Inminente publicaci¨®n del fallo del Supremo sobre el PCE
Hoy o quiz¨¢ ma?ana, s¨¢bado, podr¨ªan hacerse p¨²blicas las resoluciones dictadas por la Sala Cuarta del Tribunal Supremo en los expedientes de legalizaci¨®n del Partido Comunista de Espa?a y del Partido Carlista. Seg¨²n fuentes pr¨®ximas al mundo judicial existen crecientes posibilidades de que el Alto Tribunal se declare incompetente para conocer sobre los expedientes de legalizaci¨®n de organizaciones pol¨ªticas que le han sido remitidos por el Gobierno.La citada Sala habr¨ªa entendido que el tema de la legalizaci¨®n de los partidos queda fuera del ¨¢mbito de su competencia y, en consecuencia, devolver¨ªa los expedientes al ¨®rgano de origen, que es el Ministerio de la Gobiernaci¨®n.
Aunque no se conoce la base argumental de la decisi¨®n, se apunta en medios jur¨ªdicos que la Sala Cuarta habr¨ªa podido considerar que la remisi¨®n de los expedientes de ciertos partidos desde el Ministerio de la Gobernaci¨®n al Tribunal Supremo no es un acto administrativo firme y, en consecuencia, no es revisable.En los medios jur¨ªdicos antes aludidos se afirma que si ¨¦sta ha sido la soluci¨®n adoptada en los casos del Partido Comunista de Espa?a y del Partido Carlista, igual resoluci¨®n deber¨¢ adoptarse respecto a los expedientes de los restantes partidos pol¨ªticos, cuya documentaci¨®n ha sido remitida al Tribunal Supremo.
En caso de devoluci¨®n de los expedientes al Gobierno, en medios jur¨ªdicos se ha manifestado a Europa Press que las reacciones posibles del Gobierno podr¨ªan ser de tres tipos:
1. Aceptar la decisi¨®n de? Tribunal Supremo. Mediante decreto-ley retirar la competencia atribuida al alto tribunal en materia de legalizaci¨®n de partidos y asumir el Gobierno dicha competencia. Una vez asumida, pronunciarse el propio Gobierno sobre la legalizaci¨®n del Partido Comunista y de los restantes partidos de cuya ilicitud se presume.
2. No aceptar la decisi¨®n del Tribunal Supremo e insistir en que, es competente y que, por tanto, debe pronunciarse. En este caso se plantear¨ªa el tema del conflicto de jurisdicciones, que deber¨ªa ser elevado a la Jefatura del Estado para que decida qui¨¦n es competente.
3. Dejar el tema sin fallo y permitir que el Partido Comunista concurra a las elecciones con candidatos independientes. Significar¨ªa tambi¨¦n permitir a estos candidatos independientes la celebraci¨®n de actos electorales y m¨ªtines en los que figure el PCE (a pesar de que la normativa electoral proh¨ªbe que los independientes tengan detr¨¢s partidos).
Esta ¨²ltima posibilidad se considera probable, mientras que la segunda, se califica como innecesariamente arriesgada.
La Sala Cuarta fall¨® ayer los expedientes relativos a los partidos pol¨ªticos Organizaci¨®n Revolucionaria de Trabajadores (ORT), Partit Socialista Unificat de Catalunya (PSUC), Movimiento Comunista de Espa?a (MCE) y Partido del Trabajo de Espa?a (PTE). La secci¨®n que ha fallado sobre estos expedientes ha estado presidida por el magistrado m¨¢s antiguo, se?or Medina. Para uno de los partidos cuyo expediente ha sido fallado ayer la composici¨®n de la secci¨®n comprend¨ªa a los magistrados se?ores Vidal, Gordillo, Fern¨¢ndez Tejedor y Jim¨¦nez Hern¨¢ndez. La composici¨®n de la secci¨®n se ha modificado seg¨²n fuera el ponente de cada expediente.
La negativa del placet al se?or Becerril
En la negativa del placet a la designaci¨®n del magistrado se?or Becerril como presidente de la Sala Cuarta del Tribunal Supremo podr¨ªa hallarse el nudo de la divergencia que parece separar actualmente al Gobierno y al Alto Tribunal.
Si el magistrado se?or Becerril hubiera tomado posesi¨®n de la presidencia de la Sala Cuarta, su presencia hubiera inclinado -seg¨²n aseguran medios judiciales- la composici¨®n favorable a la legalizaci¨®n del PCE y de las restantes organizaciones pol¨ªticas pendientes de resoluci¨®n. Se considera a Juan Becerril como una personalidad coincidente con la derecha liberal. El magistrado. tiene una antigua relaci¨®n personal con el conde de Barcelona, aunque haya mantenido siempre, por raz¨®n de sus responsabilidades profesionales, una marcada neutralidad pol¨ªtica. Frente a otros magistrados nombrados en los a?os en que fue ministro de Justicia el se?or Ruiz Jarabo, o durante la etapa de fiscal del se?or Herrero, Tejedor, el se?or Becerril con otros veintitantos magistrados mantuvo u?a posici¨®n muy exigente en el asunto Matesa, y su nombre figur¨® entre los que pidieron el procesamiento de dos ministros en activo.
