Fraga podr¨ªa participar en la uni¨®n de la derecha
La posibilidad de que Manuel Fraga Iribarne regrese a la pol¨ªtica activa como dirigente de una importante fuerza pol¨ªtica de la derecha -una derecha entendida al modo tradicional en las democracias occidentales- no se descartaba ayer en medios pol¨ªticos habitualmente bien informados, especialmente a partir de la entrevista mantenida por el se?or Fraga con el presidente del Gobierno, en la que ese habr¨ªa sido uno de los temas tratados.
Seg¨²n esta tesis, el se?or Fraga estudia la posibilidad de sumar su activa personalidad a la labor de una serie de asociaciones pol¨ªticas, tales como Uni¨®n del Pueblo Espa?ol, Uni¨®n Nacional Espa?ola, Frente Nacional Espa?ol y ANEPA, en las que figuran hombres como Cruz Mart¨ªnez Esteruelas, Gonzalo Fern¨¢ndez de la Mora y otros dirigentes muy conocidos.Las fuerzas de la derecha est¨¢n haciendo el m¨¢s serio esfuerzo para unirse, de cuantos han intentado en el curso de los ¨²ltimos a?os. Tras un c¨¢lido verano plagado de contactos y entrevistas, las diferentes tendencias de la derecha han alterado sus planteamientos. Los personalismos est¨¢n cediendo, por primera vez -siempre hab¨ªan constituido un poderoso obst¨¢culo a la uni¨®n-, y la idea de un fuerte partido de derechas, con todos los pesos pesados de la misma en la l¨ªnea de salida hacia las elecciones, es acariciada por muchos en estos momentos.
Datos fundamentales para la culminaci¨®n de este proyecto son el total respaldo de los altos mandos militares al proyecto del presidente Su¨¢rez, y la convicci¨®n de que, por primera vez, el Gobierno va a intentar seriamente salir del impasse pol¨ªtico con un plan realizable, que ha sido consultado o comunicado a las m¨¢s importantes fuerzas del pa¨ªs; desde la Falange del se?or Fern¨¢ndez Cuesta al Partido Socialista Obrero Espa?ol, que constituyen, por el momento, los extremos del abanico con posibilidades de aceptaci¨®n por el sistema, cara a las elecciones. Si la consulta electoral llega, y es la primera ocasi¨®n en que esto se vislumbra como seriamente posible, la derecha puede presentarse unida en un solo partido o alianza estrecha de los diferentes sectores de la misma.
Est¨¢s fuerzas est¨¢n preparando un borrador de manifiesto al pa¨ªs. Se propugna, entre otras cosas, una reforma constitucional, a fondo -no se habla de per¨ªodo constituyente-, y contiene postulados como el de la libertad sindical, contrapesados con la libre contrataci¨®n, lo que, en otras palabras, equivale a hablar d¨¦ libre despido. El programa prestar¨¢ gran atenci¨®n a Ias medidas econ¨®micas, en general.
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