El congreso del PSOE puede estar en peligro

A tres semanas de la inauguraci¨®n del Congreso del Partido Socialista Obrero Espa?ol (PSOE), con los preparativos muy avanzados y el compromiso firme de asistencia por parte de varias delegaciones internacionales, han surgido dudas sobre la posibilidad de que dicho congreso pueda celebrarse como estaba previsto.

Aunque las distintas fuentes consultadas ayer por EL PAIS no pudieron definir la existencia de un problema concreto, lo cierto es que el optimismo ha descendido notablemente. Parece que algunos sectores continuistas del sistema habr¨ªan hecho saber sus graves objeciones a que ese congreso tenga lugar, y muy especialmente a que, con motivo del mismo, se produzca en Madrid una concentraci¨®n de l¨ªderes socialistas de diversos pa¨ªses. Cabe recordar que Willy Brandt, Michael Foot, Fran?ois Mitterrand, Mario Soares y otros dirigentes han expresado su deseo de acudir al Congreso del PSOE.Un s¨ªntoma. del nuevo clima que se respira es la prohibici¨®n, por el Gobierno Civil de Madrid, de la reuni¨®n que la agrupaci¨®n socialista madrile?a iba a celebrar, hoy y ma?ana, en el aula magna de la Facultad de Derecho. El portavoz del Gob¨ªerno Civil que facilit¨® la noticia ha justificado la medida en base al incumplimiento de algunos requisitos de la ley de Reuni¨®n; pero, al margen de las cuestiones formales que puedan existir, la prohibici¨®n de la asamblea se considera una sorpresa en medios habitua mente bien informados.

Por otra parte, esta reuni¨®n de la agrupaci¨®n madrile?a no era una m¨¢s, sino que estaba convocada para designar la delegaci¨®n que dicha agrupaci¨®n iba a. enviar al congreso y debatir las posiciones a mantener en el mismo. Dado que es la segunda agrupaci¨®n del partido en n¨²mero de militantes, se otrogaba a la asamblea un valor de pauta para el congreso.

. No obstante, cabe a?adir que la notificaci¨®n a la autoridad gubernativa sobre esta asamblea fue presentada al mismo tiempo que la del congreso. La primera ya ha sido contestada por el Gobierno Civil; sobre la segunda no existe a¨²n respuesta. Pocos creen, todav¨ªa, en un enfrentamiento abierto entre el Gobierno y el PSOE, partido que constituye para aquel, seg¨²n creencia general- una v¨ªa hacia la oposici¨®n menos dif¨ªcil que otras, as¨ª como una cierta cauci¨®n de cara a las fuerza s socialistas y socialdem¨®cratas que gobiernan en varios pa¨ªses europeos. Sin embargo, la prohibici¨®n de la asamblea del PSOE madrile?o parece todo un s¨ªntoma, y hay quien est¨¢ pensando en la posibilidad de tener que desempolvar el viejo proyecto de realizar el congreso en alguna ciudad de Francia, lo cual recuerda la idea del t¨²nel del tiempo.

Manifiesto de los hist¨®ricos

De otra parte, el PSOE hist¨®rico, que recienternente celebr¨® su congreso con la debida autorizaci¨®n -y cuya solicitud de legalizaci¨®n est¨¢ hecha a nombre del PSOE, sin la adici¨®n de la palabra hist¨®rico-, ha distribuido un mensaje alpueblo espa?ol.

En dicho texto hace un resumen de lo ocurrido durante los ¨²ltimos cuarenta a?os, y establece las connotaciones fundamentales del PSOE, como un partido de clase, que considera al marxismo como un instrumento de investigaci¨®n pero no como un sistema, ni siquiera un programa pol¨ªtico-, no confesional, y defensor de una pol¨ªtica que suprima el injusto centralismo administrativo.

Asimismo, se declara tradicionalmente republicano, aunque aceptar¨¢ la voluntad mayoritaria del pueblo respecto a la forma de gobieno; y reconoce que las reformas legales promulgadas despu¨¦s del 20 de noviembre de 1975, ?que tratan de abrir cauces a la democracia, nos alejan de aquel duro paternalismo sin libertad de Cuarenta a?os de ejercicio autoritario del poder?, aunque le parece lento el ritmo de esas reformas; y expresa su prop¨®sito de cooperaci¨®n con todas las fuerzas pol¨ªticas ?inequ¨ªvocamente democr¨¢ticas?.

Y termina diciendo: ?Nos han extendido varias veces certificado de defunci¨®n, pero no estamos muertos. Por eso, espa?oles, los que van a vivir os saludan. ?

Aclaraciones del PSP

En otro orden de cosas, el Partido Socialista Popular ha cre¨ªdo conveniente hacer algunas puntualizaciones en torno a la famosa reuni¨®n de Lisboa entre dirigentes de dicho partido y el PSOE. ?En ning¨²n caso ha manifestado un portavoz- el PSOE ni el PSP descendieron a discutir cuestiones de personas y de organizaci¨®n, llev¨¢ndose a cabo las conversaciones en un clima de m¨¢ximo respeto para asuntos que son propios a cada partido. Las discusiones se mantuvieron en el nivel que exigen los fines del socialismo y el momento por el que atraviesa el pa¨ªs, sin incurrir, como es l¨®gico, en ning¨²n planteamiento personal.?

?Es l¨®gico que, dada la importancia del movimiento socialista para la restauraci¨®n de la democracia en Espa?a y el peso de ambas formaciones, se produzcan toda suerte de comentarios y especulaciones. Sin embargo, es de lamentar que la responsabilidad que se empe?an en mantener tanto el PSOE como el PSP no sea respetada por comentarios que, olvidando la importancia del tema, descienden a cuestiones personales absolutamente imaginadas. Tales desv¨ªos no apartar¨¢n al PSP, como tampoco, estamos seguros, al PSOE, de su norma de trabajar por el bien del socialismo y de la democracia.?

Asimismo reiteran su agradecimiento al secretario general del Partido Socialista Portugu¨¦s -Mario Soares- por la convocatoria, y aclaran que las conversaciones se inscriben en lo aprobado por el III Congreso del PSP, celebrado los d¨ªas 5 y 6 de junio pasado, y por el comit¨¦ ejecutivo del partido de los d¨ªas.25 y 26 de julio, asi como de las cartas enviadas el 7 de septiembre pasado al PSOE y a la FPS por el secretario general del PSP; contactos que fueron alentados por dirigentes de los partidos socialistas europeos en las reuniones de Caracas y del ¨¦xico.