Damaris Egurrola: ¡°En el Lyon hay cinco jugadoras que son como mis madres¡±

Damaris Egurrola (Orlando, EE UU; 24 a?os) jugar¨¢ este s¨¢bado la final de la Champions en San Mam¨¦s con el Olympique de Lyon, pero si las cosas no se hubieran torcido cuando abandon¨® el Athletic en el verano de 2020, probablemente defender¨ªa la camiseta del Bar?a, su rival en Bilbao. La centrocampista, a quien le empez¨® a gustar el f¨²tbol gracias a la plasticidad de Ronaldinho, estuvo a punto de firmar hace cuatro a?os con el club azulgrana, pero el acuerdo se trunc¨® cuando su exequipo exigi¨® 250.000 euros por ella a pesar de que acababa contrato y sobre la base de una pol¨¦mica cl¨¢usula del convenio colectivo que establece una compensaci¨®n por los derechos de formaci¨®n. Damaris alz¨® la voz, fue a juicio y finalmente se march¨® al extranjero, donde la norma no rige. Estuvo media temporada en el Everton, hasta que el Lyon pag¨® por ella 100.000 euros ¡ªuno de los fichajes m¨¢s caros de la historia¡ª en enero de 2021. La mediocentro zurda, un pilar clave en el centro del campo del conjunto franc¨¦s, cuenta que a veces se imagina c¨®mo habr¨ªa sido esa otra vida si las circunstancias hubieran sido distintas. ¡°No me escondo, me pasa por la cabeza. Pienso en d¨®nde podr¨ªa haber acabado, pero a d¨ªa de hoy soy muy feliz donde estoy. Llevo casi cuatro a?os jugando en el club de mis sue?os. Aquello fue muy duro, pero soy una persona que pasa p¨¢gina r¨¢pido¡±, dice en una entrevista con EL PA?S realizada el lunes.

De padre vasco, madre neerlandesa y nacida en EE UU ¡ªtiene las tres nacionalidades¡ª, Egurrola no solo sufri¨® esa disyuntiva, sino que en abril de 2022 tom¨® la determinaci¨®n de jugar con Pa¨ªses Bajos despu¨¦s de que el entonces seleccionador espa?ol, Jorge Vilda, estuviese casi tres a?os sin convocarla para la absoluta. Damaris, que hab¨ªa debutado con La Roja en un amistoso en mayo de 2019 contra Camer¨²n tras concatenar ¨¦xitos en las categor¨ªas inferiores de Espa?a, se enzarz¨® con Vilda en un cruce de declaraciones p¨²blicas y lo acus¨® de mentir cuando dijo que hab¨ªa intentado contactar con ella para seleccionarla. ¡°Me toc¨® levantar la voz, era lo que necesitaba, que la gente supiese la verdad¡±, afirma la centrocampista, que en el Mundial sub20 ya hab¨ªa tenido un encontronazo con el t¨¦cnico en el vestuario cuando le espet¨® que no le gustaba c¨®mo jugaba. Este s¨¢bado tendr¨¢ enfrente a varias amigas con las que comparti¨® camiseta y ¨¦xitos en la sub17 ¡ªplata en el Europeo y bronce en el Mundial¡ª, la sub19 ¡ªoro en el Europeo¡ª y la sub20 ¡ªsubcampeonato Mundial¡ª: Patri Guijarro, Aitana Bonmat¨ª, Ona Batlle, Cata Coll y Claudia Pina. ¡°Tengo recuerdos maravillosos. A esas edades vivimos experiencias extremas viajando a pa¨ªses lejanos y ganando casi todo. Las considero mis amigas, hablo con ellas durante toda la temporada, pero siempre que jugamos en contra dejamos de hablar una semana antes. Nos queremos mucho, pero es lo que nos conviene cuando hay en juego un partido as¨ª¡±, explica.

