Mendilibar, el triunfo de la sencillez de un sabio del f¨²tbol
El vasco, con 62 a?os, dirigir¨¢ su primera final europea tras solo seis choques continentales derrotando al United y a la Juventus, por lo que el Sevilla se plantea su renovaci¨®n
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¡°Vamos a dejar ya el tema de la simpleza. Mendi sabe mucho de f¨²tbol. Le ha dado un ba?o a Allegri¡±. Las palabras de un alto cargo del Sevilla resonaron contundentes mientras el S¨¢nchez Pizju¨¢n era una fiesta. El conjunto andaluz se acababa de meter en su s¨¦ptima final de la Liga Europa y los jugadores celebraban exultantes el pase con la afici¨®n. Mendi no estaba con ellos. Justo despu¨¦s del pitido final se meti¨® en los vestuarios. ¡°La fiesta es para los jugadores¡±, afirm¨® el vasco. Como Luis Aragon¨¦s en la final de la Eurocopa de 2008 con Espa?a, ganada a Alemania con el gol de Fernando Torres. Jos¨¦ Castro, presidente del Sevilla, acudi¨® a la sala de prensa del Pizju¨¢n para abrazar al nuevo h¨¦roe del sevillismo, reclutado por Monchi en una situaci¨®n l¨ªmite, con el Sevilla a dos puntos del descenso y en v¨ªsperas de visitar al C¨¢diz, entonces rival directo por la permanencia. Mendilibar no solo ha salvado al equipo andaluz de cualquier apuro clasificatorio con un gran bagaje de 19 de 24 puntos obtenidos. Es que ha metido al Sevilla en la final de la Liga Europa despu¨¦s de eliminar en los cuartos de final al Manchester United y en las semifinales al Manchester United. Buena parte de la clave, adem¨¢s de su sapiencia futbol¨ªstica, radica tambi¨¦n en el mensaje. ¡°Es sincero y va de cara. Ha tenido la capacidad de adaptarse a una plantilla muy variada. No se lleva igual con todos, pero los ha unido por el bien com¨²n¡±, revela a esta medio un peso pesado del vestuario sevillista.
Entrenadores de un enorme prestigio, caso de Ten Hag y el propio Allegri, han sido derrotados por este debutante en la Liga Europa a los 62 a?os, con solo seis partidos europeos (cuatro con el Sevilla y dos con el Athletic Club). Lo que hizo ante la Juventus pasar¨¢ a los anales. El conjunto de Mendi le remont¨® un duelo al gigante italiano despu¨¦s de hacerle 30 remates (11 a porter¨ªa) y sacar 18 saques de esquina. ¡°Siento que esto es un premio a un entrenador que siempre ha dirigido a equipos que pelean por otros premios. Hay otros entrenadores que trabajan en equipos peque?os y esto es un premio, tambi¨¦n, para todos ellos¡±, afirmaba el t¨¦cnico que le ha cambiado la cara al Sevilla. Un t¨¦cnico muy peculiar que lleg¨® para tres meses y al que Monchi se plantea ahora renovar.
Mendilibar, si tiene un mensaje que dar, lo hace de forma directa, sin enjuagues; con crudeza, pero tambi¨¦n sin sa?a o con dobles intenciones. Tal vez por eso los jugadores suelen estar a muerte con ¨¦l. Como Marko Dmitrovic, portero sevillista que renunci¨® a irse concentrado con la selecci¨®n de Serbia cuando se enter¨® de que Mendilibar, que le hab¨ªa dirigido en el Eibar, ser¨ªa su pr¨®ximo t¨¦cnico. ?Qu¨¦ le pidi¨®?, le preguntaban en una entrevista: ¡°Que paremos los balones, es lo b¨¢sico. Sencillez. A los porteros nos pide parar y a los delanteros marcar¡±, y a?ade: ¡°Sab¨ªa lo que nos iba a traer, que iba a dar con la tecla con todos los jugadores, que nos iba a sacar nuestra mejor versi¨®n¡±.
La admiraci¨®n por Mendilibar se extiende a la mayor¨ªa de los futbolistas que han estado a sus ¨®rdenes: ¡°Es un gran entrenador¡±, asegura David Silva, ¡°sabe qu¨¦ hacer para sacar lo mejor de cada uno. Estamos en contacto¡±. Cuando el t¨¦cnico fue despedido por el Levante en 2014, viaj¨® a M¨¢nchester para observar de cerca los m¨¦todos de entrenamiento del City. Silva lo acogi¨® en su casa.
Mendilibar fue futbolista antes que entrenador. Ten¨ªa clase y la imparti¨® durante ocho temporadas en el Sestao de Javier Irureta, en Segunda Divisi¨®n, algunos de ellos al lado de Ernesto Valverde, pero su compa?ero progres¨® hasta el Espanyol, el Bar?a, el Athletic y el Mallorca, y ¨¦l, que se hab¨ªa formado en las categor¨ªas inferiores del Athletic, nunca dio el salto a Primera como jugador. ¡°Como futbolista fui un membrillo y por eso me gustan los jugadores con car¨¢cter¡±, confesaba cuando daba sus primeros pasos como t¨¦cnico. ¡°Quiero jugadores que aprovechen sus cualidades y, por lo tanto, no acaben siendo unos futbolistas membrillo¡±.
En Sevilla ha conseguido, con sencillez, que el equipo d¨¦ un vuelco total. Es su forma de trabajar, evitando las complicaciones: ¡°Hay campos de entrenamiento que parecen aeropuertos, llenos de conos, mu?ecos, vallas, cinturones para hacer arrastres... Igual que los porteros. Que si pelotas de tenis... Cualquier d¨ªa alguien empezar¨¢ con bolas de golf. Estamos perdiendo la sencillez en el f¨²tbol¡±.
En Sevilla ha tenido que cambiar algunos h¨¢bitos, entre otras cosas porque ya no est¨¢ en Zaldibar, su pueblo, que siempre ha sido su centro de operaciones. Eso s¨ª, ya sale a comer caracoles, un plato t¨ªpico en la capital andaluza en estas fechas. Cuando dirig¨ªa al Eibar, pasaba muy poco por los despachos del club. Entrenaba al equipo, a pocos kil¨®metros de su casa, y despu¨¦s estudiaba los partidos a la hora de la merienda. ¡°Yo tengo mucho tiempo libre. Para preparar un entrenamiento o un partido, no necesito toda la tarde. El trabajo aparte del entrenamiento lo hago en casa¡±.
Ahora tiene enfrente la final de la Liga Europa, su mayor reto competitivo como entrenador, aunque, entre los recuerdos de su pasado, siempre se queda, ¡°con la primera victoria con el Arratia. Fue en Bilbao, un partido de Regional. Volv¨ªa solo a casa, de Bilbao a Zaldibar hay 40 kil¨®metros, e iba dando botes en el coche¡±.
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