R¨¤fols Casamada

No es extra?o que ciertos pintores j¨®venes reconozcan en R¨¤fols una v¨ªa similar a la suya, como sucede con Jordi Teixidor (Valencia, 1941). La diferencia generacional se acusa, sin embargo, en la lentitud del proceso que R¨¤fols ha tenido que efectuar hasta llegar a don de ha llegado. Lentitud paralela, claro est¨¢, a la sufrida por el con junto de la vida cultural de nuestro pa¨ªs en el per¨ªodo que va de la posguerra hasta ahora. As¨ª, pues, lo que en los j¨®venes ha sido el paso de una abstracci¨®n a otra, en R¨¤fols ha consistido en un inicio figurativo m¨¢s o menos tradicional para pasar a un pop con inclusi¨®n de collage y por fin a esta muestra actual, en la que casi exclusiva mente deber¨ªamos hablar de pintura. Y de una pintura, valga decirlo, que aunque ha asimilado la actual problem¨¢tica de la especificidad de esta pr¨¢ctica, discurre por unos caminos totalmente personales.Varios son los elementos de este trabajar en la pintura. En primer lugar, el peque?o formato (salvo raras excepciones) lo separa de un f¨¢cil mimetismo a la americana y le confiere un tono intimista y de experimentaci¨®n mucho m¨¢s cercano a las obras de las primeras vanguardias (no en vano el montaje en la galer¨ªa de la serie ?maderas combinadas? recuerda bastante a los montajes constructivistas). En segundo lugar, existe toda una problematizaci¨®n de los medios pict¨®ricos empleados, desde el soporte hasta los pigmentos y la textura. As¨ª, el color empapa totalmente las maderas delgadas, haci¨¦ndose mate, mientras que sobre las telas se esparce muy diluido, como en un boceto.

La utilizaci¨®n del color como elemento constructor proviene directamente de Matisse, a quien admira, tomando de ¨¦l tanto el aspecto sensual como ordenador de lo que el pintor ve (el color como ?condensaci¨®n de sensaciones?). En el terreno del soporte, R¨¤fols ha retomado la combinaci¨®n de varias superficies, procedimiento empleado en las ¨²ltimas obras de Stella, con la diferencia de que aqu¨ª el color no corresponde exactamente a los l¨ªmites del formato, sino que contin¨²a en la madera de detr¨¢s, o a la inversa. Por otro lado, no se trata jam¨¢s de una tinta plana ni de una textura pastosa que siga un ritmo gestual: se trata de un campo de color en el que las gamas pueden fusionarse y en el que el spray se utiliza para producir una mayor ambiz¨¹edad en las zonas.