Al Madrid le cost¨® mucho marcar

Jug¨® mal el Madrid hasta que lleg¨® el primer gol, en el minuto noveno del segundo tiempo. El Burgos, muy cerrado, con marcaje firme ya desde la l¨ªnea media, maniat¨® al Madrid y puso de nuevo de manifiesto que el equipo de Molowny juega con dificultad en su propio campo. Una genialidad de Juanit¨® abri¨® el camino del triunfo. Luego no la necesidad del Burgos de abrirse facilit¨® las cosas al Madrid, que jug¨® ya con soltura y rapidez y mejor¨® justamente el marcador.Fue muy pobre el juego del Madrid hasta que lleg¨® el primer gol. El Burgos, muy cerrado, con el habitual centrocampista Kresic clavado entre los defensa y sin desplegar apenas hombres en los contraataques, qortaba con cierta facilidad las iniciativas de ataque del Madrid.Aunque el tono medio individual de los de Molowny no era malo, tampoco era excesivamente bueno, y las acciones de conjunto resultaban inon¨®tonas, sin chispa e ineficaces. Navarro II ve¨ªa tranquilo c¨®mo pasaban los minutos sin tener necesidad de intervenciones de compromiso; su trabajo se re duc¨ªa casi exclusivamente a cazar centros altos, cosa que hac¨ªa con seguridad. Entretanto, los ata ques del Burgos apenas si existieron. Cuando el Burgos sub¨ªa lo hac¨ªa con muy pocos hombres, por temor a ser pillado al contra pie. A pesar de ello, un cabezazo de Cos forz¨® a Garc¨ªa Rem¨®n a una excelente parada.

Iban nueve minutos de la segunda mitad cuando un magn¨ªfico pase profundo de del Bosque aJuanito fue convertido en gol por ¨¦ste. Gol de gran m¨¦rito, por lo dif¨ªcil de su ejecuci¨®n -Juanito control¨® el bal¨®n a la carrera y aguant¨® con facilidad la entrada de dos defensas en el ¨¢rea- y por su utilidad. Al quedar por detr¨¢s en el marcador, al Burgos no le qued¨® m¨¢s remedio que ceder un poco en la defensa para explorar las posibilidades de empate, y eso le permiti¨® al Madrid jugar conm¨¢s desahogo. Del Bosque se march¨® para que Jensen se retrasara a la media y entrara Roberto en el ataque, y el juego del Madrid gan¨® en rapidez. El partido, que hasta entonces hab¨ªa sido lento, feo y aburrido-, gan¨® en vistosidad y rapidez. El Burgos dej¨® ver una alarmante falta de condici¨®n fisica,'y al tiempo que sus ataques resultaban ineficaces abr¨ªa huecos. atr¨¢s. As¨ª llegaronlos dos nuevos goles madridistas, marcados por Santillana -al que previamente le fue anulado otro- y Guerini, que sali¨® siete minutos antes del final y fue saludado con simpat¨ªa por el p¨²bli~ co. Mejor¨®, pues, el Madrid su victoria, pero lo cierto es que la principal conclusi¨®n del encuentro es que al Madrid le falta soltura parajugar en su propio campo. Claro, que ese mal es general.