianza se abraz¨® alocadamente, y medio Per¨² tambi¨¦n.
El ¨¢rbitro Facundo Tello, que se empecinaba en buscar protagonismo en esta historia, dio seis minutos de tiempo extra. A los 91 surti¨® efecto: mano de M¨ªguez y penal. El Tacuara Cardozo descont¨® con un misil inatajable. Por la demora, Tello dio dos minutos adicionales no aptos para cardiacos. Pero Alianza Lima lo supo manejar y resisti¨® para coronar una noche hist¨®rica. En la transmisi¨®n por televisi¨®n se filtraron casi como una reivindicaci¨®n los c¨¢nticos aliancistas desde Asunci¨®n. Alianza Lima, el due?o de la racha m¨¢s vergonzosa de la Copa Libertadores, es el l¨ªder del Grupo G con cuatro puntos, junto al Atl¨¦tico Paranaense, el subcampe¨®n del 2022. Siempre amanece.
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