La familia de "Pertur" acusa a ETA de su desaparicion
Las investigaciones llevadas a cabo por las familias de Eduardo Moreno Bergareche, Pertur, para aclarar la desaparici¨®n de ¨¦ste el 23 de julio de 1976 apuntan a que los presuntos sospechosos de la misma son ?ciertos elementos de la organizaci¨®n a la que ¨¦l pertenec¨ªa, concretamente, a algunos elementos de los comandos Beretziah de ETA?, seg¨²n han manifestado la madre, una t¨ªa y un hermano del desaparecido.
?Hacemos ahora estas manifestaciones -declararon- por dos razones: la primera, porque hasta ahora no hab¨ªamos terminado las gestiones; la segunda, porque, hoy en d¨ªa, son infinitos los rumores que circulan, infinitas, asimismo, las solicitudes que hemos recibido de dar cuenta de las gestiones realizadas.?Son varios los indicios que llevan a la familia a la afirmaci¨®n de que la desaparici¨®n de Pertur, a ra¨ªz de una misteriosa entrevista para la que, en la fecha citada, se traslad¨® de su domicilio en San Juan de Luz al puesto fronterizo de Behobia, se pueda deber a los elementos arriba apuntados. As¨ª, por ejemplo, el secuestro que sufri¨® Pertur por parte de algunos elementos de los comandos beretziah a finales de mayo de 1976 y que ha podido ser comprobado. Secuestro que, seg¨²n ha sabido su familia, fue llevado a cabo ?por medidas disciplinarias?.
Asimismo, la familia ha logrado identificar a las dos personas que fueron los ¨²ltimos acompa?antes conocidos de Pertur, perteneciendo ¨¦stos a la tendencia apuntada. Respecto a ambos ¨²ltimos testigos es de subrayar que, si bien con uno de ellos ha podido entablar contacto la familia, el otro, a pesar de las solicitudes, les ha resultado totalmente inaccesible.
Un tercer indicio lo constituye una carta que el propio Eduardo Moreno Bergareche, Pertur, escribi¨® doce d¨ªas antes de su desaparici¨®n, concretamente el 11 de julio de 1976. En ella, entre otras afirmaciones de sentido similar, Pertur escrib¨ªa lo siguiente: ?Esos bestias han creado un clima tal en la organizaci¨®n que han transformado ETA en Euskadi Norte, no en un colectivo de revolucionarios, sino en un Estado polic¨ªa, donde cada uno sospecha del vecino y ¨¦ste del otro.? Otro p¨¢rrafo de la misma carta, citado textualmente, dec¨ªa: ?No logro zafarme de esa din¨¢mica infernal de las conspiraciones, del infundio, de la mentira, etc¨¦tera; de esa din¨¢mica que tiende a eliminar rivales pol¨ªticos, no por medio del debate pol¨ªtico, sino a trav¨¦s de sucias maniobras en nombre de la "disciplina", de la "seguridad", etc¨¦tera, valores ¨¦stos que nunca pueden anteponerse al debate y a los criterios pol¨ªticos.?
La familia sabe m¨¢s
?Adem¨¢s de estos indicios, existen otros -manifestaron los familiares- que no nos parece conveniente hacerlos p¨²blicos en este momento.?
De todas formas, todos ellos, completados y con nombres incluidos, han sido puestos recientemente a disposici¨®n de la polic¨ªa judicial de Bayona y el sumario que, antes, por falta de resultados positivos, hab¨ªa sido cerrado en diciembre de 1977, ha sido vuelto a abrir.
Preguntada la familia sobre qu¨¦ pensaba de las reivindicaciones en su d¨ªa realizadas por grupos de extrema derecha tales como la AAA, AT, ATE, Batall¨®n Vasco-Espa?ol, Comando Emilio Guesala, manifest¨® que la familia no da cr¨¦ditos a los comunicados mientras no aparezca el cad¨¢ver.
Por lo dem¨¢s, a?o y medio m¨¢s tarde de la desaparici¨®n, la familia da ya por muerto a Eduardo Moreno Bergareche.
?Queremos que el pa¨ªs sepa los hechos en la medida en que hemos podido descubrirlos y aclararlos por nuestra parte. No damos nombres de personas, pero los hechos deben saberse?, declararon.
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