La dura realidad del Estudiantes, un club rom¨¢ntico
El club colegial sigue sin ascender a la ACB mientras mantiene su filosof¨ªa de cantera
Que el dinero no garantiza la felicidad, y tampoco el ¨¦xito deportivo, puede decirlo bien alto el Movistar Estudiantes, que este domingo volvi¨® a chocar con el muro del ascenso a la ACB despu¨¦s de perder la final de la LEB Oro en su casa contra el For?a Lleida (70-85), y por lo tanto seguir¨¢ en la segunda categor¨ªa del baloncesto espa?ol por cuarto curso seguido. Fue una tarde de drama local en el Madrid Arena para un club hist¨®rico, uno de los seis fundadores de la Liga nacional en 1957, una entidad reconocible por el sello de formaci¨®n y cantera que siempre le ha distinguido. En su primer intento de regreso, en 2022, el Estu cedi¨® en el partido decisivo contra el B¨¤squet Girona de Marc Gasol despu¨¦s de haber sido el primero de la clase en la temporada regular. Al curso siguiente lleg¨® una derrota en cuartos contra el San Pablo Burgos. Y esta campa?a, tras un cuarto puesto en la liguilla (primeros durante ocho jornadas), un nuevo baj¨®n, m¨¢s duro si cabe, como anfitri¨®n ante el Lleida.
Ni una afici¨®n entregada ni un presupuesto de altura han conseguido aupar al equipo colegial a la ACB. Solo San Pablo Burgos, con 1,5 millones, superaba este curso al Estu (1,1 millones) en las arcas, pero ninguno de los dos ha ascendido, apeados en semifinales y final por el Lleida. El Leyma Coru?a atrap¨® la plaza directa de ascenso con un mill¨®n de presupuesto, por los 750.000 euros del club leridano. Subir se paga cada vez m¨¢s caro, y la competencia se disparar¨¢ de nuevo el pr¨®ximo curso con San Pablo, Betis, Fuenlabrada y los descendidos Palencia y Obradoiro. Tampoco bast¨® el empuje de unos 7.000 abonados estudiantiles, solo por detr¨¢s de los 9.000 del Burgos, que han peregrinado por tres pabellones: el WiZink Center, casa habitual, el Magari?os cuando hubo que mudarse para algunos encuentros en fechas navide?as, y el Madrid Arena en la Final Four.
El castillo se derrumb¨® en una final que apenas existi¨® despu¨¦s del 0-14 de salida, con la primera canasta local a los ocho minutos y un ambiente de entierro. ¡°No ha habido partido. Hicimos 5 de 34 en tiro en los dos primeros cuartos, vino el baj¨®n moral y a partir de ah¨ª solo ha sido sufrir. En el vestuario hay 12 t¨ªos llorando pidi¨¦ndose disculpas entre ellos¡±, expres¨® el entrenador, Pedro Rivero; ¡°se habla de la presi¨®n, del s¨ª o s¨ª. Hoy ha sido no. La gente ha empujado y no nos dejaba irnos sin darnos ¨¢nimos¡±, a?adi¨®.
El chasco sit¨²a de nuevo al Estu en la encrucijada. La situaci¨®n econ¨®mica sigue siendo delicada, a pesar de que la deuda, que lleg¨® a ser de 20 millones de euros, se ha reducido a 5,8. El apoyo de las instituciones, lamentan, es casi inexistente (75.000 euros). En la pista, la filosof¨ªa de cantera no se toca pese a la complejidad de los tiempos. El club cuenta con m¨¢s de 2.500 canteranos en 100 equipos masculinos y femeninos, adem¨¢s de 150 t¨¦cnicos, 200 personas en escuelas de jugadores con discapacidad f¨ªsica e intelectual y otros 2.000 j¨®venes en los campus de verano. En categor¨ªa femenina, el club ha sido este curso campe¨®n de Espa?a infantil, j¨²nior y ganador de la Minicopa. En cuanto a los mayores, Hugo L¨®pez, Adams Sola y Carlos Su¨¢rez se han alistado este curso como canteranos en el primer equipo, aunque el primero termin¨® la temporada cedido en el Oviedo.
¡°La LEB Oro es una categor¨ªa complicada, porque cada vez se incorporan m¨¢s equipos que hacen las cosas bien. Ah¨ª es donde compite un club especial como el Estudiantes. Su filosof¨ªa es lo que le define y por eso tiene patrocinadores. No te puedes disparar en el propio pie, no puedes perder tu se?a de identidad¡±, explica Nacho Azofra, el jugador con m¨¢s partidos, 681, en la historia colegial. Pepu Hern¨¢ndez, entrenador referente que pas¨® por la cantera entre 1974 y 1990 y luego en el primer equipo hasta 2005 y en 2011-12, campe¨®n de Copa y subcampe¨®n de Liga, va en la misma l¨ªnea: ¡°La dificultad es consustancial a la historia de Estudiantes. Tambi¨¦n ahora, cuando vive a?os complicados intentando regresar al lugar que le corresponde. La identidad siempre ha estado ah¨ª y ser¨ªa una pena que se cambiara. Estudiantes es tambi¨¦n educaci¨®n en el deporte. Cierto que ha perdido algunas capacidades y que cada vez es m¨¢s dif¨ªcil que salgan jugadores. La cantera nos ha dado alegr¨ªas cuando el primer equipo se abastece de ella. Sin estar en la ACB es m¨¢s dif¨ªcil, y falta apoyo de las instituciones. Pero hay que seguir siendo nosotros mismos. Volveremos a intentarlo¡±.
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