La polic¨ªa espa?ola colabor¨® con la francesa y la suiza

Seg¨²n la polic¨ªa suiza, que colabor¨® con la francesa y con la espa?ola para detener a los supuestos secuestradores del director de Fiat-France, Luchino Revelli-Beaumont, se tratar¨ªa de ?simples truhanes?. El antiguo embajador de Francia Robert Cambon, que fue el intermediario entre la familia y el comando, inculpado actualmente por haber ocultado a las autoridades policiales sus contactos con los secuestradores, ?no hay que excluir alg¨²n lazo pol¨ªtico?.Fue la polic¨ªa de Ginebra quien, despu¨¦s de haber comprobado que ?ciertas personas? hab¨ªan permanecido en la capital suiza entre el 8 y el 11 de julio, decidi¨® forzar las cajas fuertes de tres bancos suizos, en dos de los cuales se encontraron 1.600.000 d¨®lares de los dos millones que hab¨ªan recibido por liberar al dirigente de Fiat; en el tercer banco encontraron pasaportes y tarjetas de identidad falsos, las fotograf¨ªas de los pasaportes fueron ? reconocidas por varias personas?.

Los siete detenidos en Espa?a y el que, el domingo pasado, fue capturado por la polic¨ªa parisiense son todos argentinos, excepto un que es italiano. Las autoridades francesas pidieron inmediatamente a las espa?olas su extradici¨®n y en algunos medios informativos pr¨®ximos al Gobierno se asoci¨® inmediatamente ¨¦sta y se record¨® que est¨¢ pendiente la petici¨®n que recientemennte formul¨® el Gobierno de Madrid, pidiendo la extradici¨®n de Miguel Angel Apalategui, el militante vasco llamado Apala, que est¨¢ preso en la c¨¢rcel de las Baumettes (Marsella).

Ayer, a ¨²ltima hora, fuentes competentes dijeron pod¨ªa afirmarse que el jefe del comando que secuestr¨® al se?or Revelli-Beaumont era un argentino de cincuenta a?os, antiguo militante peronista que hab¨ªa participado, hace algunos a?os, en varios atracos. Seg¨²n las mismas fuentes, la polic¨ªa conoce perfectamente su identidad, pero, por razones de eficacia, con vistas a su captura, no ha querido hacerla p¨²blica. El viernes inmediato, el Tribunal de Acusaci¨®n de Par¨ªs debe pronunciarse sobre la libertad de H¨¦ctor Aristy, el antiguo pol¨ªtico dominicano que en la primera fase del secuestro intervino como mediador. Su liberaci¨®n eventual lo lavar¨ªa de todas las sospechas que, hasta la fecha, pesan sobre ¨¦l. El ministro franc¨¦s del Interior, Christian Bonnet, tras lo que la polic¨ªa considera como el desenlace del affaire, se felicit¨® de la ?actitud firme que ha adoptado el Gobierno desde el principio, dando una vez m¨¢s prueba de su eficacia?. No pocos especialistas se interrogaban ayer sobre la clase de errores que han podido cometer los secuestradores para, despu¨¦s de haber jugado con la polic¨ªa durante m¨¢s de dos meses, dejarse cazar como corderitos. Tambi¨¦n se preguntaban por la clase de escuchas telef¨®nicas que han permitido interceptar las conversaciones, entre Espa?a y Suiza, de los supuestos secuestradores.