"M¨¢s de la mitad de los detenidos por la polic¨ªa salen en libertad a las pocas horas"

M¨¢s del 507% de las personas detenidas por miembros de la primera Brigada Regional de Investigaci¨®n, durante los seis ¨²ltimos meses del pasado a?o, y puestas a disposici¨®n de la autoridad judicial ordinaria, obtuvieron su libertad en el plazo de unas horas.La estad¨ªstica, obtenida con datos facilitados por la Jefatura Superior de Polic¨ªa, coincide con una serie de noticias, hechas p¨²blicas durante estos meses, sobre las reiteradas detenciones de presuntos delincuentes que, tras su puesta en libertad, son buscados y detenidos por la polic¨ªa como posibles autores de nuevos delitos.

Desde el 1 de julio hasta el 20 de diciembre del a?o pasado, 4.000 diligencias de detenci¨®n fueron instruidas en las comisarlas madrile?as y los distintos grupos de la primera Brigada de Investigaci¨®n. A pesar del este n¨²mero, u?a gran parte de los detenidos que pasaron a los distintos tribunales o a disposici¨®n de la Jefatura Superior de Polic¨ªa fueron puestos en libertad en el plazo de varias horas.Seg¨²n un informe elaborado por la primera brigada policial y enviado a las autoridades de la Direcci¨®n General de Seguridad, 6 10 personas fueron detenidas en esos meses por parte de la citada brigada. De ellas, 445 fueron puestas a disposici¨®n de los tribunales ordinarios que, tras la vista del caso, ordenaron la puesta en libertad inmediata de 229 personas, lo que supone m¨¢s del 51% de los presentados, aparte de los 88 que saldr¨ªan de la prisi¨®n d¨ªas despu¨¦s.

El resto, 165 personas, fueron puestas a disposici¨®n del Tribunal de Peligrosidad y Rehabilitaci¨®n Social, el cual orden¨® que veintid¨®s de los inculpados fueran dejados libres.

?Hay que modificar la legislaci¨®n actual. Ese es el problema, porque aunque tengo plena confianza en los jueces, ellos no tienen m¨¢s remedio que adaptarse a lo que manda la ley?, manifest¨® Francisco Pastor, jefe superior de Polic¨ªa en el curso de una entrevista concedida a EL PAIS. ?Nos enfrentamos a una lucha constante con bandas juveniles. En la mayor¨ªa de los casos, quiz¨¢ porque la ley lo determine, el menor se entrega al padre. Esto me parece bien siempre que sea un asunto de poca trascendencia, pero es una medida inadecuada cuando implica peligrosidad. Cogemos a los delincuentes que, en muchos casos, han asaltado comercios, han lesionado a personas o se han dedicado a una especialidad delictiva determinada, una, otra y otra vez.?

El se?or Pastor saca carpetas de su mesa de despacho. ?Mire usted, adem¨¢s de los detenidos que ya le he dicho, est¨¢n los de la Guardia Civil, que siguen la misma suerte. Santiago S¨¢nchez Guaza fue detenido por robo el pasado 13 de, diciembre, el d¨ªa 16 le dejaban en libertad por orden del juez; el d¨ªa 23 le volv¨ªan a detener por diversos atracos; el 26 estaba libre; el 14 de enero pasaba a disposici¨®n del juez por atracos y robo; el d¨ªa 16 volv¨ªa a estar en la calle. ?Qu¨¦ es lo que podemos hacer nosotros sino detenerle infinitas veces??

Como el caso se?alado, existen muchos en las carpetas policiales. En las ¨²ltimas semanas varios j¨®venes ya conocidos, como Ricardo Barroso, de diecisiete a?os, detenido seis veces y acusado de robos con intimidaci¨®n en garajes y gasolineras; J. J. L. M., de catorce a?os, detenido veinte veces por robo, los miembros de la banda de el Jaro, joven de quince a?os, especializada en tirones de bolsos en los barrios de Saconia, Pe?agrande y del Pilar, que ahora parecen haberse trasladado a M¨¢laga, donde tambi¨¦n han sido detenidos; Pedro Garc¨ªa, el Bola, de veinte a?os, detenido cuatro veces en 49 d¨ªas, y otros muchos, han protagonizado repetidas veces las columnas de sucesos.

? La ley de Peligrosidad y Rehabilitaci¨®n Social debe ser modificada. La antig¨¹edad que tiene ha hecho que quede sin acoplamiento en la actualidad. Junto con la revisi¨®n de las leyes se deben cambiar las medidas de seguridad e incluso los establecimientos penitenciarios. Una vez variada la ley, si ¨¦sta se aplica efectivamente, nosotros no necesitamos m¨¢s. ?El se?or Pastor coment¨® asimismo la pol¨ªtica que se segu¨ªa con los menores que eran detenidos, ?que indica la necesidad de esta revisi¨®n de las leyes, ya que en muchos casos son peligros¨ªsimos, y lo mismo disparan contra -un funcionario que asaltan varios comercios en unas horas. Otro de los puntos que demuestra la situaci¨®n en que estamos es que si a una persona la ponen a mi disposici¨®n por un delito menor, ?sabe cu¨¢nto le puedo poner de multa m¨¢xima? Quinientas pesetas; ya me dir¨¢ si con este sistema vamos a arreglar algo?.