La Liga, entre Courtois y Mbapp¨¦
El duelo Bar?a-Madrid funciona como locomotora de un torneo todav¨ªa expectante con el mercado despu¨¦s de la lesi¨®n del portero y el futuro del ariete vinculado al PSG
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La Liga empieza cuando todav¨ªa contin¨²a abierto el mercado hasta el d¨ªa 31 y hay muchos futbolistas en tr¨¢nsito, en la sala de espera, en el escaparate o han ca¨ªdo en la enfermer¨ªa, alguno incluso sin que sepa si podr¨¢ jugar porque no tiene equipo o no ha sido inscrito, ninguno tan protagonista como Mbapp¨¦. La sensaci¨®n es que la temporada no empezar¨¢ hasta que no se sepa el destino de la estrella vinculada al PSG. Y el enigma Mbapp¨¦ afecta al torneo espa?ol porque hay indicios de que podr¨ªa recalar en el Madrid por m¨¢s que ahora se diga que seguir¨¢ en Par¨ªs.
La ilusi¨®n madridista por Mbapp¨¦ ha chocado con el miedo por la grave lesi¨®n de Courtois. Incluso un club serio y organizado como el Madrid est¨¢ expuesto a la incertidumbre del f¨²tbol, al azar incontrolable para el negocio, al juego como raz¨®n de ser y a contratiempos inesperados como el de su excelente portero, la llave maestra de sus t¨ªtulos, el jugador capital en la Champions junto con Benzema. Los dos no estar¨¢n en la Liga.
La inversi¨®n que haga el club de Florentino P¨¦rez marcar¨¢ por tanto el tono de una Liga que se ha empobrecido progresivamente despu¨¦s de un ejercicio de austeridad ¡ªy tamb¨¦n de autoridad y de poder¡ª por parte de la patronal dirigida por Javier Tebas. Ya no queda rastro de aquellos a?os en que el campeonato era el centro del universo por el pulso Messi-Cristiano, Guardiola-Mourinho, Bar?a-Madrid. Messi declin¨® regresar este verano despu¨¦s de que el Bar?a le echara hace dos a?os por falta de dinero, el Madrid ha ahorrado para embellecer el futuro Bernab¨¦u y a la clase media le cuesta recuperar la competitividad despu¨¦s de los estragos causados por la covid-19.
Las figuras del cartel en un momento en que se impone sin reservas ni posiblidad de negociaci¨®n el juego limpio financiero son un ingl¨¦s de 20 a?os y un alem¨¢n de 32: Jude Bellingham e lkay G¨¹ndogan. Ambos ignoraron a la codiciosa Premier. Bellingham descart¨® seguir en el Borussia Dortmund y prefiri¨® el Madrid. La misma opci¨®n por la que se decant¨® el ahora lesionado Arda G¨¹ler, por el que pujaba el Bar?a. El Madrid apuesta por el futuro mientras los azulgrana invierten en la cantera y seducen a veteranos como G¨¹ndogan.
El capit¨¢n del tricampe¨®n City, declin¨® renovar y apost¨® por el Bar?a. G¨¹ndogan se la jug¨® por una instituci¨®n econ¨®micamente tan fr¨¢gil que ni siquiera le ha podido inscribir a¨²n en la Liga cuando se sabe que quedar¨¢ libre si no puede jugar el domingo contra el Getafe. La llama del f¨²tbol, as¨ª como una vida y unas exigencias diferentes, han tenido su importancia para G¨¹ndogan. Ni siquiera el Caso Negreira ha acabado con los intangibles de un Barcelona hipotecado, condicionado por una herencia ruinosa y extraviado en Europa desde 2015. La divisa del m¨¦s que un club y el estilo de juego todav¨ªa fortalecen la marca Bar?a.
El atractivo del Madrid no necesita imaginaci¨®n sino que son 14 Champions. La rivalidad de los dos grandes funciona como locomotora del campeonato y el Cl¨¢sico es referencia mundial, un dato meritorio si se tiene en cuenta el modelo societario madridista y del Bar?a. Los dos son propiedad de los socios y compiten con clubes estado y fondos de inversi¨®n muy presentes en la Premier, Arabia y Am¨¦rica. Alcanza con ver a Messi, Busquets y Alba en el Inter de Miami. La duda es si el Bar?a y el Madrid se podr¨¢n mantener alejados de las SAD. Los acreedores cercan a los azulgrana y el Madrid lidera una Superliga escrutada por los tribunales de Europa.
