"Argala", dirigente de ETA, asesinado en Francia
Jos¨¦ Miguel Be?ar¨¢n Orde?ana, Argala, uno de los m¨¢ximos dirigentes de ETA militar, muri¨® ayer por la ma?ana en la localidad vascofrancesa de Anglet al hacer explosi¨®n un potente artefacto colocado en su coche. Hasta el momento, ¨²nicamente una organizaci¨®n autodenominada OA, de car¨¢cter ultraderechista, ha reivindicado el atentado en una llamada hecha en la ma?ana de ayer al peri¨®dico bilba¨ªno La Gaceta del Norte. En medios de refugiados vascos, en el sur de Francia, se considera que la acci¨®n es propia de agentes o servicios paralelos.
Los hechos ocurrieron hacia las 9.30 en la localidad de Anglet, situada entre Bayona y Biarritz, a unos 30 kil¨®metros de la frontera de Hendaya. Jos¨¦ Miguel Be?ar¨¢n ten¨ªa aparcado su coche en un parking ajardinado al aire libre, situado en medio de unos bloques de viviendas de cinco pisos, denominados Dous-Bos. Argala, con nombre supuesto, viv¨ªa en compa?¨ªa de su mujer, en uno de los pisos de la urbanizaci¨®n, situada detr¨¢s del hipermercado Casino.Hacia las nueve y media de la ma?ana, Jos¨¦ Miguel Be?ar¨¢n lleg¨® junto a su coche, un R-5 color anaranjado, matr¨ªcula 9586-RB-64. Accion¨® la llave de contacto del veh¨ªculo, y al iniciar la marcha hizo explosi¨®n un potente artefacto que, seg¨²n los expertos, hab¨ªa sido colocado junto a la rueda izquierda delantera. La explosi¨®n fue de tal magnitud, que los restos del veh¨ªculo salieron despedidos en un radio de cien metros. El cap¨® y el techo volaron a unos veinticinco metros, y el cuerpo mutilado de Argala -sin piernas y con fuertes desperfectos en los brazos- fue lanzado por los aires para caer detr¨¢s de los restos del coche. La muerte fue instant¨¢nea.
Trozos de la carrocer¨ªa del veh¨ªculo, mezclados, al parecer con abundante metralla, entraron por las ventanas y puertas de las viviendas. La onda expansiva del artefacto rompi¨® todos los cristales de los coches aparcados en los alrededores y los de la mayor parte de las casas cercanas. Al menos tres personas que se encontraban pr¨®ximas al lugar de la explosi¨®n fueron heridas, aunque de escasa, consideraci¨®n, por trozos de cristales.
Las primeras personas que llegaron junto al coche describen como impresionante la estampa que ofrec¨ªan el coche destrozado y el cuerpo de Argala mutilado. Entre estas personas estaba la esposa de Jos¨¦ Miguel Be?ar¨¢n, Asunci¨®n Arana -contrajeron matrimonio en febrero de 1977 en la isla de Yeu-, quien lleg¨® precipitadamente junto a su marido, pocos minutos despu¨¦s de escuchar la fuerte explosi¨®n.
El cuerpo de Argala fue trasladado, hacia las 11.30 de la ma?ana al hospital de Bayona, donde se certific¨® su defunci¨®n.
El juez y el fiscal del distrito se personaron en el lugar del atentado, donde se hab¨ªan depositado por la ma?ana ramos de flores. Las primeras investigaciones han demostrado que el artefacto estaba fabricado con material explosivo franc¨¦s y hab¨ªa sido colocado junto a la rueda izquierda delantera del coche de Argala con cables sujetos con pinzas de colgar la ropa, con el fin de que explosionara al ponerse en movimiento el autom¨®vil.
En c¨ªrculos de refugiados vascos ,en las localidades fronterizas se considera el atentado obra de fascistas espa?oles y franceses. No descartan la colaboraci¨®n en el mismo de elementos de la- polic¨ªa francesa; en estos mismos c¨ªrculos se se?ala que el autor o los autores son profesionales que deb¨ªan conocer bien los movimientos de Argala, que acompa?aba con rigurosas medidas de seguridad sus movimientos, hasta el punto de que muchos de sus compa?eros no conoc¨ªan su domicilio.
?Poca gente sab¨ªa d¨®nde viv¨ªa Argala, ni mi propio hermano, que era su abogado declaraba ayer a EL PA?S el tambi¨¦n abogado Coco Abeberry-. Jos¨¦ Miguel Be?ar¨¢n era un hombre sumamente prudente, y parec¨ªa fuera de peligro. Viv¨ªa en situaci¨®n irregular, y muy pocos conoc¨ªan de sus movimientos. En ambientes de refugiados vascos se piensa que los informes sobre sus pasos han tenido que partir de los servicios policiales franceses o de elementos cercanos a ellos.? A las dos y media de la tarde se recib¨ªa en la Gaceta del Norte, de Bilbao, una llamada de una organizaci¨®n que se identific¨® como OA. Tras reivindicar el atentado contra Jos¨¦ Miguel Be?ar¨¢n, el an¨®nimo comunicante dio el grito de ?Arriba Espa?a!
Otra llamada similar se recib¨ªa a las siete menos diez de la tarde de ayer en la delegaci¨®n en Pamplona del diario vasco Deia. Una voz masculina repiti¨® por dos veces, con voz pausada, ?Aqu¨ª el Batall¨®n Vasco-Espa?ol. Reivindicamos el atentado contra Argala, en Anglet?.
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