Carlos Alcaraz: ¡°No soy prepotente, simplemente conf¨ªo en m¨ª mismo¡±
El n¨²mero uno charla con EL PA?S sobre su hist¨®rico triunfo en Wimbledon, la fama y su fulgurante ascensi¨®n que, para muchos especialistas, no tiene l¨ªmites
¡°?Qu¨¦ te juegas a que la meto?¡±. Jaime, el hermano peque?o de los Alcaraz Garfia, lanza una y otra vez a la canasta situada junto al p¨®rtico de entrada de la casa en la que se ha alojado la familia durante el ¨²ltimo mes. El ni?o reta mientras su hermano Carlos, el segundo de los cuatro hijos, va recibiendo uno a uno y con una sonrisa de oreja a oreja a los enviados especiales que le han acompa?ado estos d¨ªas en Wimbledon, donde el murciano ha vuelto a hacer historia. El tenista (El Palmar, Murcia; 20 a?os) derrib¨® el d¨ªa antes un imperio, el de Novak Djokovic, y en su rostro se percibe la descompresi¨®n l¨®gica de quien ha efectuado un sobreesfuerzo. R¨ªe el campe¨®n con facilidad, est¨¢ feliz, pero al mismo tiempo tiene cara de sue?o y en sus maniobras se refleja un ligero agotamiento. No es para menos.
Han sido 12 extenuantes partidos en las cuatro semanas que ha permanecido en Londres, marco de un giro hist¨®rico en su deporte. No perd¨ªa el serbio en la Catedral desde 2013, pero al final lleg¨® ¨¦l, Carlitos, el n¨²mero uno que sube como la espuma, y lo cambi¨® todo. El tenis asiste al nacimiento definitivo de una nueva era con ¨¦l al frente, levitando y proyect¨¢ndose, tanto y en tan poco tiempo que no pocos especialistas adivinan un dise?o nunca veces visto: Federer, Nadal y Djokovic, un tres en uno. Atestigua Nole ¨C¡°hab¨ªa visto un jugador como ¨¦l¡±, explicaba el balc¨¢nico la noche previa, tras caer en la final¨C, mientras el joven rey del circuito, con dos grandes ya en la mochila y un mundo por delante, sugiere la f¨®rmula. A ¨¦l le funciona, aunque omite lo evidente, lo intangible: ¡°Trabajo, trabajo y trabajo¡±. Sus piernas est¨¢n perfectamente definidas, choca con fuerza la mano y su acento murciano se multiplica cuando interact¨²a con los suyos.
Pregunta. Leo Messi durmi¨® con la Copa del Mundo cuando gan¨® el Mundial de Qatar. ?Le ha dado a usted por hacer lo mismo?
Respuesta. Antes estaba ah¨ª [dice se?alando a una estancia anexa], pero ahora no s¨¦ d¨®nde est¨¢. La verdad es que no he dormido con el trofeo, pero no descarto hacerlo uno de estos d¨ªas¡ [risas].
P. ?Qu¨¦ tal duerme uno siendo campe¨®n de Wimbledon?
R. He dormido muy, muy bien. Ayer me fui a la cama muy tranquilo en comparaci¨®n con la noche antes de la final¡ Fue una noche de nervios y at¨ªpica, y compar¨¢ndola con esta ha sido como, ?puf!, mucha m¨¢s tranquilidad ya... Estoy mucho m¨¢s relajado.
P. ?Y con qu¨¦ sue?a un n¨²mero uno despu¨¦s de conseguir lo que ha conseguido usted?
R. Sinceramente, no recuerdo qu¨¦ he so?ado hoy, pero suelo hacerlo, eso s¨ª. Soy de los que cae en un sue?o profundo y suele so?ar.
