El monarca, en Rabat "no quiere saber nada de periodistas"
El sha de Ir¨¢n, profundamente afectado por los ¨²ltimos acontecimientos de su pa¨ªs y la ejecuci¨®n de cuatro generales que fueron sus m¨¢s ¨ªntimos colaboradores, se ha trasladado al palacio de Dar el Salam, en las afueras de Rabat, y no quiere ?saber nada de periodistas ya sean amigos o enemigos?, seg¨²n Salhat Sepahbodi, hasta hace unos d¨ªas embajador de Ir¨¢n en Marruecos y hoy probablemente sin destino, aunque ¨¦l mismo rehuse hacer comentarios sobre su status.
Estancia prolongada en Marruecos
Al parecer se desconocen los proyectos del sha. Seg¨²n algunas fuentes marroqu¨ªes, el palacio que habita ahora ha sido acondicionado para una prolongada estancia. Dar el Salam fue construido hace unos veinte a?os, cuando Marruecos desplegaba una gran actividad internacional principalmente a trav¨¦s del ?grupo de Casablanca?. Fue concebido como residencia para los numerosos reyes y jefes de Estado que visitaban y visitar¨ªan el pa¨ªs.
Seg¨²n fuentes iran¨ªes, el sha se ha encerrado all¨ª con una reducida guardia personal, y su seguridad la garantizan los marroqu¨ªes.
Seg¨²n fuentes iran¨ªes, el sha se funcionarios diplom¨¢ticos iran¨ªes es muy inc¨®moda, pues, por una parte, Marruecos ha reconocido ?la nueva situaci¨®n en Ir¨¢n?, pero, por otra, el sha contin¨²a gozando del tratamiento de un jefe de Estado en ejercicio.
El traslado del sha de Marrakech a Rabat tuvo lugar el jueves, aparentemente por carretera, con un cortejo como el que es habitual para las grandes personalidades Es muy posible, sin embargo, que el propio sha fuese trasladado por razones de seguridad por otros medios con menos riesgos y m¨¢s r¨¢pidos.
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