Una historia de truchas
Hace unos d¨ªas compr¨¦ en el mercado madrile?o de San Pascual unas truchas que, cuando llegu¨¦ a casa, comprob¨¦ se encontraban en mal estado. Volv¨ª con ellas al puesto donde me las hab¨ªan vendido, y no s¨®lo no me fueron entregadas otras, ni devuelto el dinero que me hab¨ªan costado, sino que, adem¨¢s, tuve que escuchar lo que le vino a bien decirme a quien me las hab¨ªa vendido.Fui a la oficina que existe en todos los mercados y all¨ª no me solucionaron nada, ya que no hab¨ªa ning¨²n veterinario que pudiera confirmar que las truchas no estaban en buenas condiciones.
Cog¨ª las truchas y me fui a la Direcci¨®n General de Sanidad, donde me dijeron que, efectivamente, no estaban en buenas condiciones, pero que como no pod¨ªa demostrar que las hab¨ªa comprado en un puesto determinado, lo ¨²nico que pod¨ªan hacer era llevar a cabo una inspecci¨®n, pero ninguna otra cosa.
Despu¨¦s de lo anteriormente expuesto, yo me pregunto si, de no cambiar esto en alguna forma, vamos a tener que ir al mercado con un notario que levante acta.
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