Novak Djokovic, el ¡®chaval¡¯ de 36 a?os

Novak Djokovic departe con los reporteros serbios feliz, como si fuera el primer d¨ªa y no llevase un mill¨®n en la oficina. Nole responde, sonr¨ªe, bromea, acaricia su copa; se hace fotos con sus paisanos y atiende gentilmente a la corresponsal neoyorquina de TVE que le pide una contestaci¨®n fuera de turno ya. Desaprueba el director de comunicaci¨®n de la ATP, ¡°no, no, no, solo ingl¨¦s¡±, pero ¨¦l accede y se explica perfectamente. Hoy poco importa el protocolo. ¡°Nos vemos en Valencia en dos o tres d¨ªas, porque jugar¨¦ la Copa Davis para Serbia¡±, confirma el de Belgrado, que en ese instante ya respira mucho m¨¢s tranquilo porque oficialmente ha igualado los 24 grandes de Margaret Court, el r¨¦cord de todos los r¨¦cords en el tenis, y adem¨¢s disfruta de su cuarto trofeo en Nueva York, donde no triunfaba desde 2018.

Instantes antes de que se produzca la escena, su rival, Daniil Medvedev, plantea durante el parlamento a pie de pista la pregunta del mill¨®n: ¡°?Qu¨¦ haces todav¨ªa por aqu¨ª? ?Venga ya!¡±.

El ruso, derrotado en el episodio final por 6-3, 7-6(5) y 6-3, despu¨¦s de 3h 17m, se pregunta sencillamente c¨®mo demonios un hombret¨®n de 36 a?os que lo ha ganado todo y que acumula 20 temporadas como profesional puede seguir conservando tanto apetito y tanto tenis en su raqueta, porque lo m¨¢s l¨®gico ser¨ªa que Djokovic hubiera pinchado an¨ªmicamente en un momento u otro, o bien su juego hubiera deca¨ªdo o su cuerpo ¨Cpor muy perfecto que sea¨C dicho basta. Nada de eso. Hoy por hoy, el balc¨¢nico sigue siendo un chaval con la misma ilusi¨®n y tanta o m¨¢s fuerza que el d¨ªa en el que comenz¨® en esto de sortear la red con la pelota.

¡°S¨ª, alg¨²n d¨ªa dejar¨¦ el tenis, en unos 23 o 24 a?os¡­ Hasta entonces¡±, se dirige a Medvedev, ¡°me ver¨¢s un poco m¨¢s¡±, bromea el campe¨®n, el m¨¢s veterano que ha conocido el grande neoyorquino ¨Chasta ahora lo era Ken Rosewall, 35 en 1970¨C y que desde este mismo lunes vuelve a recuperar el tim¨®n del circuito en detrimento de Carlos Alcaraz, descabalgado por el ruso en las semifinales. El espa?ol de 20 a?os logr¨® ganarle la partida a Nole en el esplendoroso desenlace de Wimbledon, pero esta vez ha sido el serbio el que se lleva el gato al agua. Y son tres de cuatro este curso: Open de Australia, Roland Garros y el US Open. Paradojas de la vida, cuando tal vez lo m¨¢s razonable ser¨ªa que Djokovic estuviera entrando en su fase crepuscular, ofrece otra vez su perfil m¨¢s fuerte, por lo menos en lo que a resultados se refiere.

El llanero solitario

Es la cuarta vez que consigue ganar tres grandes en una misma temporada. Lo consigui¨® previamente en 2011, 2015 y 2021. En las dos primeras ocasiones ten¨ªa 24 y 28 a?os, respectivamente. Es decir, pasa el tiempo y el circuito se renueva, pero Djokovic conserva toda su vigencia. ¡°Estaba cansado y le faltaban algunos tiros al final de algunos intercambios, pero, al mismo tiempo, ese es Novak; no importa c¨®mo, ¨¦l sigue ah¨ª¡±, ahonda Medvedev, superior en el pulso de hace dos a?os y rendido esta vez tras ceder el segundo parcial, dirimido tras 104 minutos, absolutamente clave.

