El viejo le¨®n
Jos¨¦ Mar¨ªa Gil-Robles es uno de los pol¨ªticos m¨¢s relevantes de la historia espa?ola de este siglo. Desde 1931 a 1936 llev¨® a cabo dos operaciones de gran envergadura pol¨ªtica: reunir toda la derecha espa?ola en una confederaci¨®n y entrar dentro de una Rep¨²blica reformista para hacerla conservadora. Adem¨¢s dejuristay abogado de valor, fue redactor de El Debate y lleg¨® a ser subdirector del mismo peri¨®dico.En 1933, la CEDA, su creaci¨®n pol¨ªtica, anticipo de la democracia cristiana moderna, gan¨® las elecciones. La entrada de su partido en el Gobierno Samper el 4 de octubre de 1934 desencaden¨® la revoluci¨®n de Asturias y la rebeli¨®n de Catalu?a.
En 1935 entr¨® en el Gobiemo Lerroux como ministro de la Guerra. Reorganiz¨® el, Ej¨¦rcito, destruyendo en parte la obra reformista de Aza?a y restableciendo en sus funciones a los militares mon¨¢rquicos. As¨ª, nombr¨® jefe del Estado Mayor al general Franco. Sin embargo, Gil Robles permaneci¨® siempre al margen de la conspiraci¨®n militar que se comenz¨® a preparar en esos a?os.
En las elecciones de 1936, su partido obtuvo s¨®lo ochenta diputados. Su injustificada aureola de jefe fascista le llev¨® a la derrota electoral. Sus intervenciones en el Parlamento contra el Gobierfio del Frente Popular fueron vehementes y dram¨¢ticas, al denunciar la situaci¨®n ca¨®tica del pa¨ªs. Al mismo tiempo, fue separ¨¢ndose cada vez m¨¢s de la extrema derecha y consider¨® siempre una posible guerra civil como una cat¨¢strofe nacional.
Cuando estall¨® el alzamiento nacional el 18 de julio, se ausent¨® de Espa?a. Estuvo desterrado en Portugal diecis¨¦is a?os. Despu¨¦s de la guerra mundial, Gil Robles se adhiri¨® a la Monarqu¨ªa y form¨® parte del consejo privado del con:de de Barcelona. Al regresar a Espa?a, en 1953, reorganiz¨® los grupos de la democracia cristiana, sobre postulados inequivocamente democr¨¢ticos. En 1962 fue nuevamente desterrado, despu¨¦s de asistir a la reuni¨®n de la oposici¨®n en Munich.
Despu¨¦s de la muerte de Franco ha sido partidario de una ruptura negociada. Se ha opuesto siempre a una unificaci¨®n de la democracia cristiana que supusiese la entrada en ella de los antiguos colaboradores del r¨¦gimen de Franco. Tambi¨¦n se ha negado a incorporarse a Coordinaci¨®n Democr¨¢tica y a una posible colaboraci¨®n con los comunistas. Gil Robles se ha convertido hoy en un pol¨ªtico de centro-derecha. Propugna una legislaci¨®n social avanzada -que va mucho m¨¢s all¨¢ que la de la CEDA-, la legalizaci¨®n de todos los partidos pol¨ªticos sin exclusi¨®n, la autonom¨ªa regional y la neutralizaci¨®n pol¨ªtica del Ej¨¦rcito.
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