El Manresa saca la mejor versi¨®n del Unicaja

Sud¨® de lo lindo el Unicaja, campe¨®n de la fase regular, para cogerle el hilo al duelo y retorcerlo en el ¨²ltimo cuarto, justo cuando hablan los buenos. Penalidad para el Manresa, equipo modesto dirigido por Pedro Mart¨ªnez que plant¨® cara para certificar que no celebra cada victoria como inesperada sino como reveladora. En M¨¢laga, sin embargo, le sobr¨® el ep¨ªlogo.

Pronto explic¨® el Manresa que lo suyo es darle al bot¨®n del turbo y hasta donde lleguen las fuerzas y el baloncesto, que suele dar para mucho. Y eso que el Unicaja comenz¨® como sabe, con Kravish y Kalinoski al frente. Estirones sin demarrar porque el Manresa no bajaba la cabeza ni escond¨ªa la mu?eca, duelo de tensi¨®n al punto que Robinson y Osetkowski, tambi¨¦n Taylor y Williams, discutieron sin llegar a mayores.

El envite era de arrea y de circulaci¨®n fren¨¦tica con la prohibici¨®n de dejar una bola hu¨¦rfana, un rival libre, un tiro sencillo. Aunque Oriola, excelente en el pick and roll, logr¨® cerrar el pr¨®logo a favor de los manresanos (18-24). No hab¨ªa tiempo para relamarse o lamentarse, idas y venidas a la velocidad de la luz, toda vez que alg¨²n espectador debi¨® pensar que estaba en una cancha de tenis, torticolis al canto. En esas sobresali¨® Sagnia con sus zancadas a la vez que Dani Garc¨ªa y Steinberg hicieron chof desde su casa (18-30); entuerto que, de forma did¨¢ctica, atajaron Ibon Navarro con un tiempo muerto y Benjamin Button Thomas (37 a?os) con sus canastas.

Parec¨ªa que el Unicaja ya estaba sobre la pista. Pero nada de eso porque Geben bajo el aro y Badio con un ¨²ltimo triple volvieron a argumentar que el Manresa no es Cenicienta, que si le dan la mano coge el brazo. 34-40 al entreacto.

Ritmo, ritmo, ritmo. El choque no ten¨ªa pausa y a la que se reemprendi¨®, sigui¨® al galope. Oriola se hac¨ªa grande en la pintura ¨Cincluso desde la l¨ªnea de tres¨C y Osentkowski trataba de decir la suya frente a Devin Robinson. De aqu¨ª para all¨¢ con acento manresano de nuevo, con otros triples de Vaulet y Steinberg, aunque con dejo malague?o con el fino estilista Thomas y el francotirador Kalinoski. Espect¨¢culo del bueno que dej¨® el final en puntos suspensivos (52-56). Llegado el momento de la verdad, alimentado el Unicaja por un Carpena en ebullici¨®n, Kalinoski y Alberto D¨ªaz autografiaron dos triples para voltear el envite y explicar su gen ganador.

Y ya no hubo discusi¨®n, atinado el Unicaja cuando m¨¢s lo necesitaba. La inspiraci¨®n, el oficio, y un banquillo de quilates hicieron el resto ¨C35 a 23 en el ¨²ltimo cuarto¨C ante un Manresa que espera replicar en la serie el martes que viene. Esta vez el triunfo fue malague?o, una victoria de campe¨®n.

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