Devaluaciones y endeudamiento exterior alientan la econom¨ªa de Israel
La econom¨ªa israelita se encuentra en el tercer a?o de un acelerado c¨ªrculo vicioso entre inflaci¨®n, estancamiento, endeudamiento exterior y devaluaci¨®n, del cual parece que no podr¨¢ librarse a corto plazo. A pesar de ello se puede hablar de una especie de ?milagro econ¨®mico? que no solamente consiste en que Israel, gracias a su laboriosidad y disciplina, logre sobrevivir como ente econ¨®mico sino que adem¨¢s disfruta de una prosperidad que pod¨ªa motivar la envidia de pa¨ªses con mejores posibilidades.
La guerra de Kippur, en el oto?o de 1973, le cost¨® a Israel el equivalente a su producto nacional bruto de aquel a?o. A este hecho, que por s¨ª solo hubiera supuesto un retraso de varios a?os, se le sum¨® la crisis provocada por la subida de los precios del petr¨®leo y la recesi¨®n de los pa¨ªses industrializados, lo que ocasion¨® la disminuci¨®n del comercio exterior. Para mantener su capacidad exportadora, Israel devalu¨® su moneda un 40 por 100 en el a?o 1974, y despu¨¦s, gradualmente, un 25 por 100 m¨¢s. Ello aliment¨® la inflaci¨®n, que en 1974 alcanz¨® un r¨¦cord de un 56 por 100, y que en 1975 todav¨ªa fluctuaba por un 23 por 100.
Otro efecto fue que la deuda p¨²blica se dispar¨®, mientras que elevado crecimiento. real del producto nacional bruto disminu¨ªa en un 10 por 100.
Medidas estabilizadoras
Para estabilizar la situaci¨®n, Israel ha tomado unas medidas que tendr¨¢ que pagar a alto precio en el campo de la pol¨ªtica. Por un lado, el aceptar una masiva ayuda econ¨®mica norteamericana implica una mayor dependencia as¨ª como un estrechamiento de la pol¨ªtica exterior, y por otro, una disminuci¨®n del nivel de vida y de las prestaciones sociales del estado, a lo que hay que a?adir el aumento del paro laboral, de la emigraci¨®n y de las tensiones internas del pa¨ªs.Israel es uno de los pocos pa¨ªses donde la pol¨ªtica econ¨®mica oficial apunta a la ?congelaci¨®n? del producto nacional. La producci¨®n real de mercanc¨ªas y servicios no crecer¨¢ en el a?o 1976, como tampoco lo hizo en el a?o anterior. Con ello se espera disminuir la sangr¨ªa de las importaciones y la necesidad de capital, pero como el gobierno quiere al mismo tiempo aumentar las exportaciones en 11 por 100 tendr¨¢n que reducirse los presupuestos estatales y el consumo privado.
Los consumidores
Lo que m¨¢s ha influido en los consumidores israelitas han sido las reducciones o eliminaci¨®n total de las subvenciones a los art¨ªculos de primera necesidad, ya que ello ha provocado aumentos de un 20 ¨® 25 por 100, y hubieran subido m¨¢s de no haber encontrado la fuerte oposici¨®n de los sindicatos.Para impedir un aumento de la demanda en los productos de consumo se han elevado los impuestos, sin que ello signifique una pol¨ªtica fiscal a corto plazo.
Lo m¨¢s problem¨¢tico son los efectos de las medidas restrictivas en la situaci¨®n del empleo laboral, ya que aunque oficialmente se niegue el desempleo, c¨¢lculos privados sit¨²an la cifra de desempleados entre los 35-40.000 y en unos 200.000 los que no tienen ninguna ocupaci¨®n, todo ello sin contar con el mill¨®n de habitantes de Cisjordania, donde la situaci¨®n econ¨®mica deja mucho que desear.
Uno de los motivos que originan estas discrepancias podr¨ªa residir en que se teme una disminuci¨®n de la inmigraci¨®n en caso de reconocer la existencia de dificultades econ¨®micas.
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