Tiger Woods y Nike, un imperio de 27 a?os y 500 millones

El 30 de diciembre pasado, s¨¢bado, Tiger Woods cumpli¨® 48 a?os. Un d¨ªa despu¨¦s, domingo 31 de diciembre, casi como un recordatorio de que el tiempo pasa volando, terminaba (o eso parece) una hist¨®rica relaci¨®n. El ¨²ltimo instante de 2023 marcaba tambi¨¦n el final del ic¨®nico acuerdo de patrocinio que el golfista estadounidense y la compa?¨ªa deportiva Nike firmaron por primera vez en 1996. Despu¨¦s de 27 a?os y m¨¢s de 500 millones de d¨®lares recibidos por el ganador de 15 grandes por la cesi¨®n de su imagen, el pacto ha concluido sin que ninguna de las dos partes haya comunicado p¨²blicamente si separan sus caminos de manera definitiva o siguen cogidos de la mano. En el aire queda la continuidad o no de un imperio que sacudi¨® el deporte mundial. Y tambi¨¦n la posibilidad de que Nike cierre una divisi¨®n de golf que edific¨® sobre el gran mito.

25 de agosto de 1996. Un joven Tiger Woods da los ¨²ltimos golpes de su vida como aficionado. Es un adi¨®s por todo lo grande. Ese domingo conquista su tercer US Open amateur consecutivo, lo nunca visto antes. Dos d¨ªas despu¨¦s confirma el salto al mundo profesional. Tambi¨¦n a lo grande, claro. Nike le ba?a en oro sin ni siquiera haber embocado un putt en la ¨¦lite: 40 millones de euros por cinco temporadas. Un ic¨®nico anuncio televisivo acompa?a a la firma. ¡°Hola, mundo. Dicen que no estoy preparado para ti. ?Est¨¢s preparado para m¨ª?¡±, afirma Tiger en la pantalla. Phil Knight, fundador de la compa?¨ªa deportiva, asegura: ¡°El mundo no ha visto nada como lo que ¨¦l har¨¢ por el deporte¡±. Ten¨ªa raz¨®n. Dos d¨ªas m¨¢s tarde, el 29 de agosto, Woods debuta entre los mayores en el Greater Milwaukee Open. En abril del a?o siguiente conquista el primer grande que disputa como profesional, el Masters de Augusta de 1997, el inicio de la revoluci¨®n. En efecto, ya nada ser¨ªa lo mismo.

Aquellos primeros 40 millones por unirse a Nike fueron solo el comienzo de una fuente de dinero para las dos partes. Tiger rompi¨® su relaci¨®n anterior con Ping y Reebok, y se convirti¨® en una m¨¢quina de facturar. Nike multiplic¨® por 10 sus ingresos, de los 30 millones anuales antes de la era de Woods a los 300 solo dos campa?as despu¨¦s de su fichaje. Por ponerlo en perspectiva, en 1984, cuando at¨® a Michael Jordan, la compa?¨ªa le entreg¨® un cheque de 250.000 d¨®lares m¨¢s un porcentaje de las ventas de las zapatillas Air Jordan para convencerle de no se marchara con Adidas. En 1996, el mejor acuerdo de esponsorizaci¨®n en el golf lo disfrutaba hasta entonces Greg Norman. Reebok le pagaba dos millones, 20 veces menos que Nike al nuevo ¨ªdolo. Tiger romp¨ªa todos los esquemas.

Su juego era ya un anuncio en s¨ª mismo. Como aquel chip en el hoyo 16 del Masters de Augusta de 2005, cuando la bola rueda suavemente hasta caer en el ¨²ltimo instante en el hoyo mostrando el logo de Nike. Era la vida real pero parec¨ªa una pel¨ªcula. As¨ª que Nike fue sucesivamente renovando y engordando el contrato de su estrella: en 2001, otros 100 millones por cinco a?os m¨¢s; en 2006, ocho cursos por un acuerdo que oscilaba entre los 160 y los 320; en 2013, una renovaci¨®n por 10 temporadas y 200 millones m¨¢s en la cuenta. Hasta hoy, son 27 a?os de matrimonio por los que Tiger ha ingresado entre 500 y 660 millones de d¨®lares. La repercusi¨®n para la compa?¨ªa es casi incalculable. Solo el Masters de 2019, el de su resurrecci¨®n, propin¨® a la entidad un beneficio de 22,5 millones.

Nike permaneci¨® fiel a Tiger incluso en los peores momentos, su largo historial de lesiones y sobre todo el esc¨¢ndalo de su infidelidad, cuando muchas firmas le abandonaron (AT&T, Accenture, Gatorade, Gillette, Tag Heuer...). La compa?¨ªa ha continuado vistiendo al Tigre para la batalla a pesar de que en 2016 dej¨® de fabricar material de golf. Woods usa hoy palos de la marca TaylorMade, bola de Bridgestone y zapatos deportivos de FootJoy, un dise?o especial que emplea desde su terrible accidente de tr¨¢fico en 2021. Su pr¨®ximo destino puede ser la firma Greyson Clothiers, que ya tiene acuerdos con su hijo Charlie, de 14 a?os, y con su gran amigo en el circuito, Justin Thomas.

La monta?a de dinero que levantaron Tiger y Nike luce incluso m¨¢s al comparar esos m¨¢s de 500 millones con los 120 que ha amasado el jugador estadounidense en premios en su larga carrera, que incluye 15 grandes (tras el r¨¦cord de 18 de Jack Nicklaus) y 82 t¨ªtulos en el PGA Tour (mejor marca hist¨®rica igualado con Sam Snead). Seg¨²n la revista Forbes, Woods, Michael Jordan (94 millones en salarios en la NBA) y LeBron James son los tres ¨²nicos deportistas de la historia que han superado los 1.000 millones de d¨®lares netos en ingresos entre sus n¨®minas deportivas, sus negocios y sus patrocinios (Tiger alcanza los 1.700).

En una ¨¦poca en la que el golf est¨¢ fracturado por el desembarco de la liga saud¨ª y contrataciones r¨¦cord como la de Jon Rahm, Tiger contin¨²a ejerciendo como la multinacional que siempre ha sido. Greg Norman, consejero delegado de LIV, admiti¨® que el Tigre rechaz¨® un tal¨®n de entre 700 y 800 millones por cambiar de bando. Hace ya m¨¢s de un cuarto de siglo que Nike empez¨® a pagarle como una leyenda antes incluso de serlo.

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