Un marat¨®n de marcha en relevo mixto o la redenci¨®n en los Juegos Ol¨ªmpicos para Miguel ?ngel L¨®pez

Llam¨¢ndose Miguel ?ngel L¨®pez Nicol¨¢s era imposible no pensar durante todo 2016 que los Juegos de R¨ªo ser¨ªan una avenida de oro y gloria. El atleta de Llanos de Brujas, en Murcia, est¨¢ entonces en la flor de la juventud, preparado para la culminaci¨®n de una progresi¨®n permanente y extraordinaria. Tiene 28 a?os. Ha sido quinto en los Juegos de Londres, segundo en el Mundial de Mosc¨² 2013, primero en los Europeos de Z¨²rich 2014, campe¨®n del mundo en Pek¨ªn 2015¡­ Lleg¨® el momento de la triple corona, lo que ning¨²n atleta espa?ol hab¨ªa conseguido a¨²n, ni tampoco despu¨¦s. ¡°L¨®pez lleg¨® a R¨ªo que se iba a comer los Juegos, y los Juegos se lo comieron a ¨¦l. Lo o¨ªa tanto decirlo a la gente alrededor, a su entorno, que ¨¦l mismo estaba convencido de que iba a ser as¨ª, y no le importaba afirmarlo p¨²blicamente¡±, recuerda Jos¨¦ Antonio Carrillo, su entrenador de siempre. ¡°Estaba tan fuerte que hasta doblamos la apuesta, y tambi¨¦n decidimos competir en los 50 kil¨®metros. Y se derrumb¨®¡±.

El 12 de agosto eran los 20. Y ya antes de salir Carrillo se alarm¨®. La mirada, los gestos, las dudas. L¨®pez, el gran favorito de ¨¦l y de todo el mundo, se desintegr¨®. En un ejercicio de voluntad y sacrificio, acab¨® 11?. Una semana despu¨¦s, abandon¨® sin terminar los 50 kil¨®metros. ¡°Qu¨¦ importante es la cabeza, y el entorno, y el atleta, por supuesto¡±, dice Carrillo. ¡°Hay que abstraerse de lo que es una Villa Ol¨ªmpica, dejar las redes sociales¡­ Yo me acuerdo en el 16 que Miguel ?ngel L¨®pez estaba siempre con el m¨®vil atendiendo llamadas, leyendo mensajes. Te vamos a poner una pantalla gigante en tal sitio para ver tus pruebas, y cosas as¨ª. A m¨ª me buscaban incluso los periodistas: ¡®av¨ªsanos cuando vayas a romper el sombrero¡¯. Y rivales acerc¨¢ndose para felicitarme antes de la prueba y, como decimos por mi pueblo y creo que se dice en Espa?a, no se puede vender la piel del oso antes de cazarlo y esa ha sido mi m¨¢xima. Pero ahora espero que un Miguel ?ngel rejuvenecido muestre en los Juegos de verdad lo que vale. No en vano acaba de hacer un 20 en 1h 18m 33s¡±.

La experiencia de R¨ªo abri¨® una herida profunda en el ¨¢nimo y el esp¨ªritu del marchador murciano, desorientado y perdido deportivamente varios a?os. Encontr¨® la paz con Daniela y con su hijo Daniel, que ronda los cuatro a?os, y volvi¨® a triunfar en los Europeos de M¨²nich de 2022, ganando la prueba de los 35 kil¨®metros. ¡°Yo siempre he tenido fe de volver a conseguir algo grande y el 35 me ha dado la oportunidad. Nunca he perdido la esperanza, la ilusi¨®n para seguir compitiendo y entrenando, aunque no ha sido f¨¢cil¡±, dijo entonces el atleta. ¡°Una medalla m¨¢s para el saco, un segundo campeonato de Europa. Y, ahora, Par¨ªs, la medalla ol¨ªmpica, la que me falta¡±.

Ocho a?os despu¨¦s de R¨ªo, a los 36 y 35 d¨ªas de edad exactamente, L¨®pez encontrar¨¢ la oportunidad de la redenci¨®n ol¨ªmpica, este mi¨¦rcoles a las 7.00. No ser¨¢ en los 35 kil¨®metros, prueba que el COI considera demasiado larga y aburrida para la juventud de ahora, sino en una nueva competici¨®n que combina la distancia del marat¨®n, 42,195 kil¨®metros, con un relevo mixto por parejas que se van alternando, hombre mujer, 10km m¨¢s o menos cada uno. ¡°Ser¨¢ complicada¡±, dice L¨®pez, que har¨¢ pareja con la catalana Cristina Montesinos, pupila de Valent¨ª Massana. ¡°Har¨¦ 10 kil¨®metros y le pasar¨¦ el testigo a Cristina y tendr¨¦ 40 minutos m¨¢s o menos para recuperar. Es algo raro, que he tenido que entrenar, porque nunca hab¨ªa competido con una recuperaci¨®n de ese tipo. As¨ª que la segunda parte ser¨¢ la clave, y tambi¨¦n la t¨¦cnica¡±.

L¨®pez Montesinos y ?lvaro Mart¨ªn-Mar¨ªa P¨¦rez, los medallistas individuales en los 20 kil¨®metros, ser¨¢n las dos parejas espa?olas en el Trocad¨¦ro. Paul McGrath (17?) y Laura Garc¨ªa Caro (7?) no repetir¨¢n. ¡°Estaba claro y hablado con la federaci¨®n que Paul no repetir¨ªa¡±, dice Alejandro Aragoneses, entrenador de McGrath. ¡°De hecho, es un acierto tener a Miguel en esta prueba, tanto por estado de forma ¨Chemos compartido entrenamientos y hemos visto c¨®mo est¨¢¨C, como por experiencia y, sobre todo, por t¨¦cnica, es un valor seguro¡±.

A Carrillo le felicitan los jueces porque sus atletas lucen una t¨¦cnica perfecta y apenas reciben avisos, y la de L¨®pez es tan impoluta como su pelo y su raya, trazada con regla y cartab¨®n. Los 10 kil¨®metros son, sin embargo, un peligro. Se marcha a tal velocidad ¨Clos hombres los cubren en 38 minutos m¨¢s o menos, a 3m 45s el kil¨®metro¡ªque es dif¨ªcil no levantar los dos pies a la vez menos de las 50 mil¨¦simas que se consideran l¨ªmite del ojo humano. ¡°Y los avisos no son individuales, sino que se suman. Al tercer aviso son tres minutos de nevera, parado en la banda, y cada aviso m¨¢s, otro minuto, hasta el s¨¦ptimo, que es la descalificaci¨®n¡±, explica L¨®pez. ¡°Pero tenemos dos parejas de alt¨ªsimo nivel y hay que aprovechar¡±.

Ocho a?os despu¨¦s, Miguel ?ngel L¨®pez no llega a los Juegos para devorarlos, sino para gozarlos. ¡°S¨¦ c¨®mo va esto, son mis cuartos Juegos. Llegar es un ¨¦xito. Una medalla no es nada f¨¢cil, y mi paisano Alcaraz que valore la de plata, porque es muy importante¡±, reflexiona el marchador en v¨ªsperas de la marcha de su redenci¨®n ol¨ªmpica. ¡°Ni el deporte ni nadie me debe una medalla. Esto hay que pelearlo y trabajarlo. Tuve una oportunidad en R¨ªo y ahora tengo otra. Si llega, estar¨¦ superfeliz, y si no, contento por haber estado luchando por ella¡±.

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