Me considero un currante y trabajo much¨ªsimo todos los d¨ªas; al final, los detalles marcan la diferencia
P. ?Ha asimilado ya que ha ganado Wimbledon y que ha llegado hasta aqu¨ª, o bien empieza a normalizar todo esto?
R. No, no, todav¨ªa sigo proces¨¢ndolo¡ Todav¨ªa no me lo creo, la verdad.
En este instante, el responsable de comunicaci¨®n de la ATP aproxima la copa que acredita su gesta en el All England Tennis Club, el santuario verde de la raqueta. Tambi¨¦n se deja ver por la habitaci¨®n espor¨¢dicamente su agente, Albert Molina, el hombre que sigue todos y cada uno de sus pasos por el mundo. ¡°Carlitos, han llegado m¨¢s rosas¡¡±, le transmite, mientras su padre, tambi¨¦n Carlos, observa entusiasmado el gigantesco ramo de flores blancas y calcula el peso del jarr¨®n. Cerca de la cocina, el hermano mayor, ?lvaro, explica que los movimientos y el tenis de Djokovic son abrumadores: ¡°Te empuja todo el rato hacia atr¨¢s, te las pone siempre donde quiere, te abre, te corta¡ Es una salvajada¡±. El protagonista, entretanto, acoge en sus brazos el trofeo y lo abraza como si tuviera el temor de que alguien pudiera arrebat¨¢rselo. ¡°Mira, ?aqu¨ª est¨¢, aqu¨ª lo tengo!¡±, dice al interlocutor entre carcajadas.
P. Habl¨¢bamos de usted y lo extraordinario.
R. No, la verdad es que no me lo creo, y a¨²n sigo dici¨¦ndoselo a mi familia: ?Que soy campe¨®n de Wimbledon! Y eso son palabras mayores. Era un sue?o y es una locura el haber podido cumplirlo. Siempre so?¨¦ con ganar este torneo porque es diferente y te hace sentir diferente. Ves el verde, lo perfecto que es el c¨¦sped y lo bonito que es el club, y te conquista r¨¢pidamente.
P. Contaba hace tres a?os que no se sent¨ªa un elegido; despu¨¦s, cuando gan¨® el US Open, volvi¨® a negar. Sin embargo, no le creo. Conv¨¦nzame, por favor.
R. Le voy a ser sincero, no me considero un elegido. Esto se consigue simplemente a base de trabajo, no hay secretos. En este mundo no hay secretos, sino que todo se consigue a trav¨¦s de la constancia, del esfuerzo y del d¨ªa a d¨ªa. Los detalles marcan la diferencia. Muchos grandes deportistas o leyendas de todos los ¨¢mbitos lo suelen decir: los detalles son los que marcan la diferencia, y al final el perseguir tu sue?o, el tener claro que lo vas a cumplir y el confiar en que lo vas a cumplir es lo que marca la diferencia y lo que te hace llegar a las metas que te propongas. No soy un elegido, sino que simplemente he perseguido mi sue?o y he cre¨ªdo en m¨ª en todo momento. Obviamente, detr¨¢s de todo estoy hay much¨ªsimo, much¨ªsimo trabajo.
Quiero ser uno de los mejores de la historia y para ello hay que so?ar y vivir siempre a lo grande
P. Entonces, ?se considera un currante m¨¢s all¨¢ del talento que posee?
R. S¨ª, me considero un currante, aunque eso ha ido cambiando conforme han ido pasando los a?os. Debo serle sincero, y al principio no lo era tanto... [risas]. Al final, cuando eres peque?o siempre te cuesta hacer algunas cosas que no te gustan, pero he ido aprendiendo que los d¨ªas que cuestan, los d¨ªas que no tienes ganas, los que no te apetece ir a entrenar o en los que te falta motivaci¨®n, cuentan el doble. As¨ª que tienes que levantarte de la cama y exigirte a ti mismo hacerlo. He aprendido a hacerlo y creo que eso es lo que est¨¢ marcando la diferencia y lo que me ha llevado a estar donde estoy hoy. En esto no hay regalos.
P. En muy poco tiempo ha pasado de ser una promesa, un chico con una cotidianeidad normal, a ser uno de los rostros m¨¢s reconocibles de un deporte global como el tenis. ?C¨®mo consigue que todo esto no le venga demasiado grande?
