"El Gobierno est¨¢ realizando una pol¨ªtica claramente socialista"

Jos¨¦ Antonio Segurado, empresario, vocal del Comit¨¦ Ejecutivo de la patronal CEOE, es en la actualidad presidente de la Agrupaci¨®n Empresarial Independiente de Madrid. Como presidente de la patronal madrile?a, sus opiniones reflejan las inquietudes de una buena parte del empresariado espa?ol. se entrevist¨® con ¨¦l.

EL PA?S: ?C¨®mo ve el momento, econ¨®mico espa?ol?Jos¨¦ Antonio Segurado: Lo juzgo muy grave. Estamos ante una situaci¨®n de crisis profunda y regidos por un Gobierno que, a pesar de haber sido elegido por los votos de los moderados, est¨¢ realizando una pol¨ªtica claramente socialista. La situaci¨®n econ¨®mica es, telegr¨¢ficamente, la siguiente: una inflaci¨®n importante, un paro creciente, una pol¨ªtica monetaria estricta, un intervencionismo econ¨®mico agobiante, aunque se declare lo contrario, unos ¨ªndices de productividad incre¨ªblemente bajos y, encima, se ha elegido este momento para introducir una reforma fiscal que, si es absolutamente necesaria, en algunos de sus planteamientos puede generar lo que el presidente del Consejo General de la Abogac¨ªa ha denominado ?terrorismo de Estado?.

El PA?S. ?Cu¨¢l es el principal responsable de esta situaci¨®n?

J.S.A.: Sin duda, el Gobierno, ya que le ha faltado la decisi¨®n de llevar a las Cortes su propio programa econ¨®mico y correr el riesgo de ser derrotado, que eso es una democracia. En lugar de ello ha pactado de forma tal que los que realmente gobiernan son los partidos marxistas y, fundamentalmente, el PSOE, que, estoy seguro, no hubiera conseguido, en la misma proporci¨®n de votos y diputados que hoy tiene UCD, introducir leyes de contenido socialista tan avanzado como se han promulgado con este Gobierno.

EL PA?S: ?No es usted muy pesimista?

J.S.A.: Veo que estamos recorriendo una trayectoria casi irreversible, pero me esfuerzo d¨ªa a d¨ªa en tratar de superar esta situaci¨®n cr¨ªtica. Creo que si adopt¨¢ramos la posici¨®n mental de que Espa?a es la suma de todos sus hombres y que cada uno hiciera un esfuerzo excepcional, podr¨ªamos salir de la actual situaci¨®n. Pero para ello necesitamos ser gobernados de forma consciente y con una pol¨ªtica conocida a medio y largo plazo, no con decisiones que muchos nos preguntamos si se toman pensando en el futuro del pa¨ªs o, simplemente, para conservar unos puestos de poder que, por otra parte, no se ejercitan plenamente.

La angustia diaria en que vivimos la mayor parte de los empresarios espa?oles es tremenda. Vemos peligrar la continuidad de nuestras empresas y observamos la enorme responsabilidad que tenemos ante accionistas, directivos y trabajadores que colaboran en el desarrollo de las mismas y que ven sus ahorros perdidos, sus planes fracasados, sus puestos de trabajo en peligro.

Esto no es catastrofismo. Es, simplemente, la realidad concreta, y el que afirme que no es as¨ª es que desconoce la Espa?a real que en estos momentos se debate, a nivel empresarial, en esos problemas que nadie que no sea empresario comprende, como es el de no poder pagar la n¨®mina, el no poder hacer frente a las facturas de los acreedores, el operar al 60% de la capacidad y, en definitiva, en que fracase lo que todos nosotros consideramos fundamental: la empresa como c¨¦lula vital de nuestro desarrollo.

EL PA?S: Pasemos a aspectos concretos. ?C¨®mo ve el momento crediticio?

J.S.A.: Las previsiones de crecimiento del cr¨¦dito al sector privado para este a?o que acaba de empezar es muy restrictiva. Pienso que se podr¨ªa suavizar si el sector p¨²blico restringe de verdad su gasto. Adem¨¢s, entiendo que la pol¨ªtica monetaria no debe ser eI principal instrumento del programa de saneamiento.

EL PA?S: ?Y la reforma fiscal?

J.S.A.: Como dec¨ªa, es necesaria, pero se han ignorado aspectos muy importantes, por ejemplo, en relaci¨®n a las empresas familiares y sus patrimonios. Adem¨¢s, los empresarios no hemos participado para nada en su elaboraci¨®n t¨¦cnica.

EL PA?S: ?Cu¨¢l es el panorama laboral?

J.S.A.: Se echan de menos unas aut¨¦nticas reglas de juego, que reconozca de verdad la econom¨ªa de mercado. Yo soy un empresario libre y deseo la libertad en todos los ¨®rdenes. Adem¨¢s, deseo un Estado ¨¢rbitro, pero no un Estado empresario, que siempre es ineficaz.