El Liverpool rinde a un Madrid doliente
El equipo m¨¢s en forma de Europa deshace la resistencia del cuadro de Ancelotti, que perdi¨® tambi¨¦n a Camavinga por lesi¨®n, y ante la falta de Vinicius sigue sin encontrar una buena versi¨®n de Mbapp¨¦, que fall¨® un penalti
El Liverpool rindi¨® por fin al Real Madrid despu¨¦s de ocho partidos y dos finales de Champions de frustraci¨®n. Pero este equipo revitalizado por Arne Slot tras la marcha de Klopp es ahora mismo el cacique de Europa, mientras que el Real va desintegr¨¢ndose noche a noche y en Anfield perdi¨® tambi¨¦n a Camavinga, el mejor junto con Brahim y Courtois. El portero evit¨® una vez m¨¢s con varias intervenciones de iluminado que fuera mayor el sopapo de un Liverpool que funciona con una redondez aplastante y fue erosionando la resistencia del Madrid hasta que la derrumb¨® y le provoc¨® la tercera derrota en la Champions, la primera vez que le sucede en una fase inicial. No parece en riesgo su acceso a los cruces, pero tendr¨¢ que ser por el camino largo de los dieciseisavos. Al Madrid se le pone todav¨ªa m¨¢s cuesta arriba el curso, con m¨¢s partidos, menos efectivos y sin que Mbapp¨¦, que fall¨® un penalti, asome como l¨ªder.
Sali¨® a¨²n m¨¢s tocado de otra noche que sab¨ªan que iba a ser de apretar los dientes por Europa. Un d¨ªa para estar muy juntos, como aquel del curso pasado en que se mantuvieron en pie hasta los penaltis en M¨¢nchester, a apenas 50 kil¨®metros de Liverpool. Pero con el equipo en las raspas, de atr¨¢s adelante. Ning¨²n ejemplo mejor que Ra¨²l Asencio, a quien le lleg¨® el estir¨®n de repente: estreno en la Copa de Europa en Anfield, contra el l¨ªder de Europa, que tambi¨¦n manda con autoridad en la Premier. En su tercer partido con el primer equipo, el despertar tambi¨¦n le lleg¨® de golpe. No hab¨ªan pasado ni tres minutos cuando un bal¨®n que hab¨ªa sacado Courtois le rebot¨® a ¨¦l mientras retroced¨ªa, y se iba a gol. Reaccion¨® y lo sac¨® sobre la l¨ªnea. La bienvenida la complet¨® un forceje¨® con Darwin N¨²?ez en el ¨¢rea que le dej¨®, como al delantero, con amarilla con 80 minutos a¨²n por delante. Ni as¨ª se derriti¨®.
Aguant¨® ¨¦l y aguant¨® todo el equipo. Porque el comienzo fue eso: resistencia. Las emergencias y Ancelotti consiguieron que el equipo se juntara por la zona central mientras el Liverpool buscaba grietas para llegar a Courtois. El asalto fue progresivo. Gravenberch exploraba desde el eje, pero por all¨ª todav¨ªa no asomaba nada. El mayor peligro lo supon¨ªa Salah desde la derecha, como lanzador de Darwin, bien vigilado por Asencio.
El Madrid manten¨ªa el equilibrio vigilando la salida y trataba de aplacar el fuego del equipo de Slot manejando la pelota entre Modric, Camavinga, G¨¹ler, Brahim y Bellingham, otra vez luminoso. El ingl¨¦s siempre encuentra el tiempo, siempre crea el espacio. Les volaba el bal¨®n al principio y eso manten¨ªa aplacado al Liverpool. Pero apenas llevaban picante. Y a los ingleses se les fue evaporando el respeto a los campeones.
Slot avanz¨® l¨ªneas. Pisaron m¨¢s arriba Bradley por la derecha y Robertson por la izquierda, y Valverde, lateral de circunstancias, y Mendy empezaron a sufrir m¨¢s. Y con ellos todo el equipo, que no terminaba de abrirse porque lo manten¨ªa el pegamento de Camavinga. El franc¨¦s barr¨ªa todo el centro, tapaba cualquier fuga y aportaba criterio en la salida.