El choque del s¨¢bado es especialmente emotivo para ella. Damaris lleg¨® a Espa?a con seis a?os tras vivir en Florida. Su padre, Pablo, fue pelotari profesional all¨ª, pero una huelga que se alarg¨® durante a?os empuj¨® a la familia Egurrola a mudarse a Euskadi. ¡°Fue cuando empec¨¦ a practicar deportes. Todo a la vez: f¨²tbol, tenis, pelota vasca a mano, a pala¡­ lo intent¨¦ todo hasta que tuve que decidir. Todos me dec¨ªan que era mejor al tenis, pero hice caso a lo que me hac¨ªa m¨¢s feliz, que era el f¨²tbol, tener un equipo alrededor. En el tenis, cuando iba a entrenar, estaba muy sola y no lo pasaba tan bien¡±, relata.

En el f¨²tbol escal¨® hasta que debut¨® en Primera con el Athletic en diciembre de 2015, con solo 16 a?os. Esa temporada gan¨® la Liga. Antes, en San Mam¨¦s hab¨ªa sido recogepelotas: ¡°Desde peque?a, mi sue?o es levantar la Champions, y poder hacerlo en San Mam¨¦s, con el equipo de mis sue?os, a¨²n ser¨ªa m¨¢s especial. Me acuerdo cuando era una ni?a y ve¨ªa con mis padres los partidos del Lyon como pod¨ªa en el ordenador porque no los daban en la tele. Hace a?os ve¨ªa a mis compa?eras c¨®mo jugaban finales, y esta semana estoy a pocos d¨ªas de hacerlo yo. Creo que a veces a¨²n no soy consciente¡±.

Su adaptaci¨®n al Lyon fue instant¨¢nea. Cuando lleg¨® hablaba castellano, euskera, ingl¨¦s y holand¨¦s, y ahora tambi¨¦n se expresa en franc¨¦s. ¡°Hay una conexi¨®n muy buena entre las mejores futbolistas del mundo. Me ayudaron desde el primer minuto. Hay m¨ªnimo cinco jugadoras que son como mis madres o como mis hermanas mayores. A los pocos d¨ªas me pegaron la mentalidad. En los primeros entrenos ya ve¨ªa que hab¨ªa que ganar hasta los rondos¡±, cuenta Egurrola, que no pudo jugar por lesi¨®n la final de 2022 en la que el equipo franc¨¦s tumb¨® al Bar?a en Tur¨ªn. ¡°Soy muy tranquila y no me suelo poner nerviosa, pero este es un caso excepcional. Estoy gestion¨¢ndolo lo mejor que puedo, pero sin cambiar mi rutina. En la primera final aprend¨ª mucho de mis compa?eras, que lo han ganado todo: c¨®mo asum¨ªan el evadirse toda la semana, olvidarse de datos, de estad¨ªsticas, de qui¨¦n es favorita¡­ solo preparar la final lo mejor posible¡±, dice.

Fundamental este curso en el centro del campo del Lyon, el equipo que ha dominado en Europa en la ¨²ltima d¨¦cada y media con ocho Champions, Egurrola cree que no hay favorito para la final. El Barcelona ha perdido las dos que jug¨® contra el conjunto franc¨¦s ¡ªen realidad, ha ca¨ªdo en los cinco encuentros entre ellos¡ª, pero es el actual campe¨®n y ganarle tendr¨ªa una simbolog¨ªa enorme: una tercera orejona ¡ªla segunda consecutiva¡ª con un triunfo al fin ante el ogro del f¨²tbol europeo, una forma de decir que la hegemon¨ªa continental tal vez est¨¦ cambiando: ¡°No nos preocupa ese tema. Todo el mundo es consciente de la historia del Lyon cuando ve su palmar¨¦s. Obviamente, el Bar?a est¨¢ haciendo las cosas muy bien, pero nosotras tambi¨¦n. Es uno de los mejores partidos que se puede ver a d¨ªa de hoy¡±.

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