Florentino aspira a trascender como Santiago Bernab¨¦u. El uno auspici¨® la Copa de Europa y el otro la Superliga; el primero se encomend¨® a Di St¨¦fano y el segundo pretende investir a Mbapp¨¦; y los dos han coincidido en la necesidad de construir el mejor estadio Bernab¨¦u. Un modelo presidencialista que ha servido de referencia a Joan Laporta. La diferencia es que el Bar?a no puede retener siquiera a Demb¨¦l¨¦, duda sobre el formato de la Superliga y ha tenido que alquilar Montju?c por las obras del Camp Nou.
Ahora mismo cuesta imaginar una Liga sin el Camp Nou. El factor campo fue decisivo para el t¨ªtulo ganado la pasada temporada por el Barcelona. Las condiciones cambiar¨¢n y aumentar¨¢ la competencia porque se espera la recuperaci¨®n del Atl¨¦tico del eterno Simeone y se supone que mejorar¨¢n las prestaciones del Sevilla ¡ªya sin Monchi¡ªy no se sabe si del Valencia. Hay clubes que sobreviven a una pol¨ªtica discutible de sus due?os mientras otros se presentan como modelo, caso de la Real Sociedad u Osasuna.
Los amos han invertido los millones del cr¨¦dito firmado por la Liga con CVC en fichajes m¨¢s que en mercadot¨¦cnica o infraestructuras, la fiscalidad tampoco ayuda precisamente, mengu¨® el poder adquisitivo y las salidas son m¨¢s trascendentes que las llegadas ante las exigencias salariales de la patronal: Canales se ha ido a M¨¦xico, El Bilal Tour¨¦ al Atalanta y Kang in Lee al PSG al tiempo que los dos grandes de Francia ser¨¢n entrenados por dos espa?oles: Luis Enrique (PSG) y Marcelino (Marsella). Emery, por su parte, est¨¢ en el Aston Villa con Pau Torres y Guardiola sigue en el Manchester City junto a Rodri.
Los n¨²meros sit¨²an a la Liga como un torneo menor por los 254 millones gastados en compras ¡ª103 por Bellingham m¨¢s 30 como variables¡ª, muy por debajo de la Premier (1.300 millones) e incluso del campeonato italiano (550 millones), franc¨¦s (475) y alem¨¢n (450, que podr¨ªan ser 560 si se cierra el fichaje de Kane por el Bayern), adem¨¢s de la Saudi Pro League (410), que ha captado a Benzema adem¨¢s de un surtido de jugadores de las mejores ligas como Mahrez, Kant¨¦ o Man¨¦. El club que m¨¢s ha invertido ha sido el Arsenal de Mikel Arteta con 230 millones ¡ª116,6 por Rice, una cifra inferior a la que abon¨® el Barcelona en total por Demb¨¦le (140) en el curso 2017-2018.
El franc¨¦s se va al PSG mientras no se sabe a¨²n el destino de Hazard, Sergio Ramos, De Gea, Neymar o Jo?o F¨¦lix (127,2 millones), la tercera contrataci¨®n m¨¢s cara en los ¨²ltimos cinco a?os despu¨¦s de las de Demb¨¦l¨¦ y Coutinho (135). Ning¨²n movimiento tendr¨¢ en cualquier caso el impacto que supondr¨ªa la salida de Mbapp¨¦. Aunque empieza la Liga, y se anuncian m¨¢s cambios con el VAR, la prolongaci¨®n del tiempo a?adido en favor del efectivo y un mayor control contra el racismo, ninguna expectativa supera la de Mbapp¨¦, ni la de Courtois e incluso la de Neymar. Hay multitud de hilos sueltos cuando la pelota se ponga en juego, raz¨®n de m¨¢s para evitar los pron¨®sticos, y m¨¢s despu¨¦s de que cayera un futbolista que parec¨ªa formar parte de la porter¨ªa como Courtois. Hoy ni siquiera se sabe qui¨¦n ser¨¢ el portero ni el ariete de la Liga.
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