¡°No he jugado ning¨²n torneo en suelo estadounidense durante dos a?os, y la ¨²ltima vez que estuve aqu¨ª perd¨ª en la final contra el mismo jugador al que he ganado hoy [por el domingo]. Realmente hice todo lo posible en las ¨²ltimas 48 horas para no permitir que la importancia del momento y lo que est¨¢ en juego se me subieran a la cabeza, porque hace dos a?os eso es lo que sucedi¨®, y tuve un rendimiento inferior; no pude estar en mi mejor momento y fui superado. As¨ª que aprend¨ª mi lecci¨®n¡±, expone Nole, un llanero solitario que el a?o pasado perdi¨® en su trinchera generacional a Roger Federer, retirado, y este a Rafael Nadal, los tres compinchados para defender la pujanza de la vieja guardia. Lesionado (y operado) el mallorqu¨ªn, en 2023 el serbio ha tenido que hacer frente ¨¦l solo a la ascensi¨®n fulgurante de Alcaraz y el empuje del resto de los componentes de la ¨²ltima camada.

Aun as¨ª ha levantado cinco t¨ªtulos ¨Csolo uno menos que el murciano¨C y ha vencido a rivales de todos los colores. A excepci¨®n del bache de resultados que sufri¨® en el trazado preparatorio hacia Roland Garros, su rendimiento ha sido muy elevado y le ha permitido reafirmar su jerarqu¨ªa en los grandes escenarios, que al fin y al cabo es donde apunta desde hace tiempo. En Australia no admiti¨® contestaci¨®n pese a sufrir un percance muscular en el muslo; en Par¨ªs aprovech¨® la ausencia de Nadal para sacar tajada en ese territorio tradicionalmente hostil para ¨¦l, doblegando adem¨¢s a Alcaraz; una versi¨®n sensacional de este le priv¨® de otro bocado en Wimbledon; y en Flushing Meadows no ha necesitado ofrecer su mejor nivel para sacarse la espina.

¡°Necesitas reinventarte¡±

¡°Siempre hay algo que estoy tratando de agregar para poder mejorar mi rendimiento, al menos por un peque?o porcentaje. Es un proceso constante. Pero incluso si encuentras una f¨®rmula que funciona, no es una garant¨ªa, y en realidad lo m¨¢s probable es que no funcione el pr¨®ximo a?o. Necesitas reinventarte, porque todos los dem¨¢s lo hacen. Como un joven de 36 a?os que compite con j¨®venes de 20 a?os, probablemente tengo que hacerlo m¨¢s de lo que nunca lo he hecho para mantener mi cuerpo en forma, para poder recuperarme y poder rendir al m¨¢s alto nivel de manera consistente¡±, se?ala.

A continuaci¨®n, Djokovic menciona a Tom Brady (f¨²tbol americano) y LeBron James (NBA). ¡°Tal vez se me pueda llamar perfeccionista. S¨¦ que no soy el ¨²nico¡±, dice; ¡°s¨¦ que hay muchos grandes campeones en diferentes deportes que prosperan para perfeccionarse a s¨ª mismos, su enfoque, su juego, su rendimiento, su recuperaci¨®n, todos los d¨ªas. Una y otra vez¡±.

El a?o pasado, Nole anticipaba que seguir¨ªa ¡°pateando traseros¡± a los j¨®venes y los hechos avalan la afirmaci¨®n. Dice que el tenis est¨¢ ¡°en buenas manos¡± y que los jugadores ¡°vienen y van¡±. As¨ª que alg¨²n d¨ªa lo dejar¨¢, pero ese d¨ªa no parece estar demasiado cerca. Al igual que Nadal, ganador de dos majors en 2022, no solo no encuentra motivos para echarse a un lado sino que la obtenci¨®n de m¨¢s y m¨¢s logros, un r¨¦cord tras otro, le invita a seguir estirando el carrete.

¡°Es diferente, porque las rivalidades que tuve eran tan fuertes y s¨®lidas que era muy probable que me enfrentara a Roger [Federer], Rafa [Nadal] o Andy [Murray] en la final de un Slam durante la mayor parte de esos a?os, cuando nos enfrent¨¢bamos en el nivel m¨¢s alto¡±, se refiere a la comparativa entre presente y pasado. ¡°Hoy en d¨ªa, eso es diferente. No me importa jugar contra jugadores diferentes, siempre y cuando gane¡±, bromea. ¡°Pero jugu¨¦ tres partidos ¨¦picos con Alcaraz este a?o, y creo que por eso hay un debate sobre la pr¨®xima rivalidad¡±. En todo caso, ¨¦l sigue ah¨ª. De rabiosa actualidad.

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