Recuperaci¨®n del d¨®lar en los mercados europeos
Una recuperaci¨®n del 10 % en sus cotizaciones present¨® ayer el d¨®lar norteamericano en los mercados de Franfort y Bonn como consecuencia directa de las nuevas disposiciones se?aladas por el presidente Carter, en apoyo de su divisa. En los mercados alemanes el d¨®lar se cotiz¨® ayer a 1,90 marcos. Los expertos de los mercados financieros consideraron positivas las medidas de Carter, pero puntualizaron que ?faltan datos fundamentales para concluir que se trata de una situaci¨®n duradera?.Los expertos financieros alemanes est¨¢n dispuestos a cooperar en los esfuerzos de la banca estadounidense en sostener las cotizaciones del d¨®lar. Esta intervenci¨®n coordinada quedar¨¢ materializada por lo pronto con la compra por el Banco Federal Alem¨¢n de seiscientos millones en derechos especiales de giro (DEG). Al tiempo, el consejo central bancario de la Rep¨²blica Federal de Alemania ha decidido tambi¨¦n incrementar las posibilidades de intervenci¨®n coordinada, mediante el aumento a 6.000 millones de d¨®lares de los cr¨¦ditos a corto plazo entre los dos bancos nacionales.
Pero todas estas medidas realmente coyunturales no ocultan el riesgo que comporta el paquete de medidas del presidente Jimmy Carter. En Alemania Federal no se pierde de vista la pr¨®xima elevaci¨®n del precio del petr¨®leo y las dificultades de pago del crudo sobre la base del d¨®lar. El aumento del inter¨¦s bancario, ?significar¨¢ una reestructuraci¨®n de los cr¨¦ditos exteriores?
La Democracia Cristiana de Bonn ha reaccionado vinculando la nueva situaci¨®n del d¨®lar con las aspiraciones del canciller Schmidt de crear el nuevo fondo monetario europeo orientado a establecer en la CEE un sistema dotado de mayor estabilidad de la que, hasta ahora, ha ofrecido el d¨®lar. Para los conservadores, el empe?o de Schmidt en sacar adelante este proyecto no significa m¨¢s que ?hipotecar el prestigio interior y exterior? de la econom¨ªa alemana.
Los hombres de negocio norteamericanos residentes en Bonn han reaccionado positivamente ante la determinaci¨®n del presidente Carter, como era de esperar. Su presidente, Jack Bradley, ha dicho a este respecto que ?muchas empresas norteamericanas hab¨ªan llamado ya a sus representantes para dejar el puesto a alemanes?. Raz¨®n: el elevado costo de un equipo de t¨¦cnicos norteamericanos en suelo alem¨¢n.
Sin embargo, no todas las empresas norteamericanas han perdido durante los meses de decaimiento del d¨®lar. Las filiales alemanas de empresas de Estados Unidos han exportado a sus firmas matrices, en dividendos, cifras verdaderamente lucrativas. En base al cambio del d¨®lar registrado en los ¨²ltimos meses, y en el pasado a?o, durante 1977 la filial alemana de Exxon remiti¨® a la empresa central trescientos millones m¨¢s de d¨®lares; la Ford de Colonia, 326 millones a la hom¨®loga de Michigan, y la IBM de Stuttgart a la central norteamericana, dividendos por valor de 761 millones de marcos. Otro tanto podr¨ªa decirse de las dem¨¢s multinacionales con central en Estados Unidos. Tanto es as¨ª que alguna empresa norteamericana, como la Warner Communications, cotiza desde el pasado martes en la Bolsa de Francfort contra marcos fuertes.
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