R. Yo creo que la explicaci¨®n est¨¢ en que, al final, tenemos muy claro nuestro objetivo. Estamos cumpliendo poco a poco nuestro sue?o: ser n¨²mero uno, ser campe¨®n de un Grand Slam, ganar Wimbledon¡ y quiero ganar Roland Garros y Australia tambi¨¦n, pero el objetivo a muy largo plazo es que me consideren uno de los mejores de la historia, como lo han conseguido grandes leyendas como Djokovic, Rafa [Nadal] o Federer. Siempre lo he dicho, puede ser que ese objetivo sea muy grande, demasiado ambicioso o que crean que soy un prepotente, pero al final en esta vida hay que pensar y so?ar a lo grande, y hay que ir a por ello. No me viene grande todo esto porque s¨¦ y tengo muy claro lo que quiero conseguir en un futuro, as¨ª que debo seguir por este camino.
P. En un caso excepcional como el suyo, ?se es consciente de lo bueno que es? ?es plenamente consciente del potencial que atesora y de hasta d¨®nde puede llegar?
R. Hay que ver la realidad y ser sinceros. S¨ª s¨¦ lo buen jugador que soy, y no creo que eso sea prepotencia, sino simplemente confianza en uno mismo. S¨¦ de la dificultad que tienen los rivales para ganarme y para jugar a un grand¨ªsimo nivel durante tanto tiempo contra m¨ª para poder vencerme, y creo que esa es una virtud que tengo. Se trata de confiar en uno mismo y, s¨ª, s¨¦ que soy un buen jugador... [risas].
Echo de menos hacer algunas cosas propias de un chico de 20 a?os, pero eso me dura poco tiempo
P. Despu¨¦s de ganar en Nueva York, en septiembre del a?o pasado, dijo que no hab¨ªa hecho las cosas del todo bien, que se hab¨ªa despistado un poco. ?Cree que puede suceder lo mismo despu¨¦s de este pelotazo o se ha corregido en ese sentido?
R. Tengo la lecci¨®n m¨¢s que aprendida. Es como el partido contra Djokovic en Roland Garros y el de ayer; aprendo de los errores. Cada vez que me pasa algo que no tendr¨ªa que haberme pasado, aprendo para estar preparado de cara a la pr¨®xima vez que ocurra y para que no suceda de nuevo. No creo que vuelva a pasarme lo del US Open porque esa lecci¨®n ya est¨¢ aprendida en mi cabeza.
P. En estos momentos, despu¨¦s de un subid¨®n tan grande como el de ayer y de toda la adrenalina procesada durante las ¨²ltimas semanas, ?qu¨¦ es lo que m¨¢s le apetece hacer?
R. Sinceramente, volver a casa y estar all¨ª en familia, volver a estar con ellos y comer con ellos. Lo echo de menos. Echo de menos esas rutinas de estar en mi pueblo y con mis amigos, el estar en casa; sin hacer gran cosa, ?eh? Simplemente disfrutar de tener esa sensaci¨®n de que est¨¢s tranquilo junto a ellos y que nos echemos unas risas.
P. Su ¨ªndice de popularidad se ha disparado; de hecho, es el que m¨¢s ha crecido entre todos los tenistas del circuito. Le demandan en todos lados. ?No echa en falta la normalidad? ?C¨®mo lleva la fama?
R. Tiene sus cosas buenas y otras no tan buenas. Para ciertos aspectos echo de menos poder hacer determinadas cosas. Echo de menos hacer algunas cosas que suele hacer un chico de 20 a?os normal y corriente, pero eso me dura poco tiempo. Todo el mundo quiere vivir su sue?o y yo tengo la suerte de poder estar vivi¨¦ndolo y alcanz¨¢ndolo, de rodearme de grandes leyendas del deporte espa?ol y del deporte en general, de todos los ¨¢mbitos. El poder charlar con ellos¡ Era algo que no pod¨ªa imaginar, de alguna forma. Cuando te dicen que te admiran no te lo crees, as¨ª que tiene sus cosas buenas y sus cosas no tan buenas.
