Cinco a?os despu¨¦s del ¡®Bar?agate¡¯: El final de Bartomeu se eterniza en los juzgados
La gesti¨®n comunicativa del club en el Bar?agate fue chapucera y acab¨® engullendo al entonces presidente azulgrana porque intentaron negar algo que pod¨ªamos demostrar. Escondieron, manipularon informaci¨®n y falsearon una auditor¨ªa para protegerse

El Bar?agate fue el principio del fin del mandato de Josep Maria Bartomeu como presidente del Bar?a, pero, cinco a?os despu¨¦s, el caso sigue en fase de instrucci¨®n en los juzgados. Y dicen que, si es lenta, la justicia deja de ser justa.
El 17 de febrero de 2020, en la Cadena SER, destapamos que el Bar?a hab¨ªa contratado a una empresa para lanzar mensajes en redes sociales que favorecieran a su presidente y perjudicaran a los que consideraba sus opositores. Los mensajes atacaban a exdirigentes como Joan Laporta, a futuros candidatos a las elecciones como V¨ªctor Font, a empresarios como Jaume Roures y a figuras relevantes del Bar?a como Guardiola, Xavi, Piqu¨¦ o Messi. Adem¨¢s, la contrataci¨®n se hab¨ªa realizado eludiendo los controles internos del propio club y pagando un precio elevado por los servicios, alrededor de un mill¨®n de euros cada a?o. La noticia fue bautizada como Bar?agate por un compa?ero periodista, y as¨ª qued¨® en el imaginario, aunque mucha gente prefiere llamarlo Bartogate, la polic¨ªa le puso Caso Hans y en Wikipedia aparece como Caso I3 Ventures, que es el nombre de la empresa que contrat¨® el Bar?a.
¡°No os dar¨¢n un Pulitzer por esta noticia¡±, nos dijo uno de los implicados cuando le contactamos para explicarle lo que hab¨ªamos descubierto. Primero nos hab¨ªa negado la informaci¨®n, pero ante la evidencia de todas nuestras pruebas, nos termin¨® reconociendo los hechos, aunque les rest¨® importancia. Los dirigentes de esa ¨¦poca arrastraron al club a lo que ellos llamaban ¡°la guerra del fango¡±, es decir, la batalla por el relato en las redes sociales. Ellos se sent¨ªan atacados en internet, al menos eso dec¨ªan, y quisieron contraatacar. Lo hicieron con dinero del Bar?a y difamando a socios del Bar?a.
La gesti¨®n comunicativa del club en el Bar?agate fue chapucera y acab¨® engullendo a Bartomeu porque intentaron negar algo que pod¨ªamos demostrar. Escondieron, manipularon informaci¨®n y falsearon una auditor¨ªa para protegerse. Seis directivos del Bar?a dimitieron pocos d¨ªas despu¨¦s de conocerse la noticia, un grupo de socios denunci¨® el caso ante la justicia y la polic¨ªa abri¨® una investigaci¨®n por presunta administraci¨®n desleal y corrupci¨®n entre particulares. Ocho meses despu¨¦s, Bartomeu dimiti¨® como presidente. Est¨¢bamos en plena pandemia de covid-19 y Messi hab¨ªa pedido marcharse despu¨¦s de perder por dos goles a ocho contra el Bayern de M¨²nich en la Liga de Campeones.
Pero han pasado cinco a?os y la investigaci¨®n judicial sigue abierta. El caso contin¨²a en fase de instrucci¨®n y todav¨ªa no ha declarado ninguno de los investigados. Es incomprensible tanta demora b¨¢sicamente porque, y aqu¨ª va el trabalenguas, todo lo que pod¨ªa saberse se sabe ya y si hay algo que no se haya sabido, ya no se sabr¨¢ nunca. Hay cierta dejadez judicial con este caso. Seg¨²n la polic¨ªa, Josep Maria Bartomeu fue el cerebro del Bar?agate; Jaume Masferrer, el brazo ejecutor; ?scar Grau, fue el tonto ¨²til; y Rom¨¢n G¨®mez Ponti, el colaborador necesario. Pero ninguno ha declarado y, por tanto, ni ha podido defenderse ni hemos podido comprobar hasta qu¨¦ punto se implican o disculpan unos a otros. Eran presidente, asesor de comunicaci¨®n, director general y jefe jur¨ªdico del Bar?a en aquella ¨¦poca y siguen siendo los cuatro investigados de una causa donde tambi¨¦n aparece Carlos Ib¨¢?ez, el jefe de I3 Ventures, que antes de colaborar con el Bar?a hab¨ªa trabajado para Sociedad Civil Catalana.
M¨¢s all¨¢ de la causa penal, el Bar?agate revel¨® una gesti¨®n negligente y ¨¦ticamente reprobable, el ejemplo de una mala manera de gobernar. Destaparlo fue como el cuento del ni?o que grita que el emperador va desnudo. Pero cinco a?os despu¨¦s, las redes sociales siguen mostrando las mismas trincheras e id¨¦nticas sospechas. El mismo circo, distintos artistas. El Bar?a ha sido, es y, posiblemente siempre ser¨¢, v¨ªctima de sus propias guerras intestinas. Un club muy grande con un entorno muy peque?o donde todos quieren controlar el relato y muchos siguen demasiado pendientes de las redes sociales. Sean ellos o sus m¨¢s estrechos colaboradores, sea de uno u otro modo, siempre estamos igual.
Sique Rodr¨ªguez es director del ¡®Qu¨¨ t¡¯hi jugues!¡¯ de SER Catalunya y de ¡®El Bar¡¯
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