Las esculturas musicales de 'los Baschet"
?Nuestra b¨²squeda -advierten al p¨²blico, Francois y Bernard Baschet- es un regreso a los or¨ªgenes, de un modo casi artesanal. Nos oponemos, en este sentido, al arte ¨²nicamente conceptual. Nuestro problema no es tener ideas, sino realizar las que tenemos.? Con esta escueta carta de presentaci¨®n, los Baschet toman claro partido, en el debatido, y ya menos candente, tema del concepto versus el objeto, inclinando su quehacer del lado de la obra, en la que hacen confluir la manifestaci¨®n artesana de la forma y la b¨²squeda cient¨ªfica del sonido.Artesan¨ªa y arte, sonido y forma, constituyen eI conjunto de esta exposici¨®n en cuyo concierto se conjugan la investigaci¨®n y el juego, hasta procurar las delicias (lo hemos comprobado) del visitante. Sin la depuraci¨®n formal de los artilugios de G¨¹nter Haesse, niel refinamiento de los muebles sonoros de Pol Bury, los Baschet, tal vez, aventajen la experiencia del uno en una mayor afectividad l¨²dica (aqu¨ª, ?se permite tocar?), sobreponi¨¦ndose a los t¨ªmidos timbres del otro este trepidante concierto bascheliano (en que cualquier espectador, si lo desea, pasa a ser int¨¦rprete).
Baschet
Galer¨ªa Juana Mord¨®. Villanueva, 7.
Aunque arribos intervengan en la totalidad de cada obra (ambos iniciaron la b¨²squeda del sonido en 1952), puede afirmarse que Fran?ois, es el escultor (disc¨ªpulo de Auricoste y Yencesse) y el m¨²sico, Bernard (director, durante tres a?os, del grupo investigador de la ORTF). Asociados, de 1955 a 1970, con Jacques e Yvonne Larsy, formaron el conjunto denominado ?Estructuras sonoras Larsy-Baschet?, logrando, con instrumentos experimentales, resultados que atend¨ªan a un principio ac¨²stico, jam¨¢s, hasta entonces, indagado.
Exposici¨®n del todo recomendable, claramente adicta ¨¢ f¨®rmulas de ejemplar adecuaci¨®n. Si el sonido es natural (el discurrir del agua) las formas escult¨®ricas procuran acomodarse a las de la naturaleza, siguiendo leyes del artificio, cuando los efectos sonoros son estrictamente artificiales.
Babelia
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.