Cuando era peque?o me costaban algunas cosas, pero ir a entrenar los d¨ªas duros vale el doble
P. Estos d¨ªas han estado vi¨¦ndole jugar en la central de Londres desde Brad Pitt a Shakira, pasando por todo tipo de personalidades. Cuando est¨¢ ah¨ª y los ve, ?qu¨¦ piensa?
R. Que es una bestialidad, la verdad. Ves a grandes artistas, a actores y a deportistas que van a ver tus partidos y apoy¨¢ndote, escribi¨¦ndote, dici¨¦ndote que est¨¢n orgullosos de ti¡ Y es una aut¨¦ntica locura.
P. Escribe Toni Nadal que, m¨¢s all¨¢ de Djokovic, que tiene 36 a?os, no ve a alguien que sea capaz de plantarle cara ahora mismo de verdad. ?Qu¨¦ opina?
R. Es muy complicado jugar a un grand¨ªsimo nivel durante todo y el a?o y todos los torneos, as¨ª que creo que hay muchos jugadores que est¨¢n ah¨ª. Tengo el head to head [cara a cara] en contra con Felix [Auger-Aliassime] y contra alg¨²n que otro jugador, y tengo dificultades porque al final cada rival es distinto y unos me pueden hacer m¨¢s da?o que otros. Cada vez que juego contra Sinner, por ejemplo, ¨¦l aumenta su nivel al cien por cien, y yo lo mismo; ¨¦l me ha ganado y yo le he ganado en grandes batallas¡ Holger [Rune] tambi¨¦n est¨¢ ah¨ª, as¨ª que hay much¨ªsimos que me pueden ganar y hacerme partido. Eso es el tenis.
P. ?Y Djokovic? ?Cree que a su edad podr¨¢ mantenerle el pulso y hacer frente al ¨®rdago hist¨®rico que le ha lanzado?
R. S¨¦ que ahora todo el mundo querr¨¢ ganarme y eso es bonito, pero a la vez yo mantengo la vista puesta en Novak. Me encantar¨ªa jugar muchas veces m¨¢s contra ¨¦l [hasta ahora han sido tres, con un 2-1 favorable al espa?ol], porque es un desaf¨ªo tremendo y sigo considerando que ¨¦l es el mejor. Siempre le he admirado, he visto infinidad de v¨ªdeos suyos para aprender. No basta con ganarle un partido para cambiar eso, as¨ª que tengo que hacerlo m¨¢s veces.
Antes de la despedida, Alcaraz revisa de manera exhaustiva el trofeo. ¡°No, no est¨¢ mi nombre. Solo aparece el de los ganadores hasta 2008¡±, dice por equivocaci¨®n, puesto que su apellido ya figura en la base. ?l es el primer campe¨®n de Wimbledon desde 2002 que no se llama Federer, Nadal, Djokovic o Murray, y ha ingresado por este ¨²ltimo triunfo 3,2 millones de euros, por lo que las ganancias por sus m¨¦ritos estrictamente deportivos ascienden ya a 17,8 millones de euros. Adentrado en una nueva realidad, el tenista no detendr¨¢ la marcha y esta misma semana se desplazar¨¢ a Niza para disputar la recuperada Copa Hopman ¡ªcompetici¨®n mixta que ha vuelto al calendario¡ª con Espa?a. Antes regresar¨¢ un par de d¨ªas a El Palmar para saborear esa paz local que tanto echa en falta y de las reuniones con los amigos en la plaza del pueblo.
¡±Volvemos a casa, pero esto sigue¡±, advierte su padre. ¡°Luego iremos a Canad¨¢ y Estados Unidos [Montreal y Cincinnati], y despu¨¦s tendr¨¢ que ir a Nueva York a dar el callo¡±, prosigue el progenitor, a la vez que su hijo, el campe¨®n que seduce, divisa con compromiso y optimismo lo que est¨¢ por venir: ¡°S¨ª, a finales de agosto toca otra vez el US Open. Ojal¨¢ todo siga como hasta ahora y tengamos charlas como esta m¨¢s a menudo¡±.
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