Los parlamentarios vascos han dado su visto bueno a lo negociado con Clavero

El decreto-ley de R¨¦gimen Preauton¨®mico para Euskadi tiene desde ayer el consenso de los doce parlamentarios que forman el pleno del comit¨¦ negociador. Tras el acuerdo al que hab¨ªan llegado el viernes el ministro Clavero Ar¨¦valo y los tres diputados que han llevado a cabo las negociaciones, faltaba tan s¨®lo este visto bueno que vincula a todas las fuerzas pol¨ªticas vascas con representaci¨®n parlamentaria, desde Alianza Popular hasta Euskadiko Ezkerra. Y ese visto bueno se consigui¨® a lo largo del d¨ªa de ayer.

Despu¨¦s de este importante tr¨¢mite, el tema queda ya visto para sentencia. La pr¨®xima semana se celebrar¨¢ la octava y ¨²ltima entrevista con Clavero Ar¨¦valo para las correcciones de estilo y para redactar de forma definitiva el decreto complementario que fija plazos de diez d¨ªas para que se constituya el consejo general, y quince m¨¢s para las comisiones mixtas. Despu¨¦s de esta entrevista, el proyecto queda ya en manos del Consejo de Ministros, cuya aprobaci¨®n se espera para el presente mes.

Cuestiones sin resolver

Elaborado ya el decreto-ley, quedan ahora otras cuestiones de indudable importancia que corresponde resolver a los partidos. Dos de ellas (la bandera y la capitalidad) no van a plantear demasiados problemas. En el primer caso, porque la ikurri?a es aceptada por todos, y en el segundo, porque, de momento, se va a soslayar el asunto hasta que se decida sobre la incorporaci¨®n de Navarra. La capitalidad vasca de Pamplona es defendida por casi todos los partidos y en esta primera fase de la preautonom¨ªa, el consejo general carecer¨¢ de capital y deber¨¢ reunirse en Vitoria, San Sebasti¨¢n y Bilbao, de forma rotatoria.Las dificultades empiezan a surgir cuando se plantea si el actual Gobierno vasco debe transmitir sus poderes al consejo general. El PSOE ser¨ªa partidario de que fuera as¨ª y de que Leizaola fuese elegido presidente del consejo general. De esta manera se evita la posible duplicidad institucional y se pone al frente del consejo a un hombre que est¨¢ en cierto modo por encima de los partidos.

El propio Leizaola no tiene inter¨¦s, sin embargo, en asumir nuevas responsabilidades, y se escuda para ello en razones de edad (82 a?os). Algunos sectores del PNV se oponen, por otra parte, a que desaparezca el Gobierno vasco antes de que sea elegido un nuevo Gobierno al amparo de un estatuto de autonom¨ªa. A juicio de este sector, la bandera de la autonom¨ªa es la que ha mantenido el Gobierno durante cuarenta a?os y todav¨ªa es algo que no se ha conseguido.

Esta opini¨®n era sustentada por el representante del PNV en el Gobierno vasco, si bien manifestaba a continuaci¨®n que el tema no ha sido estudiado a fondo y que, probablemente, se tratar¨¢ esta semana. La permanencia del Gobierno vasco implicar¨ªa la no designaci¨®n de Leizaola para la presidencia del consejo general.

Este tema queda en ¨²ltima instancia pendiente de los acuerdos a que lleguen en los pr¨®ximos d¨ªas PNV y PSOE, las dos fuerzas mayoritarias del Pa¨ªs Vasco y las que sustentan tambi¨¦n al Gobierno Vasco. De este acuerdo depender¨¢ tambi¨¦n la composici¨®n del futuro consejo general, que en principio tendr¨ªa cinco representantes del PNV, otros cinco del PSOE, tres de UCD, un independiente y otro de Euskadiko Ezkerra. Alguno de los partidos en liza ha avanzado esta composici¨®n probable.