La CEE aprueba un marco para las exportaciones sider¨²rgicas espa?olas

Los ministros de Asuntos Exteriores de la CEE, reunidos ayer en la capital del Gran Ducado de Luxemburgo, concretaron la oferta comunitaria para un acuerdo sider¨²rgico con Espa?a.

Las condiciones son id¨¦nticas a las de Jap¨®n, pero mejores que las firmadas hace unas semanas con los pa¨ªses de la EFTA (zona europea de libre cambio). La CEE propone a Madrid negociar una oferta que se caracteriza por un margen de penetraci¨®n, por debajo del precio base CEE, del orden del 4 al 6 %, seg¨²n productos. Limitando la reducci¨®n de precios al mismo nivel de exportaciones que Espa?a efectu¨® a la CEE en 1976 (alrededor de un mill¨®n de toneladas), pero reducido del 10 %, en cantidad, consecuencia de la restricci¨®n del mercado sider¨²rgico comunitario y mundial estos ¨²ltimos a?os.Etienne Davignon, comisario europeo responsable de la pol¨ªtica industrial y creador del plan anticrisis sider¨²rgico de la CEE, anunci¨® que espera negociar esta misma semana con los representantes espa?oles.

Los comunitarios destacan que la oferta a Espa?a es mejor que la de los pa¨ªses EFTA (s¨®lo el 3 % de margen de penetraci¨®n) por considerar a Espa?a ?como a un futuro pa¨ªs miembro, al que debe ayudarse en su plan de reestructuraci¨®n sider¨²rgica.?, seg¨²n declar¨® un funcionario.

Aunque la ventaja de reducci¨®n de precios es an¨¢loga a la de Jap¨®n, su efecto ser¨¢ m¨¢s beneficioso para Espa?a, teniendo en cuenta las diferencias de distancia geogr¨¢fica para el acceso al mercado comunitario de los aceros made in spain, en comparaci¨®n con los aceros japoneses.

Los comunitarios piensan que la oferta deber¨ªa ser aceptable para Espana, aunque la petici¨®n de Madrid era de un margen de penetraci¨®n m¨ªnimo del 8 %.

En un orden m¨¢s general se aprobaron propuestas tambi¨¦n para Africa del Sur y Checoslovaquia.

Se acord¨® suspender a las encuestas anti-dumping si los pa¨ªses afectados respetan las normas de precios base impuestos por la CEE.

La ausencia de funcionarios espa?oles, en calidad de observadores, de la misi¨®n de Espa?a acreditada ante la CEE, por los pasillos del centro europeo de Kirchberg, en Luxemburgo, impide, por el momento, contar con indicaciones de cu¨¢l ser¨¢ la reacci¨®n espa?ola a la oferta comunitaria. Ausencia que, probablemente, se justifique por la plena reestructuraci¨®n en que, dicen, se encuentra dicha embajada, despu¨¦s de la constituci¨®n del Ministerio para Asuntos Europeos que, poco a poco, organiza su plantilla. Esperemos que, incluso, sea pronto operacional. Discursos aparte.