El ¨²ltimo desaf¨ªo de Mbapp¨¦
El astro galo evita que se le asocie con el patrocinador cervecero de la FIFA en consonancia con una cuidada imagen de marca que huye de empresas de bebidas alcoh¨®licas o azucaradas y de comida r¨¢pida
Enfilado como va hacia el estrellato del Mundial, todos miran hacia Kylian Mbapp¨¦, que ante Polonia recogi¨® su tercer trofeo como mejor futbolista de los cuatro partidos que ha disputado con la selecci¨®n francesa. Apenas fall¨® en el duelo contra T¨²nez, del que solo jug¨® media hora. Las tres veces repiti¨® sutil, pero no inadvertido, un gesto: el jugador, que no quiere que se asocie su imagen a la de bebidas alcoh¨®licas, entre otras, recogi¨® el trofeo y pos¨® con ¨¦l tras darle la vuelta para que no se viese el logotipo que alberga en su base, el de la cervecera norteamericana Budweiser. Esta ya tiene problemas con la FIFA, a la que paga 75 millones de euros por patrocinios y que ahora valora la reclamaci¨®n de m¨¢s de la mitad de esa cantidad por la prohibici¨®n de que su cerveza se pueda beber en los estadios catar¨ªes.
El f¨²tbol es de los futbolistas hasta que el negocio les convierte en parte del escaparate. Y ah¨ª brotan peque?as y llamativas rebeliones. Hace ya casi medio siglo que Johan Cruyff en el primer Mundial disputado en Alemania modific¨® unilateralmente la camiseta que vest¨ªa con la selecci¨®n para retirar las tres rayas que identificaban a la marca de la competencia con la que hab¨ªa firmado un contrato de publicidad. En la pasada Eurocopa fue Cristiano Ronaldo el que le dio la vuelta a un popular refresco que acompa?aba su plano televisivo en una rueda de prensa mientras invitaba a beber agua, un gesto que provoc¨® una inmediata ca¨ªda en la cotizaci¨®n burs¨¢til de la compa?¨ªa se?alada por el astro luso.
Mbapp¨¦, que est¨¢ a punto de cumplir 24 a?os y al que se le espera en la c¨²spide del f¨²tbol durante la pr¨®xima d¨¦cada, dispone de un ej¨¦rcito de abogados y expertos con los que ejerce un f¨¦rreo control sobre su marca. El pasado mes de septiembre se neg¨® a posar en la sesi¨®n de fotos organizada por la Federaci¨®n Francesa de F¨²tbol para discutir las condiciones en las que se iba a manejar su imagen. Meses atr¨¢s ya hab¨ªan tenido un primer encontronazo porque el jugador reclama el m¨¢ximo control sobre las firmas a las que sale vinculado. Y no quiere verse identificado con alcohol, comida r¨¢pida, bebidas azucaradas o casas de apuestas. Cuando la federaci¨®n gala organiz¨® este a?o varios eventos con empresas de esos ramos simplemente no apareci¨® y reclam¨® que se definiese las obligaciones de los futbolistas. En la imagen tomada a Mbapp¨¦ con el trofeo al mejor jugador tras el Francia-Australia, el galo posiblemente no se percat¨® de que detr¨¢s aparec¨ªan algunas marcas con las que no quiere asociarse, la propia Budweiser, pero tambi¨¦n Coca-Cola o McDonald¡¯s.
El astro franc¨¦s trabaja en la actualidad con cinco patrocinadores: la firma de videojuegos EA Sports, la relojera Hublot, la firma de cosm¨¦tica nipona Bulk Homme y la de comida org¨¢nica para ni?os y beb¨¦s Good Gout, una compa?¨ªa gala con la que Mbapp¨¦ asegura que comparte la idea de ¡°inspirar a los ni?os a una vida m¨¢s saludable y feliz¡±. Adem¨¢s, el material deportivo que usa es Nike. Cuando en las conversaciones para recalar en el Real Madrid a sus asesores se les plante¨® la habitual norma del club blanco de disponer del 50% de los beneficios derivados de la cesi¨®n de sus derechos de imagen torcieron el gesto. Acab¨® por firmar un nuevo contrato con el PSG que le garantiza mantener ese control y esos ingresos.
Mientras tanto se enfoca en el Mundial. Donde alza trofeos y apenas se expresa fuera del campo. La nominaci¨®n como mejor jugador de un partido acarrea una serie de compromisos con los medios de comunicaci¨®n con derechos que Mbapp¨¦ evit¨® tras los partidos ante Australia y Dinamarca. Despu¨¦s de su exhibici¨®n contra Polonia s¨ª que habl¨®: ¡°No tengo nada contra nadie. Tengo la necesidad de centrarme en el torneo y no gastar energ¨ªa en otras cosas, pero me enter¨¦ de que la Federaci¨®n ten¨ªa que pagar una multa si no hablaba¡±, apunt¨® antes de concluir. ¡°Pagar¨¦ las anteriores sanciones. Es una decisi¨®n que es personal y no la deben costear otros¡±. No es el ¨²nico acuerdo al que ha llegado con la Federaci¨®n, que ya sabe desde 2017 que todas las primas destinadas al jugador por los triunfos con la selecci¨®n se destinan a entidades ben¨¦ficas.
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