Desconcierto entre los ministros ante su posible sustituci¨®n

Ayer tarde volvieron a reunirse con el presidente de la Generalidad los cinco ministros sin cartera, representantes de otras tantas opciones pol¨ªticas. Al mismo tiempo se proced¨ªa a la convocatoria de una reuni¨®n del Gabinete para la ma?ana de hoy. Exist¨ªan serias dudas sobre si Tarradellas efectuar¨¢ la remodelaci¨®n de su Gobierno de inmediato o bien dejar¨¢ pasar algunos d¨ªas.

Uno de los ministros sin cartera afirm¨®, totalmente desconcertado, a EL PAIS: ?Tengo la sospecha de que Tarradellas a¨²n no nos ha informado de lo que desea exactamente. Es posible que todo sean cortinas de humo que escondan una pretensi¨®n que, por el momento, sea ?nicamente conocida por el propio Tarradellas.? La fuente atribu¨ªa tambi¨¦n el valor de mera cortina de humo a la nonnata mediaci¨®n de Tarradellas en el problema vasco.Existe ahora plena confirmaci¨®n p¨²blica de la certeza de lo avanzado ayer en estas p¨¢ginas, en el sentido de que los partidos pol¨ªticos se mostraron, en la reuni¨®n del pasado s¨¢bado, plenamente conformes con que Tarradellas remodele el Gabinete con personas de su confianza. Pero ello no indica que, necesariamente, Tarradellas proceda ahora mismo a la remodelaci¨®n.

Hay que repetir, una vez m¨¢s, que el actual comp¨¢s de espera, cuya caracter¨ªstica principal es la total inoperancia de la Generalidad, beneficia a Tarradellas y, en cambio, perjudica a los partidos pol¨ªticos parlamentarios. Por ello, unas semanas m¨¢s de deteriorizaci¨®n pueden perfectamente ser consideradas procedentes por parte de Tarradellas. Lo criticable del caso reside en que el proceso de deterioro no queda limitado a los partidos, sino que afecta a Catalu?a en su conjunto y a la imagen -ahora muy poco atractiva- que de Catalu?a se da al resto de Espa?a. Si UCD, o cualquier partido, deseara dar una imagen triste de los procesos preauton¨®micos, ah¨ª est¨¢ el triste ejemplo catal¨¢n.

Tres ministros del Gabinete catal¨¢n afirmaron a EL PAIS, algo que es evidente para todo lector de peri¨®dicos: ?La gente no puede entender lo que sucede en la Generalidad, porque es algo que ni tan siquiera comprendemos nosotros mismos.? En base a esta misma evidencia es preciso reconocer que los ministros m¨¢s criticados por Tarradellas son, por lo menos en los casos del socialista Narcis Serra y del comunista Ram¨®n Espasa, aqu¨¦llos cuya labor destacaba por su dedicaci¨®n, unida a una real capacidad t¨¦cnica. Y ello, en un Gabinete donde pueden hallarse pruebas de incapacidad en otros departamentos. La raz¨®n de las cr¨ªticas ser¨ªa, pues, pol¨ªtica y no t¨¦cnica. O bien, en el caso de Rahola, meramente formal.

En todo el conflicto hay elementos personales y psicol¨®gicos -de estructura de la personalidad- que pueden, en casos, llegar a primar sobre los pol¨ªticos. Diversas fuentes directas coinciden plenamente en ese punto. Ahora Tarradellas ha conseguido someter a los parlamentarios, neutraliz¨¢ndolos claramente. Ello puede bastar. El cambio de Gabinete puede efectuarlo en el momento que considere oportuno y con la coreograf¨ªa que prefiera. Nos hallamos ante la pasi¨®n catalana por la liturgia, se?alada por Unamuno.

A ¨²ltimas horas de ayer, un ministro sin cartera indic¨® que Tarradellas iba a proponer una alternativa de funcionamiento por escrito. Precis¨® que Tarradellas tambi¨¦n se hab¨ªa referido varias veces a la necesidad de coordinaci¨®n y a la posibilidad de nombrar coordinador gubernamental. Para esta funci¨®n, la ¨²nica candidatura que sospechan los medios pol¨ªticos catalanes es la de Manuel Ort¨ªnez, antiguo intermediario entre Tarradellas y Adolfo Su¨¢rez.

Respecto a la reuni¨®n del Gabinete de hoy, su orden del d¨ªa contiene cinco puntos, m¨¢s el de ruegos y preguntas. El primero se refiere al estado de los traspasos de servicios. El segundo contempla el ¨²ltimo acuerdo Su¨¢rez-Tarradellas, del 15 de abril. El tercero se refiere a la presencia del catal¨¢n en la escuela. El cuarto consiste en un informe sobre el nombramiento de delegados provinciales por parte del Ministerio de Sanidad del Gobierno central, hecho que se consider¨® negativo para la autonom¨ªa, al requerirse un solo delegado regional para toda Catalu?a. El quinto se refiere a la creaci¨®n de la medalla de oro de la Generalidad, cuya primera concesi¨®n ser¨¢ para el pintor Joan Mir¨®.

La inclusi¨®n del primer punto en el orden del d¨ªa -situaci¨®n de los traspasos de servicios- es debida a una petici¨®n del Gabinete, poco deseada por Tarradellas. Ello habr¨ªa motivado que, pese a haber pasado varias semanas desde la ¨²ltima reuni¨®n del Gabinete, el acta de la misma no haya sido mostrada, como es habitual, a todos los asistentes.