Antes de la muerte del presidente de la Sala Cuarta, se?or Cordero, se extendi¨® el rumor de que su enfermedad pudiera considerarse como diplom¨¢tica, pues el presidente de la Sala ve¨ªa con preocupaci¨®n el encargo de? Gobierno sobre la legalizaci¨®n de partidos. La muerte del se?or Cordero desmentir¨ªa pat¨¦ticamente el rumor. La posterior enfermedad del presidente en funciones de la Sala, se?or Su¨¢rez Manteola, y la dolencia que impide andar al se?or Becerrill han contribuido a crear dificultades suplementarias en la dif¨ªcil situaci¨®n. La dolencia de! se?or Becerrill no afecta, sin embargo, a su forma f¨ªsica ni intelectual, si se except¨²an esas dificultades de locomoci¨®n, producidas por una ca¨ªda y subsiguiente fractura ¨®sea.
Si el se?or Becerril no es presidente de la Sala Cuarta, ocupar¨¢ la presidencia interinamente el se?or Medina, quien parece poco partidario de la legalizaci¨®n del Partido Comunista, o, en todo caso, adverso a que el Tribunal Supremo entre en la resoluci¨®n de los expedientes relativos a partidos pol¨ªticos.
La posible declaraci¨®n de incompetencia, por parte del Alto Tribunal, podr¨ªa quiz¨¢ tener una buena presentaci¨®n a la opini¨®n p¨²blica. No ha sido, sin embargo, bien acogida la negativa del placet al se?or Becerril, que diversos medios consideran en exceso politizada.
La negaci¨®n del placet se apoya en un defecto de forma (no se ha tramitado ante el presidente del Tribunal Supremo, y el pleno de ¨¦ste no ha sido o¨ªdo). Ello es especialmente discutible, seg¨²n medios jur¨ªdicos, porque existe un procedimiento espec¨ªfico de designaci¨®n para los presidentes de Sala, expreso incluso en la ley de Bases Org¨¢nicas de la Justicia.
El Gobierno prepara sus alternativas
Aunque los motivos para denegar el placet se desconocen oficialmente, parece claro que no nos hallamos ante el traslado de un magistrado, sino ante un acto que se regula por una norma espec¨ªfica. En todos sus aspectos, la negativa del placet al se?or Becerril parece indicar un prop¨®sito de no facilitar un problema tan delicado como el de la legalizaci¨®n del Partido Comunista.
Parece tambi¨¦n claro que el Tribunal Supremo ha recibido con disposici¨®n escasamente favorable el encargo que le transmiti¨® el Gobierno el pasado 22 de febrero. Oficialmente, el Gobierno no tiene conocimiento de la devoluci¨®n del expediente por el Supremo. La declaraci¨®n de incompetencia, por otra parte, deber¨ªa hacerse por medio de un auto, antes del vencimiento del plazo, que expira el pr¨®ximo d¨ªa 13. Medios pr¨®ximos al Alto Tribunal han indicado la dificultad de ¨¦ste por pronunciarse liberalmente en una materia sobre la que el Gobierno anterior, del que tambi¨¦n formaba parte el se?or Su¨¢rez hab¨ªa elaborado una legislaci¨®n restrictiva. Algunos magistrados habr¨ªan comentado, se afirma en fuentes pr¨®ximas al Tribunal, lo contradictorio de esta situaci¨®n.
En todo caso, la eventual declaraci¨®n de incompetencia exigir¨ªa del Gobierno la elecci¨®n de una salida a la situaci¨®n creada. El problema no puede ser congelado ni se puede admitir que una organizaci¨®n vea denegada su legalizaci¨®n sin que una instancia superior juzgue la resoluci¨®n-correspondiente. Por ello, se considera posible que el Gobierno reaccione r¨¢pidamente en caso de inhibici¨®n del Supremo. La designaci¨®n de? se?or Becerril podr¨ªa plantearse, esta vez, sin posibilidad de que se negara razonablemente el placet. Tambi¨¦n podr¨ªa recurrirse a la legalizaci¨®n de los partidos por decreto. La situaci¨®n no favorece obviamente ni al Gobierno, ni al Alto Tribunal. Este ¨²ltimo, ha tenido tradicionalmente una gran fuerza moral en la opini¨®n p¨²blica, y ahora ve su imagen controvertida en un contencioso en que la raz¨®n no parece inclinarse por ninguna de las partes.
Suspendido el homenaje al se?or Becerril
Por otro lado, antes de iniciar sus tareas judiciales, los magistrados del Tribunal Supremo se reunieron ayer para tratar el tema de la contestaci¨®n razonada que debe enviar el Tribunal al Gobierno justificando la negativa de placet a Juan Becerril como presidente de la Sala Cuarta. Seg¨²n la agencia Cifra, el se?or Becerril como presidente de la Sala Cuarta. Seg¨²n la agencia Cifra, el se?or Becerril ha pedido que se suspenda el homenaje que hoy le iban a tributar un grupo de amigos de la Sociedad Matritense de Amigos del Pa¨ªs. Uno de los promotores declar¨® a la citada agencia que el homenaje quedaba suspendido ante los temores del se?or Becerril de una politizaci¨®n del mismo. El homenaje iba a consistir en una comida en un restaurante madrile?o.
Por otra parte, durante. todo el d¨ªa de ayer estuvo reunido el comit¨¦ ejecutivo del Partido Comunista de Espa?a para estudiar la situaci¨®n planteada tras la. decisi¨®n del Tribunal Supremo en torno a la legalizaci¨®n de dicho partido.
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