Nueva normativa para la adquisici¨®n de viviendas sociales
Mayor libertad en la elecci¨®n, agilidad en la tramitaci¨®n de los pr¨¦stamos y criterios m¨¢s realistas en las adjudicaciones, son los principios del decreto sobre acceso a la propiedad de viviendas sociales, publicado ayer en el BOE.
Frente a las complejidades de la normativa vigente hasta ahora, la nueva legislaci¨®n pretende facilitar al adquiriente las operaciones por las que, una vez obtenida la calificaci¨®n subjetiva de beneficiario, puede acceder a la propiedad real de una vivienda. La normativa establece unos l¨ªmites para la adscripci¨®n a los beneficios, siempre que se acuda al mercado libre -una de las innovaciones del texto-, en lo que a precio por metro cuadrado y superficie de la vivienda se refiere. El citado precio m¨¢ximo -se?ala el decreto- ser¨¢ revisado trimestralmente, mediante aplicaci¨®n de la f¨®rmula polin¨®mica prevista en la anterior normativa.Hasta ahora, el beneficiario s¨®lo pod¨ªa optar a la propiedad de aquellas viviendas construidas con el calificativo de sociales. En adelante, ser¨¢ posible acceder a la propiedad de una vivienda situada dentro de los l¨ªmites definidos en cada caso, mediante un pr¨¦stamo del 85% del valor final de la vivienda, que podr¨¢ ser solicitado en cajas de ahorro y entidades de banca privada. Estos pr¨¦stamos ser¨¢n, en ambos casos, computables en el coeficiente de inversi¨®n obligatoria o de regulaci¨®n especial para la adquisici¨®n de viviendas sociales. Los plazos para amortizar el cr¨¦dito, as¨ª como la restituci¨®n de la garant¨ªa hipotecaria constituida a su favor por el Instituto Nacional de la Vivienda, no podr¨¢n exceder en su conjunto de los veinte a?os. El apoyo financiero del INV consistir¨¢ en el abono, en nombre del titular, del 26% de cada una de las cuotas de amortizaci¨®n e intereses que haya de satisfacer el beneficiario a la ent¨ªdad financiera que la haya otorgado el cr¨¦dito.
Respuesta de los constructores y promotores
La nueva regulaci¨®n administrativa de las viviendas sociales se espera contribuya a animar a los constructores y promotores a cubrir parte de los objetivos del plan nacional, previsto en principio para dotar de 450.000 viviendas a las clases m¨¢s necesitadas.Hasta el momento, los promotores apenas hab¨ªan secundado los planes de la Administraci¨®n, por estimar que la normativa era absurda y no se ajustaba a la realidad. En las nuevas disposiciones, parece que el Ministerio de Obras P¨²blicas y Urbanismo -que ha absorbido competencias del anterior Departamento de Vivienda- ha consultado ampliamente a los promotores, hasta el punto de que ¨¦stos se han hecho un poco la norma a la medida, con el fin de poder acercarse a los objetivos. La realizaci¨®n de parte del programa previsto de viviendas sociales puede servir tambi¨¦n para paliar el grave ¨ªndice de desempleo que aqueja al sector construcci¨®n, especialmente en aquellas zonas espa?olas en las que es m¨¢s agobiante el paro en otros sectores.
Los promotores y constructores, no obstante, siguen insistiendo en la necesidad de emprender una aut¨¦ntica pol¨ªtica de suelo, ante la escasez de solares y la tremenda repercusi¨®n que, sobre el precio final de la vivienda tiene el del suelo. Por otra parte, terminar con la especulaci¨®n fue, durante la pasada campa?a electoral, decidido prop¨®sito de todos los grupos y partidos pol¨ªticos, sin excepci¨®n. El actual Gobierno defin¨ªa, asimismo, entre sus objetivos inmediatos, la remisi¨®n al Congreso de un proyecto de ley del Suelo, que frenara la especulaci¨®n.
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