La vieja vida de Toni Kroos

Una nueva final de la Champions para el Real Madrid pasa otra vez por el City y M¨¢nchester, la ciudad donde ahora reside Carlos Henrique Casemiro. All¨ª, bajo el cl¨¢sico encapotamiento del norte de Inglaterra y con la camiseta del United, el brasile?o ha seguido con cierta sorpresa c¨®mo su viejo compa?ero de triunfos Toni Kroos ha ocupado en las ¨²ltimas semanas la posici¨®n que ¨¦l dej¨® vac¨ªa el pasado verano en el pivote del equipo blanco. Ni los 80 millones abonados por Tchouameni ni los 30 del efervescente Camavinga; ha sido el alem¨¢n el que m¨¢s ha ejercido recientemente en los partidos importantes en un puesto que parec¨ªa contraindicado por sus caracter¨ªsticas desde que el propio Carlo Ancelotti lo usara ah¨ª en su primera etapa en el Bernab¨¦u.

La decisi¨®n se ha enmarcado en un peque?o giro de autor del italiano en el once tipo que manten¨ªa desde la final de Par¨ªs. En un momento en que su figura no atravesaba sus mejores d¨ªas, el t¨¦cnico movi¨® piezas para incluir a Rodrygo en la alineaci¨®n y, para ello, adopt¨® medidas que, a priori, eran consideradas de riesgo para la estructura defensiva. La colocaci¨®n de Kroos en el centro de la base de la medular -aprovechando tambi¨¦n el baj¨®n de Tchouameni- ha sido una de ellas; la otra, prolongar la aventura de Camavinga en el lateral izquierdo. Dos patas de una misma resoluci¨®n en cadena.

El germano entendi¨® desde el principio de curso que la sorprendente salida de Casemiro del Madrid -seg¨²n confes¨® en Universo Valdano- le obligaba a elevar la atenci¨®n defensiva. Lo que pocos esperaban es que tuviera que situarse donde el paulista en citas de gran cartel como parte de una idea general y no como un recurso de emergencia.

¡°He jugado de pivote contra el Barcelona [vuelta de semifinales de Copa] y en los dos partidos ante el Chelsea, y ha salido bien¡±, puntualiz¨® este lunes en sala de prensa Kroos, cuya renovaci¨®n se da por hecha. El teut¨®n, un tipo con discurso propio, se detuvo a explicar c¨®mo su nueva funci¨®n le ha obligado esas noches a mirar m¨¢s hacia atr¨¢s. ¡°Me siento muy c¨®modo ah¨ª. El pensamiento es diferente si juego de ocho o de seis. De ocho, est¨¢s m¨¢s adelante y sabes que, si pierdes duelos, hay otros que lo pueden arreglar. De seis, es distinto porque est¨¢s m¨¢s cerca de tu porter¨ªa, y tienes m¨¢s compromiso en los duelos y mentalidad defensiva. Piensas m¨¢s en lo que ocurre si el equipo pierde el bal¨®n. Con la pelota, no cambia mucho, hago mi juego¡±, expuso el alem¨¢n en la previa de la ida de las semifinales contra el City (21.00, Movistar), un equipo que mete ¡°tres o cuatro goles cada partido¡± y que exige ¡°tener una idea de c¨®mo defender¡±. Por detr¨¢s de ¨¦l, no contar¨¢ con Milit?o por acumulaci¨®n de tarjetas.

El trabajo obligado de Vinicius y Rodrygo

La f¨®rmula ideada por Carletto ha sido el camino m¨¢s recto para ascender a Rodrygo, confirmar a Camavinga y no perder a ninguno de sus innegociables. Los beneficios eran conocidos: una buena salida de bal¨®n, la que ya aportaba Kroos con un pivote al lado. Esta Champions, por ejemplo, es el jugador con m¨¢s pases (84) que han roto l¨ªneas de presi¨®n en el ¨²ltimo tercio, muy delante del segundo (Rodri, del City, 62). Pero los peligros tambi¨¦n eran claros: no es el mejor dotado para contener las acometidas rivales en un equipo que levant¨® cuatro Ligas de Campeones con un mediocentro defensivo cl¨¢sico.

La instrucci¨®n de Ancelotti ha sido colectivizar las tareas. El trabajo de un especialista hab¨ªa que repartirlo entre varios atacantes. ¡°Si hay compromiso colectivo, no se sufre. Depende mucho del trabajo de los delanteros, sobre todo, de Vinicius y Rodrygo, para tener el equipo compacto¡±, ha explicado Carletto, que ha asegurado que no ha tenido que convencer a Kroos para ocupar una demarcaci¨®n que la inmensa mayor¨ªa considera ortop¨¦dica debido a sus cualidades y de gran riesgo para el conjunto. ¡°?l no tiene ning¨²n problema. A Toni le gusta jugar al f¨²tbol, al margen de la posici¨®n¡±. En este plan de democratizaci¨®n forzada, las piernas de Camavinga y Valverde tambi¨¦n han resultado fundamentales para sostener el andamiaje de un cuadro que empieza a edificarse siempre por Kroos (33 a?os) y Modric (37). ¡°Defender es cosa del equipo¡±, apuntill¨® tambi¨¦n este lunes el germano.

Una de las conclusiones en el pensamiento colectivo que dej¨® el final de la primera etapa de Ancelotti, en 2015, es que la ubicaci¨®n del alem¨¢n como pivote (entonces no ten¨ªa un especialista puro) expon¨ªa demasiado al jugador y debilitaba al Madrid. Carletto siempre lo neg¨® y argument¨® que con ¨¦l hab¨ªa logrado 22 victorias seguidas. Sin embargo, la m¨¢xima adquiri¨® categor¨ªa de dogma cuando Zidane aup¨® a Casemiro al lado de Kroos y Modric, y el Madrid gan¨® cuatro Champions con este tr¨ªo. Tambi¨¦n Ancelotti extendi¨® con ¨¦xito la temporada pasada el triunvirato. Pero lleg¨® la primavera, Casemiro no estaba, Tchouameni hab¨ªa perdido vigor, concluy¨® que Camavinga le val¨ªa para todo y Carletto, dentro de un movimiento general ofensivo, aterriza en el duelo de ida ante el City con un once tipo donde el germano vuelve a aparecer en la base.

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