Pero el Liverpool ya les bat¨ªa encima como el mar agitado de invierno. Tanda de olas tras tanda de olas que iban erosionando la resistencia del Real. Segu¨ªan juntos, pero no tanto. Los sosten¨ªa, como tantas noches desesperadas, el malec¨®n de Courtois. Salv¨® una a bocajarro despu¨¦s de un barullo de R¨¹diger, sac¨® otra de un pu?etazo y una m¨¢s estir¨¢ndose abajo a un cabezazo.
Para entonces, Mac Allister y Gravenberch ya hab¨ªan encontrado el modo de descoserlos tambi¨¦n por el centro, por donde entr¨® el argentino al ¨¢rea para superar por fin a Courtois. Se abri¨® la compuerta y arreci¨® el aguacero sobre el Madrid. El Liverpool insisti¨® para terminar de llev¨¢rselo por delante. Y pareci¨® que era precisamente lo que iba a suceder, porque en ese punto se lesion¨® Camavinga. S¨ª, tambi¨¦n ¨¦l.
Pero ah¨ª es donde se levant¨® un poco el Real. Se fueron el franc¨¦s y G¨¹ler y entraron Ceballos y Lucas V¨¢zquez, que nada m¨¢s entrar forz¨® un penalti y coloc¨® al equipo en una posici¨®n que un minuto antes ni imaginaba. Kelleher acert¨® a d¨®nde iba a disparar Mbapp¨¦. El lanzamiento del franc¨¦s fue como todo lo suyo en Anfield, ejecuciones que recordaban vagamente a aquel futbolista deslumbrante y letal tan deseado en el Bernab¨¦u. Pero era eso: un esbozo emborronado, m¨¢s impreciso, menos ligero, sin filo. Sin Vinicius, lesionado, la noche esperaba a Mbapp¨¦ y Mbapp¨¦ no lleg¨®.
La cosa se torci¨® incluso un poco m¨¢s. Mendy derrib¨® a Salah en el ¨¢rea, y ah¨ª asom¨® el final. Pero el egipcio ech¨® el penalti fuera y el Madrid, aunque sobre el alambre, sigui¨® caminando. Volvi¨® a estirarse, impulsado por el empe?o de Brahim y Bellingham. Volvi¨® a pisar el ¨¢rea de Kelleher, pero no consigui¨® sacar nada de esas exploraciones, en parte por la falta de acompa?amiento de Mbapp¨¦, en una ¨¦poca baja de su romance con la pelota.
El Madrid se resist¨ªa a caer, pero su rebeld¨ªa provocaba que siguiera abri¨¦ndose y el Liverpool encontr¨® con un centro un agujero en el ¨¢rea en el que se levant¨® Gakpo para cabecear ante la mirada de Modric. El Real lo intent¨® ya a la desesperada, mientras segu¨ªa encajando golpes. Y as¨ª, mermado y orgulloso, lo rindi¨® el Liverpool despu¨¦s de tanto, y lo dej¨® con tres derrotas y dos victorias en esta nueva Champions.
Clasificaci¨®n | PT | PJ | PG | PE | PP |
---|---|---|---|---|---|
1
LIV
|
15 | 5 | 5 | 0 | 0 |
2
INT
|
13 | 5 | 4 | 1 | 0 |
3
BCN
|
12 | 5 | 4 | 0 | 1 |
4
BDO
|
12 | 5 | 4 | 0 | 1 |
5
ATA
|
11 | 5 | 3 | 2 | 0 |
Clasificaci¨®n | PT | PJ | PG | PE | PP |
---|---|---|---|---|---|
22
BRU
|
7 | 5 | 2 | 1 | 2 |
23
DZA
|
7 | 5 | 2 | 1 | 2 |
24
RMA
|
6 | 5 | 2 | 0 | 3 |
25
PSG
|
4 | 5 | 1 | 1 | 3 |
26
SHA
|
4 | 5 | 1 | 1 | 3 |
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