"Los socialistas no tenemos la voluntad de reformar esta Constituci¨®n"
?Estamos ante el alumbramiento de una Constituci¨®n democr¨¢tica, v como en todo alumbramiento hay algo de dolor y de alegr¨ªa. Dolor por la actuaci¨®n de liberticidas que quieren acabar con la democracia v la libertad.Los socialistas hemos dado nuestro voto un¨¢nime a la Constituci¨®n desde el profundo respeto que nos inspiran los que se pronunciaron por el no y por la abstenci¨®n. En ello consiste precisamente la democracia, y el no y la abstenci¨®n son capaces de asumir el texto constitucional y luchar desde ella por su reforma. En este sentido entendemos la abstenci¨®n del PNV como algo positivo que encara el futuro con esperanza y alegr¨ªa, como es tambi¨¦n positivo el si, el no y la abstenci¨®n de Alianza Popular, porque parten de la aceptaci¨®n del texto constitucional, aunque sea para mostrar su desacuerdo.
Los socialistas no decimos que estemos absolutamente indentificados con esta, Constituci¨®n, pero s¨ª que la aceptamos y defenderemos desde el pre¨¢mbulo al ¨²ltimo art¨ªculo. Hace a?os que defendemos la necesidad de un proceso constituyente. Hoy acaba un per¨ªodo de provisionalidad democr¨¢tica, de ruptura no en su sentido traum¨¢tico, sino en su sentido m¨¢s noble: la creaci¨®n de las bases para la convivencia democr¨¢tica.
Encaramos un futuro de afianzamiento de la democracia, en el que cada uno deber¨¢ ocupar su sitio, un per¨ªodo superador del consenso, sin que ello signifique caer en la tentaci¨®n de encontrar enemigos. Ya existe una base firme y segura para ofrecer las distintas alternativas que existen en las C¨¢maras y fuera de ellas y de hacerlo serenamente.
Algunos dicen que ¨¦sta no es una Constituci¨®n brillante. Puede ser, no es el fruto de una torre de marfil, sino de un compromiso, y desear otra cosa ser¨ªa deshonesto.
Quiero, por si existe alguna duda, aclarar el significado de la disposici¨®n octava del proyecto constitucional, del que se tratan de sacar interpretaciones diversas. Mediante esta disposici¨®n ning¨²n poder se leg¨ªtima en este pa¨ªs a partir del refrendo popular de la Constituci¨®n sin someterse al propio texto constitucional, sin pasar por las reglas de juego que ¨¦l establece. Despeja todos los humos que hayan podido existir sobre qu¨¦ hacer al d¨ªa siguiente de aprobada la Constituci¨®n. El Gobierno deber¨¢ pasar por el voto de investidura o, a su gusto, iniciar el proceso para la convocatoria de elecciones generales.
Por ¨²ltimo, queremos decir que los socialistas no tenemos en este momento la voluntad de reformar la Constituci¨®n, pero aceptamos su perfectibilidad y admitimos que el pueblo, cuando ya est¨¦ rodada, desee su modificaci¨®n para adaptar la realidad del momento.
Esta es la Constituci¨®n de la libertad, de la democrac¨ªa y de las autonom¨ªas.?
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