Haaland golea en el ¨¢rea y en el mercado

Regresa el Manchester City al Bernab¨¦u, un a?o despu¨¦s de la semifinal que disput¨® y perdi¨® con el Real Madrid. Un a?o m¨¢s, encabeza la Premier y ha alcanzado la final de la Copa inglesa. Su tenaz combate con el Arsenal no ha acabado, pero hasta ahora el City nunca ha dejado escapar el t¨ªtulo cuando ocupaba el liderato. Si lo consiguiera, sumar¨ªa el quinto campeonato en las siete temporadas de Guardiola, f¨¦rreo dominador del f¨²tbol en Inglaterra y anhelante perseguidor de la evasiva Copa de Europa. Ah¨ª es donde Haaland entra en escena.

El gigante noruego ha sido objeto de curiosidad y an¨¢lisis desde que se anunci¨® su fichaje a finales de la ¨²ltima temporada. A su alrededor, y al de Pep Guardiola, se inici¨® un debate que ya est¨¢ casi cerrado. Como tantas veces ocurre con Guardiola, sus cr¨ªticos anticiparon conclusiones definitivas: Haaland, un gigante rematador, no encajar¨¢ en el minucioso modelo del equipo y Guardiola no sabr¨¢ amoldarse a las caracter¨ªsticas del noruego. ?La raz¨®n? Los delanteros centros le molestan, presunci¨®n casi universal, pero falsa.

Haaland ha marcado 35 goles en los 32 partidos de Liga que ha disputado, la m¨¢xima cifra en la historia de la Premier. En las diversas competiciones de la temporada, ha sumado 51 goles. Un debate se ha cerrado ¡ªsu impacto en el City es bestial¡ª y otro se insin¨²a en las ¨²ltimas semanas, a cargo de los mismos que dudaban del recorrido de Haaland con Guardiola. Visto el espectacular rendimiento del jugador y del equipo, se ha invertido la tesis. ¡°Ah, Haaland. As¨ª cualquiera¡±.

Durante sus 15 a?os como entrenador, Guardiola ha dirigido a una honorable colecci¨®n de delanteros centro: Eto¨®, Ibrahimovic, Lewandowski, Ag¨¹ero y ahora Haaland. Excepto Ibrahimovic, que marc¨® 22 goles en su ¨²nica temporada en el Bar?a, los dem¨¢s fueron trascendentales. Eto¨® a?adi¨® 30 goles en la Liga 2008-09, la ¨²nica que jug¨® a las ¨®rdenes de Guardiola. Lewandowski atraves¨® por vez primera en su carrera la barrera de los 30 goles en su segundo a?o en el Bayern, dirigido por el t¨¦cnico catal¨¢n. Las cifras de Ag¨¹ero tambi¨¦n fueron muy nutritivas: 128 goles en cinco temporadas.

El fichaje de Haaland no hay que verlo como desaf¨ªo estil¨ªstico de Guardiola. Haaland ha honrado su fama de goleador por todos los equipos donde ha pasado. El City no es excepci¨®n. El club ingl¨¦s, que intent¨® sin ¨¦xito fichar a Harry Kane hace dos a?os, contrat¨® al delantero noruego como la garant¨ªa m¨¢s segura de ¨¦xito. En este cap¨ªtulo, su rendimiento no ha sorprendido a nadie. No hab¨ªa un solo club en Europa que sospechara de Haaland y su relaci¨®n con el gol.

Tan interesante o m¨¢s que el r¨¢pido encaje de Haaland en el equipo es el significado de su aterrizaje en el City, dentro del mapa de poder en el f¨²tbol mundial. Por primera vez desde la llegada de los emirat¨ªes en 2009, el Manchester City ha logrado fichar a una indiscutible estrella del f¨²tbol, uno de esos pocos jugadores por lo que suspira cualquier gran club. Ni tan siquiera dominaba el segundo escal¨®n. Van Dijk prefiri¨® el Liverpool, Maguire eligi¨® el United, Frankie de Jong rechaz¨® la oferta del City y fich¨® por el Bar?a. El dinero de los emiratos no pod¨ªa con la fascinaci¨®n que les produc¨ªa la vieja aristocracia.

Haaland cambia el plano radicalmente. Su fichaje eleva al City a la segunda posici¨®n en el mercado, donde s¨®lo el Real Madrid le adelanta con claridad. S¨®lo encontrar¨¢ una posibilidad de reducir un poco m¨¢s la distancia: ganando la Copa de Europa. Y para ese objetivo, que tanto elude al Manchester City, no exist¨ªa garant¨ªa m¨¢s prometedora que la de Erling Braut Haaland.

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